El Nuevo Orden Laboral: Lo Que Se Oculta Detrás De Lenguaje Del Neocapitalismo

El texto presentado por James Paul Gee et.al. nos habla en esencia de cómo se ha visto transformada la noción del trabajo en el sistema económico neocapitalista, así como la pertinencia de Latinoamérica como pieza clave para la expansión y explotación de este nuevo orden laboral debido a la poderosa y atractiva mano de obra.

Se hace mención del hecho de que el nuevo orden laboral está íntimamente ligado a los reglas impuestas por el modelo económico neocapitalista que ha demostrado no solo ser injusto sino cruel en la mayoría de los casos.

Es en la enseñanza escolarizada donde los métodos de producción han encontrado de manera histórica la forma de engendrar, preparar y alinear a la futura fuerza trabajadora con diversos matices dependiendo de la época que se trate. Comenzando con los procesos de alfabetización los cuales se van adecuando a lo que el modelo económico imponga en su momento y que por supuesto ve por el lado más práctico, como el hecho de enfocarse más en la escritura que en la lectura debido la capacidad que genera más que en la expresión personal, en la capacidad del “aprendiz de trabajador” para seguir correctamente las instrucciones y órdenes del empleador.

Este modelo (dicen los autores del libro) esta alentado más que nunca en la competencia feroz por controlar el mercado de masas que perteneció durante mucho tiempo a la potencia económica de Estados Unidos y que por los cambios sociales, políticos y tecnológicos ha quedado dividido y a la espera de un nuevo dueño. Obviamente en esta ávida competencia por el “pastel”, se sacrifica la calidad de las condiciones de los empleos, se fomenta la injusta retribución al trabajador en su salario (así como el incontenible aumento del desempleo) y como la cereza del pastel, el modelo económico neocapitalista logra que la brecha entre pobres y ricos se haga más y más amplia. Es una competencia desleal donde hay un pequeño número de grandes ganadores y un gran número de perdedores, que como consolación solo tienen una promesa de mejoría que nunca o casi nunca llega.

El nuevo orden laboral está tratando de crear nuevas identidades sociales, nuevas clases de personas para favorecer sus intereses. ¿Cómo? Pues utilizando técnicas de ingeniería social, al crear una nueva cultura de trabajo que se constituye como el molde que debe llenar el trabajador siguiente y el siguiente de manera que todo se puede calificar según una escala de calidad. En el caso de la estrategia “sigma seis” se intenta hacer pasar a los trabajadores como parte importante, participa e influyente del proceso del que sin embargo no pueden cuestionar los fines y modos que tiene la empresa.

Se aborda el tema del alfabetismo sociocultural y las implicaciones tal vez insospechadas que tendrá en el ámbito laboral; alfabetizar en términos coloquiales podemos expresar que consiste en enseñar a las personas a leer y a escribir, habilidades esenciales para desarrollarse en la vida cotidiana, en la preparación profesional y por supuesto en el trabajo. Pero, ¿Qué relación tendría la alfabetización (inicialmente encargada casi exclusivamente a las escuelas) con el nuevo orden laboral? Pues porque la forma de concebir el trabajo ha cambiado así como la naturaleza del aprendizaje y del conocimiento. El trabajo ha dejado de estar basado en la fuerza física el trabajador (donde no importaba mucho la

capacidad mental) y está yendo hacia el conocimiento del trabajador; el surgimiento de la sociedad del conocimiento está impactando

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