EN LA LLUVIA

EN LA LLUVIA

Era una lluviosa noche caminaba por las calles sin sentido alguno, visite muchos lugares y aun bajo la lluvia no podía encontrar lo que buscaba acariciaba la soledad como quien le brinda cariño a un niño todo era complicado nada podía estar peor a lo que estaba sintiendo luego en un parpadear ella llego parecía como se buscase algo impropio sutil sublime fue aquel momento en el que me acerque sin razón sin motivo y luego cerca de la ella la mire a los ojos esa hermosa mirada me cautivo me estremeció sus lagrimas se camuflaban con la lluvia que aun nos acompañaba.

El milagro de dios, el ángel aquella bella mujer me hiso olvidar el motivo por el que había salido de casa tan presurosamente, rente las horas y el tiempo se había detenido las gotas de lluvia podían tocarse aun en el aire el movimiento de las cosas parecía perdido pero aquel ser todavía seguía mirándome, sus ojos cambiaron, se dilataron y luego me abrazo poco a poco el tiempo fue acelerando, que acontecimiento tan raro.

No podía hablar de la impresión, quería saber quien era y ella hay mismo me respondió la pregunta. Creía que había leído mi mente pero no ella sabía todo de mí.

Valeria era su nombre, su suave voz acaricio mi alma en un segundo algo dentro de mi la conocía de hacia mucho tiempo. Eran muchas las incógnitas en  pero ese momento empecé a amarla como un loco olvide mi pasado y no sabia nada de mi.              

Quise  pronunciar  palabras  y  su  delicado  dedo toco mis  labios  como  queriendo  dar   silencio  nos quedamos   mirándonos  por  varios minutos  y  luego  ella hablo…                

¿Crees  en  los  ángeles?-  me  pregunto   inmediatamente dije si sabe yo solía ser un ángel   hasta  el día  de hoy. Fui tu ángel guardián, te vi nacer, caminar  y reír, incansables veces  llorar,  triunfar,  estuve contigo  cuando perdiste  a tus padres  y Salí contigo a fiestas,  te acompañé  en  tus  sueños  y  cuide  de  ti.. En tu  enfermedad.

Quede en silencio, mudo…. Asustado.

Se que debes estar confundido pero te diré la verdad hoy saliste de tu casa corriendo sin poder hacerlo no se de donde sacas tantas gansas de vivir no podía aguantar mas as enfermedad se esparce en tu cuerpo muy rápidamente muchas veces le pedí a Dios que te dejara vivir un poco mas pero el señor en medio de su grandeza me decía que así debería ser que tu lugar era allá con el pero yo no podía aceptarlo aun te faltaba tanto por vivir yo quería estar cerca de ti pero todo tiene un precio e este mundo o en el otro siempre hay algo que hacer los Ángeles no tenemos libre albedrio como los humanos por eso podemos tomar la decisión de renunciar a nuestros poderes y venir al a tierra pero antes te curare… no se si algún día nos encontraremos de seguro te recordare por que al renunciar a todo mis recuerdos serán borrados.

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