ClubEnsayos.com - Ensayos de Calidad, Tareas y Monografias
Buscar

EL DEPORTE COMO ESTRATEGIA PARA FORTALECER LA SOLIDARIDAD


Enviado por   •  27 de Noviembre de 2012  •  1.487 Palabras (6 Páginas)  •  753 Visitas

Página 1 de 6

INTRODUCCIÓN

El deporte es una institución, una forma de vida que se ve con una organización jurídica y material que se vincula a otras instituciones y que tiene a su vez la misión de incorporar el cuerpo en el orden social. Por ello, por su complejidad, no podemos abordar el estudio de la educación física y deporte en términos puramente técnicos, pues el deporte aparece naturalmente vinculado al movimiento y al ejercicio, y el ejercicio es la base de la educación física, es una parte fundamental de ella y su trascendencia social hace que muchas veces sea un elemento notable a la hora de conseguir fines e integraciones que de otra forma parecerían impensables.

Durante mucho tiempo, ha sido considerado como una excelente vía de promoción y desarrollo de valores sociales y personales y han sido numerosos los autores que han señalado valores relacionados con el desarrollo personal, el descubrimiento y la educación social, los cuales perduraran durante toda la vida. Sin embargo, últimamente han surgido voces discrepantes con estas afirmaciones, que se basan en la progresiva relevancia del deporte como fenómeno social y su forma de practicarlo, poniendo en tela de juicio su aspecto formativo en lo referente fundamentalmente a los valores éticos.

La trasmisión de valores mediante la práctica deportiva, el desarrollo de valores personales y sociales debe hacerse mediante un planteamiento que considere las características y circunstancias de los alumnos y deportistas, las del contexto, y las de los agentes implicados en el mismo, de forma que se generen unas directrices precisas que fomenten ese gran potencial que atesora la práctica deportiva.

Numerosos autores han señalado que la actividad física y el deporte pueden resultar excelentes medios para transmitir valores personales y sociales tales como respeto, autocontrol, autoestima, empatía, esfuerzo, autonomía, cooperación, ayuda a los demás, hábitos saludables o liderazgo. Sin embargo, la actividad físico-deportiva por sí misma no desarrolla los valores anteriormente citados de forma automática.

En numerosas ocasiones se asume que la simple práctica deportiva favorece el desarrollo personal y social de aquellos que la realizan sin que realmente existan evidencias de que esto sea así. Para favorecer el desarrollo de valores personales y sociales a través de la participación en actividades físico-deportivas es necesario establecer estructuras y utilizar estrategias específicas debidamente elaboradas que promuevan estos conceptos.

A pesar de que la educación física goza de una importante tradición escolar obligatoria en distintos niveles y muchos sistemas educativos nacionales, parece ser, como indica Hoyle (1986), que se encuentra en un bajo nivel jerárquico dentro de las asignaturas escolares. Como reacción, compensación a la visión antiacadémica de la asignatura, la profesión de la educación física ha desarrollado tres destacadas formas para aumentar su prestigio: a) la perspectiva deportiva; b) la recreacionista; y c) la pseudo académica.

La primera de ellas se apoya en el desarrollo de habilidades físicas, cuyo foco de atención es el deportista de élite y los alumnos más capacitados de la clase y su fin es el de formar exitosos equipos deportivos escolares. Esta perspectiva presenta un escaso valor educativo, por lo cual no se justifica su aplicación dentro el sistema escolar. La perspectiva recreacionista viene a ser una reacción radicalmente opuesta a la anterior, en la cual la diversión constituye su razón de ser.

En ella, la idea de que las actividades físicas pueden ser un importante medio educativo pierde su valor para convertir a la educación física en hedonismo y simple descanso de las asignaturas académicas, las verdaderamente importantes. La tercera perspectiva pretende aumentar el prestigio de la educación física convirtiéndola en una asignatura pseudoacadémica. Para algunos entusiastas equivale a legitimar definitivamente a la educación física como una asignatura escolar.

Ante este panorama, Devís Devís (1992), recomienda la necesidad de que la educación física busque caminos de innovación que la acerquen a valores educativos intrínsecos, de manera tal que pueda demostrarse la importancia de la asignatura en términos educativos, presentando unos fines y metas congruentes con los de la escuela en general. Entre los dos extremos representados por la competición de alto nivel y el deporte recreativo de esparcimiento, se encuentra el deporte educativo, que constituye una verdadera actividad cultural que permite una formación básica y luego, una formación continua a través del movimiento, es decir, aquel cuya pretensión fundamental es colaborar al desarrollo armónico y potenciar los valores del individuo (Domingo Blázquez, 1995)

Este tipo de manifestación del deporte encuentra su máxima expresión en el marco de la educación física escolar y en el deporte

...

Descargar como (para miembros actualizados) txt (10 Kb)
Leer 5 páginas más »
Disponible sólo en Clubensayos.com