Donde Nacio La Paz

Donde nació La Paz

-Rolando Carvajal *

La cancha de Churubamba –esa pequeña pampa emplazada en el recodo donde se juntan los milenarios Choqueyapu y Apumalla, que acogió a los primeros españoles probablemente venidos desde 1533 (cuando Gabriel de Rojas se topó con los almagristas saliendo de su exploración al Collao, los Charcas y los Chiriguanaes), y que posiblemente vio emerger un día de fines de 1538 (diez años antes de asentar el pueblo nuevo del Chuquiabo) al capitán Alonso de Mendoza y sus harapientas tropas emergentes de la entrada a los Moxos, allá en las veredas del lejano río Diabeni de los Omapalcas– es por muchos motivos no sólo el centro primigenio donde se asentó un martes 23 de octubre el Pueblo Nuevo traído desde Laja, sino la madre de todas las plazas paceñas y el epicentro indígena/plebeyo/criollo de una ciudad hoy cosmopolita que guarda en sus entrañas la raíz de todo el mestizaje racial, el sincretismo religioso y cultural, y toda la simbiosis que hace posible la coexistencia de visiones y pensamientos diferentes en un solo espacio multifacético y, como diríamos ahora, intercultural.

Con base en la tradición superviviente y la historia oral, la primera descripción de la explanada de Churubamba tempranamente colonial pertenece a Luis S. Crespo, que sin mencionar fuente, la difundió en 1903, siendo repetida por Aranzaez en 1915 y los autores del IV Centenario en 1948:

En el vértice de las dos plazas, una de españoles y otra de indios la casa del fundador ocupaba el frente principal de la plaza indiana [ex calle Ancha, actual Av. América), infiriéndose que colindaba con capilla primitiva [actual de San Sebastián) y el cementerio-hospital que se conoció después como de “la Misericordia”.

Al frente, en la inmediata esquina opuesta, “la casa del Cabildo” (hoy edificio SantaAnita) “dominaba ambas plazas”. Así, la primera residencia de Mendoza, donde recibió a Pedro Cieza de León, estuvo entre la iglesia primigenia y el Cabildo provisional, distintos de la catedral y el Cabildo titular que se construirían en torno a la plaza de armas, bajo el esquema cuadriculado del damero español.

“La primitiva población ocupaba solamente la parte norte, comprendida entre Challapampa (planicie de arena) y el río Apumalla”, dice Crespo. »Se asignaron dos plazas, una para los españoles ... y otra para los indígenas, o sea la calle ‘América’ unida a la de la ‘Recoleta’”.

»Una acequia descubierta conducía sus aguas desde las alturas de Munasiñ-pata (altura del amor) y después de atravesar la plaza de los indios, cortaba triangularmente la de los españoles”, presentando ambas “un campo de verde yerba” empedrado después, partir de 1860.

»El frente principal de la plaza indiana pertenecía al fundador, de cuya esquina para arriba ocupaban los Kañaris (indios domésticos

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