El Modelo Deming Prize.

El Modelo Deming Prize

Nació en Japón en el año 1951 con el objetivo básico de convertirse en una herramienta para mejorar y transformar la gestión de las organizaciones japonesas. Actualmente, el premio se otorga a aquellas empresas que contribuyen de manera muy significativa al desarrollo de la dirección y control de calidad en Japón y supone una iniciativa para promover la Gestión de la Calidad en numerosas compañías que encuentran en el galardón una excelente ocasión para comenzar a aprender.

A diferencia de los premios norteamericanos y europeos, los candidatos al Deming Prize, no se les requiere una aplicación conforme a un modelo preestablecido. Pretende que cada organización realice una auto-evaluación, comprenda su situación actual, establezca sus propios retos y objetivos y el camino para llegar hasta ellas, y mejore y transforme ella misma a lo largo de dicho trayecto. Sus criterios de evaluación no aparecen publicados en las últimas guías porque se quiere hacer hincapié de que no se trata de un examen sino de la convicción y del propósito de implantación de la Gestión de la Calidad Total en la organización. A pesar de eso, a modo de aproximación podemos tomar como referencia los criterios de evaluación de la guía perteneciente al año 2004, en donde tenemos también de referencia la puntuación para cada uno de los seis criterios y la relación entre éstos:

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En el proceso de evaluación, los examinadores evalúan si los temas establecidos por los solicitantes son adecuados a su situación, si sus actividades son conforme a sus circunstancias, y si sus actividades tienen posibilidades de conseguir los objetivos más elevados en el futuro, cada empresa hace sus propias oportunidades de mejora y la manera de desarrollarlas, que conjuntamente con la evaluación que el comité hace de todos los aspectos del proceso hace que éste concurra en un desarrollo de la GCT. Las empresas galardonadas con el premio deben emitir un informe tres años después, acerca del estado de sus prácticas de GCT, con lo que se asegura un seguimiento de las empresas ganadoras.

Los beneficios esperados por las empresas ganadoras del premio Deming Prize son expresados tanto en términos de satisfacción de los consumidores como en resultados económicos, la empresa mejora sus operaciones diarias a través de la implantación de los conceptos de calidad, dirección y control del negocio y sistemas de aseguramiento de la calidad, creando una conciencia de calidad. Teniendo como resultado una reducción en los costos de producción, incremento de las ventas.

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