EL HOMBRE MAS RICO DE BABILONIA. En este libro se clasifica en varios capítulos en los que nos relatan varias historias de cómo podemos triunfar en el terreno financiero, así mismo como aplicar los principios fundamentales.

EL HOMBRE MAS RICO DE BABILONIA

En este libro se clasifica en varios capítulos en los que nos relatan varias historias de cómo podemos  triunfar en el terreno financiero, así mismo como aplicar los principios fundamentales.

Nos da un panorama de cómo lograr el éxito financiero de cómo podemos tener más dinero, saber cuándo debemos de prestar dinero y la forma de  invertir.

Los mensajes que transmiten en este libro, no están fuera de la realidad, nos hace reflexionar que no hay que dejar pasar las oportunidades y ser más decididos en la hora de hacer negocios así poder incrementar nuestro dinero.

Además nos enseña cómo salir de las  deudas si seguimos las reglas señaladas, a ahorrar y también el presupuestar nuestros gastos.

Las reflexiones que se citan nos ayudan para mejorar en nuestra vida

EL  HOMBRE QUE DESEABA ORO

Bansir era el fabricante de carros de la ciudad de Babilonia, se sentía muy desanimado porque él tenía que trabajar duro para alimentar a su familia y no le sobraba dinero a pesar de echarle ganas al trabajo.

Kobi era un músico que le pasaba lo mismo que a Bansir.

Ellos eran amigos de la infancia concluyeron que a pesar de trabajar mucho no obtenían más dinero, nada mas lo suficiente para vivir y entonces debían de buscar una fuente de ingresos. Entonces se acordaron de Arkad y lo iban a buscar para que les aconsejara, como él podía tener dinero, ya que él si había triunfado económicamente y ellos no.

EL HOMBRE MAS RICO DE BABILONIA

Arkab era un hombre muy rico y era admirado en todo el Mundo,  pero su fortuna crecía más de lo que gastaba.

Koibi y Bansir le pidieron que les explicara cómo se había vuelto un hombre tan rico.

Arkad les dijo que cuando era joven se dio cuenta de que de todas las cosas buenas que podían dar la felicidad y muchas de ellas eran obtenidas con la riqueza.

Así mismo que la riqueza es un poder, la riqueza hace posible muchas cosas como amueblar una casa, navegar por mares lejanos, etc.

Y  fue cuando entonces Arkad comprendió y se prometió que tendría  de su parte de las cosas buenas de la vida.

Les recordó lo que su profesor les decía de que el estudio tenía dos niveles: Las cosas que ya hemos aprendido y que ya sabemos; y la formación que nos muestra cómo descubrir las que no sabemos.

Arbad les comento que cuando él decidió  buscar lo que había que hacer para acumular riquezas y cuando lo encontró, él tenía la obligación de hacerlo bien.

También les comento que trabajo de joven  en puesto de escriba en la sala de archivos, sin embargo, nada le quedaba de lo que ganaba.

Un día Algamish el prestamista vino a la casa del señor de la ciudad y encargo una copia de la novena ley , trabaje duro, pero la ley era larga y cuando Algasmish volvió, no había terminado, entonces le dije como puedo hacerme rico y trabajare toda la noche, Algamish acepto el trato.

Regreso al día siguiente le entre el trabajo y el estaba dispuesto a cumplirla.

Entonces Algamish le dijo reten bien estas palabras si quieres captar la verdad de lo que te voy a decir encontré el camino de la riqueza cuando decidí que una parte de todo lo que ganaba me tenía que pertenecer. Lo mismo será verdad para ti.

Además que tenía que   guardar la decima parte de lo que  ganaba, también me dijo si te quieres hacer rico, tus ahorros te deben rendir y estos rendimientos rendirte a su vez, todo esto te ayudara a conseguir la abundancia de que estas ansioso.

También les relato todos los tropiezos que tuvo, hasta que finalmente estaba  aplicando lo que le había aconsejado Algamish.

Algamish  le dijo has aprendido por ti solo la manera de conseguir dinero, de conservarlo y de usarlo, de modo que eres competente y estás preparado para asumir un puesto de responsabilidad, entonces me ofreció de encargarme de sus tierras y de ser socio, entonces me encargue de los negocios y estaba lleno de ambición y había aprendido las tres reglas de gestión de la riqueza, Algamish falleció y me quede con la que había convenido.

Arkab les recomendó que pongan en práctica los sabios principios de Algamish y les dice : una parte de todo lo que gano me revierte y la he de conservar, otra organizar vuestros gastos y por ultimo invertir vuestro patrimonio con la mayor prudencia para no perderlo, consultar a los hombres sabios quienes manejan dinero todos los días

LOS SIETE MEDIOS DE LLENAR UNA BOLSA VACÍA

EL rey Sargón regreso a Babilonia después de vencer a los elamitas encontró a Babilonia sumida en una depresión total, no había dinero para la población.

Los obreros no tienen trabajo, los comerciantes tienen escasos clientes, los agricultores no pueden vender sus productos, el pueblo no tiene oro suficiente para comprar comida.

El Rey no se explicaba a donde se había ido todo el dinero que habían gastado en mejoras, el canciller comento  que se  habían  ido a parar a manos de  algunos pocos hombres muy ricos de la ciudad.

Ordeno el rey que trajeran  a Arkad, el comento la situación delicada que tenia la ciudad porque son pocos los hombres que conocen la manera de adquirir riquezas  y que tenían que enseñar a toda la población como conseguir riquezas.

Arkad acepto enseñarles las siete maneras que le habían permitido de que su fortuna floreciera.

Dos semanas después las cien personas elegidas estaban en la sala del templo del Conocimiento del rey.

Arbad les comento como él empezó de la nada y que pusieran mucha atención de las maneras sencillas de llenar la bolsa.

Primera manera: Empezad a llenar vuestra bolsa

Primer método es: De cada diez monedas que ganen y guarden en su bolsa, retiren sólo nueve para gastar. Su bolsa comenzará a abultarse rápidamente y sentirán una agradable sensación y producirá una satisfacción personal. No se burlen de lo anterior porque parezca simple, pero es la verdad.

También comento que desean con más fuerza, satisfacer los deseos de cada día, joyas, muebles, ropa, comida cosas que desaparecen y o bienes sustanciales como el oro, las tierras, los rebaños, las mercancías, las inversiones. Las monedas que tomas de la bolsa les darán las primeras cosa, las que no retiras, los segundos bienes.

La segunda manera: Controlad vuestros gastos

Lo que concierne a los hombres y a sus hijos: los gastos que llamamos obligatorios siempre crecen en proporción a nuestros ingresos si no hacemos algo para evitarlo.

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