El celular: la nueva adicción del siglo XXI.

UNIVERSIDAD AUTONOMA DE NUEVO LEON

FACULTAD DE ENFERMERIA

COMPETENCIA COMUNICATIVA

Ensayo

El celular: la nueva adicción del siglo XXI

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Introducción.

En el siguiente ensayo pretendo abordar el tema del teléfono celular y como este  influye de una manera a veces no muy apropiada en la vida cotidiana y no le damos el verdadero uso con el que fue creado. Veremos cómo incluso  ah evolucionado tan rápido que hasta ya existen enfermedades relacionadas por el mal uso de este aparato electrónico. Veremos también como dentro de estas enfermedades existe la más frecuente y nada alejada de realidad de nosotros. Citando el termino de “phubbing”, trastorno relacionado a mantener mas contacto con un móvil que con una persona.

El celular: la nueva adicción del siglo XXI

En la actualidad resulta difícil que alguna persona no esté familiarizada con la nueva tecnología. Televisor, refrigerador, radio, plancha, microondas, estos solo son algunos de los aparatos electrónicos con los que creemos haber nacido, mas sin embargo no es así. Surgen cada vez nuevos aparatos eléctricos y electrónicos para satisfacer necesidades humanas hasta entonces no cubiertas. Como consecuencia durante este periodo tiene lugar un hecho de vital importancia; una aproximación de la tecnología más avanzada al hombre, tanto como jamás había ocurrido en el pasado. Se llega a una situación de familiarización de los productos tecnológicos en la población. La tecnología se hace ampliamente en la vida cotidiana.

La tecnología créese a pasos agigantados y de ser el resultado para una necesidad cubierta a pasado el límite, por esta vez tomaremos el ejemplo del celular una herramienta que hoy en día ¿es de vital importancia?

¿Necesidad o vicio?

Martin Cooper el primer hombre en inventar un teléfono celular. Puede no ser alguien famoso pero su invento es conocido por más de la mitad de la población mundial que cuenta con un teléfono celular. Este hombre no tenía idea del alcance de su invento y la evolución que este tendría. Se comenzó con una idea para mantener la comunicación vía llamadas telefónicas y hoy en día no terminamos de sorprendernos de las cosas que podemos encontrar en un celular.

Esta demás contar las infinidades de aplicaciones que encontramos en nuestros móviles con los cuales estamos altamente comunicados manteniendo contacto aunque no personalmente. Pero ¿realmente es una necesidad contar un celular? ¿Se utiliza con el fin adecuado? O solo es pretexto para estar al día con la tecnología, la moda, la era? Nuestras nuevas generaciones cada día están más alejadas de la realidad. Quienes no hemos visto incluso experimentado una simple reunión familiar en donde el tema son los status de facebook de alguna persona y eso hablando de que hay un tema de conversación ya que la mayoría no socializa por estar en las llamadas “redes sociales”.

Encadenado al celular.

La separación del teléfono celular causa angustia principalmente a mujeres y jóvenes, esa fue la primera conclusión a la que llego una investigación en proceso de la investigadora del departamento de políticas públicas de la JdeG Esmeralda Comea, sobre el uso del teléfono móvil.

Cada vez hay más estudios acerca de como actualmente el uso del teléfono celular en las personas es de vital importancia en sus vida cotidiana, sobre todo en los jóvenes. Cada vez existen nuevos términos para referenciar a los nuevos trastornos de la nueva era, relacionados con la tecnología. Y es que estamos tan ligados a ella. Quien no duerma con su celular a un costado, quien no despierta con la alarma de su celular eh inmediatamente checa sus redes sociales, se mete a bañar eh incluso escuchando música en su móvil dentro del baño, come con su celular a un lado, ve televisión con celular en la mano actualizando su status en redes sociales, se va a realizar diferentes actividades pero siempre con el celular cerca de la mano y quien no ah experimentado un “pequeño gran susto “al no encontrar su móvil y no haber si quiera en donde está por ese “shock” que produce al imaginarse salir sin èl. Y cada vez es menos la verdadera socialización, el encuentro cara a cara. No falta la madre orgullosa que presume de su “hijo hogareño”, a que que no se arriesga a los peligros de la calle y prefiere estar en casa, específicamente en su cuarto o viendo tele con su teléfono en mano. Pero cuantos padres no han padecido el hecho de estar en la mesa a la hora de comida y el o los hijos con teléfono en su mano. Aunque también en otro escenario pudiera ser desde otro extremo donde ya son los padres también quienes están hipnotizados con el celular y dejan a un lado la convivencia con sus hijos

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