Elementos Para La Construcción De Una Política De Estado En La Educación Superior.

El autor Axel Didrikson aborda el tema de la educación en México. Expone como punto clave la importancia que juega ésta para el desarrollo social, cultural y económico del hombre actual, siendo además, permanente y para toda la vida, pero que sobre todo, sea para todos (esto es, que se disminuyan las desigualdades) . Ahonda específicamente en la educación superior.

Su principal preocupación radica en el papel que juegan las universidades públicas en tiempos modernos. Rescata el desempeño que realizan éstas para mostrar su calidad en la educación. Esta calidad, debe elevarse debido a la diversidad de situaciones que experimenta la sociedad actual (como demandas sociales y económicas) y, para esto, es imprescindible adoptar una política de Estado.

La política de Estado, dice el autor, es aquella que va más allá de un periodo sexenal, de gobernabilidad, ya que ésta se debe sustentar en un profundo acuerdo social, cultural y moral de bien común; debe incluir y vincular los términos de: nación y educación para poder lograr los propósitos planteados; debe ser parte de un proyecto de nación.

Uno de los aspectos centrales que toma como parte de una política de Estado, es la cuestión del financiamiento de las instituciones, en este caso, de las universidades públicas del país. La parte económica, menciona Didriksson, no debe ponerse a discusión en periodos de gobernabilidad, sino, ésta debe ser incluso plasmada en la Carta Magna como una ampliación del artículo tercero constitucional, donde se estipule claramente la partida que deberán recibir las universidades, y además, la cual no podrá ir en descenso, sino todo lo contrario.

En sí, lo que el autor hace es poner sobre la mesa una propuesta sobre lo que es necesario cambiar en el ámbito educativo de nuestro país. Pone de manifiesto la importancia y situación actual de las universidades públicas, así como la situación que demanda la sociedad actual. Para poder dar respuesta a las necesidades y dificultades que se enfrentan, propone una política de Estado que sea elaborada a consciencia, con fines y propósitos a largo plazo, pero sobre todo, con fines que beneficien a la misma sociedad.

Didriksson describe claramente los principios y objetivos que debería tener dicha política de Estado, así como la propuesta que se debería implementar para poder llevarla a la práctica.

En lo particular, lo que el autor expone es algo realmente necesario, puede considerarse como el deber ser de la educación, sin embargo, son ideas que por lo general no se toman mucho en cuenta por parte del Estado propio, no se hace mucho pese a lo que se conoce, pues lo que aquí se pretende es que el pueblo mejore y que el Estado participe en ese salto a una verdadera calidad de la educación. Son ideas clave y que pueden ser tomadas como base para implementar una políca de Estado que es indiscutiblemente necesaria.

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