El Desarrollo Humano Como Ente Social

EL DESARROLLO DEL SER HUMANO COMO ENTE SOCIAL

El hombre por naturaleza, es un ser libre y necesita de unas normas que le quien en la toma de decisiones. Por lo tanto, el comportamiento humano, tiene posibilidades de acción y de decisión, por lo cual responde a los estímulos de diferentes maneras.

En contraposición a ello, surge el determinismo como una corriente filosófica que da por hecho que el hombre no tiene libertad .Existen dos tipos de determinismo el radical y restringido; este último en la realidad material, cuyo máximo representante es Enmanuel Kant.

Continuando en el mismo orden de ideas, al hombre se le han impuesto muchas cosas, en primer lugar se le impone la vida misma, pero es de resaltar que no se le impone como a de vivir esa vida .Ahora bien, el que el hombre sea libre no lo convierte en un ser moral, puesto que esto lo determina lo social. Pero en efecto, el valor moral perfecciona al hombre en cuanto a ser hombre, es decir lo humaniza; de allí que el hombre actúe como sujeto activo y no pasivo ante los valores morales.

Cabe señalar que los valores morales, surgen primordialmente en el individuo por influencia y en el seno de de la familia, donde juega un papel fundamental la calidad de las relaciones inter-familiares. Se explica entonces, que el hombre en su vivir diario se va haciendo a sí mismo; esto determina que la moral constituya la adquisición del modo de ser en la sociedad, es decir que se deja ver sus sentimientos, costumbres y el carácter. Pues es de recordar, que la conducta del hombre refleja la moral individual, mientras la moral individual es el fundamento de la moral social.

El sentido de la moral, es el resultado de una evolución psicológica siendo sus factores intelectuales, emocionales y volitivos. Por su parte la conducta por su parte la conducta está constituida por acciones y son estas las que llegan a señalar la tendencia de la moralidad. Para que un ser humano, sea moral debe presentar las siguientes características:

• Vivir en sociedad

• Ser libre y

• Poseer conciencia

A todas estas el camino de la moralidad, es el de la virtud, desarrollado sólo en el ámbito social. De modo tal, que el individuo moral desarrolla virtudes sociales originadas por el principio natural de la compasión y el ejercicio del amor propio constreñido por la flanqueza.

Por otra parte, el hombre en sociedad es concreto ya que vive en seno de unas relaciones sociales en virtud de las cuales es humano, y el grado de interacción cultural de las sociedades modernas es menor que el de las primitivas. Según Dukeim en (1928, 157), a mayor primitivismo social mayor es número de semejanzas que pueden advertirse en los miembros de una sociedad, lo que lo hace ser social y culturalmente más homogéneo.

Dentro de los valores morales y las relaciones humanas, se encuentran los actos humanos los que a su vez se subdividen en actos humanos y actos del hombre, y ambos tienen un cierto valor ontológico independiente del valor moral. Explicándose que todo acto humano tiene un valor moral positivo o negativo, provisto de una intensión o fin.

De esta manera, el hombre como ser social, está destinado a convivir en grupo por lo tanto, requiere de otros individuos y siente satisfacción al relacionarse con ellos. No en vano el ser humano nace, crece, y se desenvuelve en un pequeño grupo social que funciona como su núcleo primario (la familia). Visto de esta forma, el origen de la sociedad es natural, además de ello la propia condición del ser humano hace de él un ser naturalmente social, nacido para la convivencia. Al respecto el hombre libremente y por mutuo acuerdo y convención funda o establece sociedades concretas y particulares que poseen elementos esenciales, geográficos, culturales o históricos específicos.

Como se dijo anteriormente, el núcleo primario de la sociedad es la familia definido por Sánchez Román, como la institución ética natural, fundada en la relación conyugal de los sexos, cuyos individuos se hallan ligados por lazos de amor, respeto y obediencia; dicha institución es necesaria para la conservación, propagación y desarrollo en todas las esferas de la vida de la especie humana.

En relación con esto último la familia venezolana tiene aspectos morales, sociales y legales que la caracterizan:

• Morales: es el primer órgano educador, pues recibimos las normas de conducta y principios morales.

• Sociales: la familia influye de gran manera en la personalidad de sus miembros constituyéndose así en el primer instrumento de socialización.

• Legales: entre tanto la familia es considerado, el núcleo privado de la nación por lo cual está amparada y protegida por la ley.

Un ejemplo de ello, lo constituye el Artículo 75 de la Constitución de la República Bolivariana de Venezuela, el cual establece que el estado protegerá a la familia como asociación natural de la sociedad y como el espacio fundamental para el desarrollo integral de

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