Ensayo El Hombre Mediocre

ENSAYO EL HOMBRE MEDIOCRE

CAP. I – CAP. II

Desde que nacemos nuestros padres nos van enseñando e inculcando valores a medida que vamos creciendo, teniendo ideales, sueños y metas a las cuales queremos llegar, pero el mismo entorno nos hacen ver que esto no será fácil pues siempre surgen miles de obstáculos para poder llegar a nuestros objetivos. Las personas que se dejan influenciar por el conformismo y aprovechar de las demás personas para así poder llegar a su meta pues se convierten en hombres mediocres que son aquellas personas que carecen de características personales que permitan distinguir al individuo en su sociedad.

Según el autor José Ingenieros en su obra “El Hombre Mediocre”nos dice que este tipo de personas carecen de personalidad y que no pueden formarse un ideal y a la vez su existencia es negativa como unidad social.

Dentro de su entorno se define en relación a la sociedad en que vive y por su función social. La mediocridad es moralmente peligrosa y la vulgaridad lleva al hombre a la exhibición o alarde de riqueza y poder, avaricia, falsedad, a tener deseos muy fuerte e intensos de tener o conseguir algo, simulación.

El mediocre es dócil, maleable, ignorante, un ser vegetativo, carente de personalidad, contrario a la perfección, solidario y cómplice de los intereses creados que lo hacen borrego del rebaño social. Vive según las conveniencias y no logra aprender a amar. En su vida acomodaticia se vuelve vil y escéptico, cobarde. Los mediocres no son genios, ni héroes ni santos.

Un hombre mediocre no acepta ideas distintas a las que ya ha recibido por y sin darse cuenta de que justamente las creencias son relativas a quien las cree, pudiendo existir hombres con ideas totalmente contrarias al mismo tiempo. A su vez, el hombre mediocre entra en una lucha contra el idealismo por envidia, intenta opacar desesperadamente toda acción noble, porque sabe que su existencia depende de que el idealista nunca sea reconocido y de que no se ponga por encima de sí.

Pero también hay mediocridad intelectual que es cuando las personas se someten a una rutina renunciando a pensar y valiéndonos de la lógica de los demás para así no razonar, no tienen el afán de mejorar día a día y así poder llegar a la perfección. Carecen de buen gusto y de aptitud para adquirirlo. Su incapacidad de meditar acaba por convencerles de que no hay problemas difíciles y cualquier reflexión paréceles un sarcasmo; prefieren confiar en su ignorancia para adivinarlo todo. El que se ha fatigado mucho para formar sus creencias, sabe respetar la de los demás.

Este tipo de mediocridad hace que el hombre sea, modesto, indeciso, lento con el transcurrir con el tiempo. La costumbre o actitud de difamar y hablar mal de los demás hace que el hombre sea cobarde y lo encubre con la complicidad de personas que también

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