Discurso Conmemorativo, Licenciatura 4| Medio

Director, inspectores, cuerpo docente en general, padres y apoderados, familiares, amigos y compañeros de cuarto medio promoción 2013, tengan todos ustedes muy buenas noches.

Es difícil comenzar a decir las últimas palabras cuando realmente no quiero cerrar ésta hermosa etapa. Sintiendo que aun me falta vivir este año. Pero así es, lo hemos logrado y hoy el liceo nos abre las puertas por última vez como alumnos del Mixto. A lo largo de este tiempo, hemos experimentado todo lo que un ser humano puede sentir, tantas risas y alegrías vividas entre nosotros, también tantas tristezas y penas.

Hace ya 13 años, para algunos más, empezamos este camino que, en un principio, parecía eterno, pero que hoy vemos finalizar llenos de orgullo. Más de 13 años de esfuerzo, que empezamos temerosos al entrar al primer día en kínder, algunos al jardín, sin saber bien qué hacíamos ahí, sin darnos cuenta de que realmente ahí comenzaba nuestra vida. A partir de ese momento, comenzarían a hilarse miles de historias, vivencias, emociones y amistades. Desde ahí hasta ahora, ¡cómo pasa el tiempo! Mírenos ahora, sentados en esas sillas viviendo el último día, recordando desde el primero, terminando esta gran etapa de la vida: el colegio.

Ha sido un trayecto difícil, eterno para algunos, pero ya lo finalizamos hoy por fin. Llegaron muchas personas en el camino, personas que sin duda cambiaron nuestras vidas y la percepción que tenemos de ésta. Algunos están sentados aquí ahora egresando junto a nosotros, otros quizá no lo están, ya sea por ser de otro curso, o como en mi caso, quizá salieron antes que nosotros del colegio. Tristemente hay personas que se fueron o se quedaron en el camino, o que conocimos en otros establecimientos, antes de ingresar al Mixto. Pero aunque hoy no estén sentados en estas sillas, ocupan un hermoso lugar, en nuestro corazón, al igual que cada uno de los que se encuentran aquí.

Recién hace pocos meses entendí lo que tanto escuché de los grandes desde siempre. Que el colegio es una de las etapas más bonitas de nuestra vida. Llegamos con las manos prácticamente vacías y hoy están llenas completamente, pero no solo con los títulos de nuestras carreras o la inteligencia educativa de los cursos Científico-Humanista, sino también de los valores que aprendimos y practicamos entre nosotros.

Sería difícil para mí deshacerme de las memorias de todos los días felices que viví aquí. Llegué al mixto el año pasado. Realmente agradezco a la vida y al destino haberme puesto en este lugar. He crecido todo lo que no pude crecer antes y me he atrevido a hacer mucho de lo que ni siquiera me hubiera imaginado que haría en otra parte.

Es probable que sintamos nostalgia de los días en el colegio, del constante color rojo oscuro en los pasillos, de todos los momentos he instancias vividas en las salas de clases. En este preciso momento los pasillos y salas que

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