EL MACHISMO EN EL ECUADOR, ¿CÓMO INFLUYE EN LOS NIÑOS?

L MACHISMO EN EL ECUADOR, ¿CÓMO INFLUYE EN LOS NIÑOS?

En nuestra sociedad, desde hace mucho tiempo, la familia ha sido patriarcal; hecho que marcó el predominio del hombre sobre la mujer, clasificando el trabajo para hombres y mujeres, diferenciándolo por su fuerza y por su rol. Esta costumbre se ha transmitido de generación en generación y se ha podido ver que la sociedad ecuatoriana es machista.

El machismo es una actitud de prepotencia de los varones sobre las mujeres. A quien aplica esto se lo denomina machista. Existe en muchos hombres un sentido muy arraigado de esta prepotencia. La mujer tiene que servir al hombre como una obligación, recibir groserías y ordenes, privándose así de su propia libertad.

La mujer no puede opinar ni exponer su criterio, no puede superarse más que el esposo, en definitiva, es una esclava.

En los hogares que tienen un padre machista, a más de maltratar a la mujer, transmiten este sentido a sus hijos y

en vez de reducirlo lo multiplican, porque ellos formarán algún día sus hogares con las mismas características. Nuestros abuelos cuidaban que sus esposas no expongan su cuerpo, tapando su cabeza, y usando vestidos largos. Hacían que los niños jueguen lejos de las niñas, siempre pendientes que la educación de ellos sea, fuerte y dominante, para que pueda mandar sobre la mujer.

Con estas actitudes estamos dañando la sociedad. Hemos dejado en segundo plano a la mujer, olvidando que ella tiene la suficiente capacidad como para estar en iguales condiciones que el hombre. Se ha discriminado su labor y no se ha dejado que aporte a la sociedad con lo más hermoso que tiene, el poder de ser madre, lo que le permite dar ternura, amor, compresión, valores que debería estar presentes en nuestro medio y que permiten tener niños, jóvenes y hombres más justos y más humanos.

Deberíamos tratar de criar niños menos machistas y más tiernos, amables y generosos.

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