EL NIÑO NUEVO

El niño nuevo

Es el primer día de clases para los alumnos de 3ro de primaria de un colegio privado, todos están muy entusiasmados por volver a ver a sus amigos y contar lo que hicieron en sus vacaciones. Minutos después entra la maestra…

• Maestra: Buenos días mis pequeños, ¿qué tal sus vacaciones?, espero que se hayan divertido mucho. ¡Les tengo una sorpresa!

La maestra mira la puerta y hace señas para que alguien pase. Los niños al ver quién entra se quedan muy sorprendidos…

• Maestra: Saluden a su nuevo amigo, su nombre es Máximo y tiene muchas ganas de aprender y jugar con ustedes.

Ninguno de los niños lo saluda, y la maestra se queda muy extrañada.

• Maestra: Chicos, les acabo de decir que saluden a su nuevo amigo, ¿no me han escuchado?
• Ariadna: Es que miss, él es “negro” y es el hijo de la conserje.
• Jimena: Si miss, también se ve que su ropa está muy vieja.

La maestra se da cuenta que Máximo se empieza a sentir muy mal por lo que le dicen sus compañeras y porque todo el salón empezó a reírse, no sabe muy bien cómo actuar, pero trata de improvisar para ayudar a su nuevo alumno…

• Maestra: Dejen de hablar así. Hoy se quedan todos sin recreo.
• Todos: Pero maestra, ¡no puede hacer eso!
• Maestra: Claro que puedo. Ahora todos siéntense, luego hablaremos al respecto. Máximo, cariño, ve a sentarte, al lado de Alonso hay un sitio libre.
• Máximo: Está bien maestra.
• Maestra: Bueno alumnos, empezaremos con la clase.

Mientras la maestra hacía su clase…

• Alonso: ¡Holaa Máximo!
• Máximo: Hola
• Alonso: ¿Estás bien?
• Máximo: No mucho
• Alonso: No estés triste. Esas niñas son muy creídas, no hagas caso a lo que dicen.
• Máximo: Pero tienen razón, yo no soy como ustedes. No tengo mucho dinero y estoy aquí porque mi mamá trabaja limpiando el colegio.
• Alonso: Y eso no debe importar, eres igual a todos nosotros.
• Máximo: Ya pasó, no importa. Creo que nunca encajaré aquí.
• Alonso: ¿Quieres que sea tu amigo?
• Máximo: ¿De verdad quieres ser mi amigo?
• Alonso: Claro que sí, te acabo de conocer y me has caído muy bien.
• Máximo: Tú también me caes muy bien, pero creo que dejarán de ser tus amigos por juntarte conmigo.
• Alonso: Ellos no son mis amigos, ninguno de ellos me cae bien. Son muy creídos y tratan mal a los demás. Se creen la gran cosa por tener mucho dinero y ser “blancos”.

En eso escuchan que tocan el timbre para indicar que es el recreo.

• Maestra: Recuerden que hoy están castigados, sólo Máximo saldrá al recreo.
• Jimena: Pero miss, eso no es justo.
• Ariadna: ¿Por qué él si puede salir y nosotros no?
• Maestra: Porque Máximo no se ha comportado mal. Máximo, ve a jugar y a comer algo, cuando vuelva a sonar el timbre es la señal para que regresas al aula.

Máximo se levanta de su asiento y corre hacia la maestra. Le pide que se agache para que le susurre algo al oído….

• Máximo: Maestra, ¿Alonso puede venir conmigo?
• Maestra: Lo siento Máximo, pero todos están castigados por su mal comportamiento.
• Máximo: Lo sé maestra, pero Alonso y yo nos hemos hecho amigos, me ha tratado muy bien y no sería justo que a él también lo castigue.
• Maestra: Está bien Máximo.
• Máximo: Muchas gracias Maestra.
• Maestra: Alonso, tú también puedes salir.
• Ariadna: ¿Qué? ¿Por qué hace eso maestra?
• Maestra: Porque su compañero Alonso se ha comportado muy bien con Máximo.
• Jimena: Voy a quejarme con dirección, porque esto no es…
• Maestra: Silencio a todos, ya no quiero escuchar ninguna queja más. Alonso, ¿quieres enseñarle todo el colegio a Máximo por mí?
• Alonso: Claro Maestra. Con mucho gusto.

Máximo y Alonso salen del salón. La maestra les hace una señal a sus alumnos para que se sienten. Mientras estuvo haciendo su clase, recordó uno de los enfoques transversales que le ayudará mucho para solucionar esta situación.

• Maestra: Los he hecho quedarse no tanto por el castigo, sino porque quiero hacerles entender que lo que hicieron está mal.

Paula y Jimena tratan de interrumpir a su maestra para refutarle algo, pero la maestra no las deja…

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