ClubEnsayos.com - Ensayos de Calidad, Tareas y Monografias
Buscar

El Proyecto De Educación Universal, Laica Y Gratuita En La Revolución Francesa. La Propuesta De Condorcet. Instrucción pública.- Francios Furet Y Mana Ozouf.


Enviado por   •  13 de Noviembre de 2012  •  2.127 Palabras (9 Páginas)  •  910 Visitas

Página 1 de 9

El porvenir de la revolución va de la mano de una inmensa obra pedagógica concebida para servir de barrera infranqueable entre la condición degradante del súbdito y la vocación vibrante del ciudadano, el hombre antiguo y el hombre nuevo. Condorcet se evoca, en sus memorias sobre la instrucción pública. Desde los inicio, la revolución aparece investida de una evocación pedagógica.

Hija del siglo de las luces, la revolución pretende ser su mensajera; tiene por propósito disparar la ignorancia y combatir los prejuicios que envilecen al pueblo.

La libertad es solidaria del genio, de las letras y de las artes, y evocan a las luces.

Aun después de haber sido la revolución, todavía es necesario preparar hombres nuevos, para disfrutar los beneficios y aptos para conservar la paz, y solo mediante una educación regenerada y pública se podrán reafirmar los valores y los principios a los hombres de los ochenta y nueve.

La instrucción haría así irreversible la ruptura revolucionaria, el renacer de la historia simbolizado por la introducción de un nuevo calendario.

Cuando ocurre la revolución se fusionan dos utopías o sueños. (la nación regenerada y la ciudad nueva).

La educación es un deber de la nación con respecto a sí misma, es una manera de que ella se aplique a sí misma, su voluntad y su poder soberano. La representación de la misión pedagógica de la revolución ejerce una irresistible fascinación sobre los actores políticos, en todos los poderes sucesivos.

En esta teoría de Condorcet se formulan los principios que inspirarán la política educativa de las democracias occidentales y constituye uno de los principales documentos de referencia para múltiples innovaciones y reformas educativas contemporáneas.

- Difusión y democratización de la enseñanza, que ha de contribuir a formar sujetos autónomos.

-Promoción de los talentos y cultivo de la excelencia, atendiendo tanto a consideraciones individuales como sociales.

- Igualdad de hombres y mujeres en el acceso a la escuela.

- Concepción de la instrucción como un proceso que debe abarcar el conjunto del ciclo vital.

- Se distinguía por su rigor intelectual, por la amplitud y modernidad y de sus ideas, y por su carácter coherente y completo.

- Libertad de enseñanza que implica, además de la libertad de cátedra y de creación de centros, la independencia de la instrucción pública con respecto al poder ejecutivo, para proteger así los saberes de los excesos del poder.

Darle a la instrucción un carácter público representaba poner fin a la dominación de la Iglesia en la enseñanza, e incluso a su casi monopolio escolar. A partir de 1972 ya prácticamente no queda nada del sistema antiguo de instrucción y, la necesidad de crear una instrucción pública se traduce, en un principio, en la formación de un vacío escolar.

Era necesario diferenciar la instrucción pública de la educación nacional. La primera debe dar los conocimientos y la segunda las virtudes; la primera será el lustre de la sociedad, la segunda será la consistencia y la fuerza… la educación nacional es el alimento necesario para todos; la instrucción es la posesión de unos cuantos.

El gran medio de educación pública se encuentra sobre todo en las festividades cívicas y en las reuniones patrióticas. Por el contrario, en la instrucción indisociable de la educación se hará por intermediación de un sistema escolar que deberá renovarse y que debería corresponder a las nuevas instituciones.

Condorcet advierte contra el peligro de someter la instrucción pública a las voluntades de grupos particulares y de buscar únicamente el utilitarismo más inmediato.

El proyecto de Condorcet sufrió críticas diversas. Del lado tradicionalista, le reprochaban sobre todo su carácter laico le criticaban su carácter demasiado elitista y erudito, no aprobaban, en especial la autonomía de la enseñanza que dictaba la sociedad nacional de artes y ciencias, pues consideraban que este podía desembocar en una tentativa de restaurar una casta de maestros inamovibles y una jerarquía que recordaba el antigua régimen; fue juzgado demasiado audaz por unos y demasiados tímidos por otros.

La Revolución Francesa y su experiencia pedagógica quedó inconclusa pero engendró cambios y fue engendrada por cambios en las concepciones que van más allá del simple desarrollo o de la evolución científica y tecnológica, legando a los franceses una representación firmemente arraigada en la imaginación social: la de la solidaridad de la democracia y la instrucción, y del destino común de la república y de la escuela.

Una sociedad sin escuela o donde no está pensada como un órgano de la libertad, está sin duda expuesta a la enajenación y lo político estarían necesariamente erigido como principio absoluto de autoridad o subordinado a la realidad social.

Le Peletier planteaba que los niños debían recibir una educación común, debían utilizar la misma vestimenta, la misma instrucción y los mismos cuidados pero a cambio de ellos debían ser separados de sus familias ya que decía que los niños pertenecían a la patria, estos serían distribuidos en casas comunes, en donde se les enseñaría a leer, escribir, contar, medir y conocerían sobre la moral, en si pues se les estaba privando a los padres de su derechos y la educación era obligatoria.

En este sentido Le Peletier y Condorcet se contradecían, pues uno decía que la educación era obligatoria y el otro decía que era decisivo, de alguna manera yo estoy de acuerdo con ambos, pero por ejemplo, quisiéramos que todos los niños fueran a la escuela pero en la realidad esto no sucederá

La ley de Bouquier siguió en vigor casi todo un año, periodo demasiado corto para poder valorar su impacto real, pero con el mérito de existir. Así entre el periodo de terror y sus siguientes días termidorianos, se establecen relaciones muy complejas de ruptura y continuidad.

Ahora bien durante varios años se vivió en la etapa del terror en la que gracias a unos cursos que se llevaron a cabo en tan solo tres meses, optaron por crear tres escuelas en las que se educaran tres aspectos que eran importantes la primera fue crear la escuela de Marte que se conformaba en un campo militar, en la que agrupaba a seis jóvenes por distrito viviendo en común para prepararlos para el oficio de las armas o para una carrera administrativa, la segunda fue la escuela normal que agrupo alrededor de 1400 alumnos de todo el país para la formación de maestros para las escuelas primarias guiados por los nombres más eminentes en todo género de ciencias y talento

...

Descargar como (para miembros actualizados) txt (13 Kb)
Leer 8 páginas más »
Disponible sólo en Clubensayos.com