Ensayo de polimerizacion

INTRODUCCIÓN:

 En este trabajo daremos a conocer las técnicas para la elaboración de las coronas de metal y acrílico, ya que sabemos que para los dientes muy dañados, y por lo que hemos practicado las coronas dentales pueden ser una opción significativa en los pacientes. El procedimiento de colocación de una corona dental implica el uso de cubiertas con forma de diente hechas de metal o acrílico, para restaurar la resistencia y eliminar el malestar. Haremos el siguiente trabajo porque después de un semestre de practicar en el laboratorio dental ahora queremos explicarlo por escrito y con ayuda de diversos autores y diferentes fuentes, para así nos pueda quedar más claro lo que ya hicimos en la práctica. Por lo tanto las coronas de metal como de acrílico son muy efectivas aunque a veces dado los casos un contra de la corona de metal podría ser el color ya que llama mucho la atención pero en cambio una corona de acrílico hace una armonía con los dientes reales y crea un efecto como ya conocemos, se ve como si fuera de verdad por lo que es más estética, debemos saber que las coronas dentales de acrílico no son tan resistentes como las coronas metálicas y no funcionan tan bien en los dientes posteriores ya que estas soportan mucha presión de la oclusión y la masticación por eso en este trabajo especificaremos todas las técnicas para su elaboración y cada paso a seguir para conseguir buenas piezas de acrílico y metal.

PREPARACIÓN:

 Agitar el frasco de polvo antes de usar. Los recipientes de mezcla, las manos y la espátula deben estar exentos de contaminantes para evitar alteraciones del color. Recomendamos una temperatura ambiente para mezclar y aplicar entre 15ºC y 30ºC. Preparar la resina observando la correcta proporción entre polvo y líquido: 1/3 de monómero por 2/3 de polímero. Con una espátula metálica limpia, mezclar hasta que la mezcla esté bien homogénea. Esperar alcanzar la fase plástica, que se dará cuando el material se despegue de las paredes del recipiente (15 min después de la dosificación, a 23ºC), para iniciar la inclusión. Si la temperatura ambiente es mayor el proceso se acelera y si es menor disminuye.

PRENSADO:

 Después de alcanzar la fase plástica, la resina debe ser puesta en la mufla previamente aislada de la forma preferida y, cubierta por un film plástico de polietileno de alta densidad, nunca celofán. Llevar la mufla a la prensa y realizar el prensado de prueba (lentamente, hasta una presión de 750 a1000 Kg/Cm2). Después retirar el plástico separador y el exceso de material. La mufla debe ser cerrada nuevamente y realizado el prensado definitivo (1000Kg/Cm2). Antes de polimerizar, la resina debe descansar por 20 minutos. Para aumentar la translucidez de la resina y para evitar porosidades, recomendamos dejar reposar la resina por 2 horas, antes de iniciar la polimerización. En caso de que utilice el ciclo de "polimerización convencional".

CICLO DE POLIMERIZACIÓN:

 Después del prensado definitivo, se coloca la mufla común en la brida de cocción y procede a polimerizar. A continuación presentamos 2 ejemplos de ciclos de polimerización para obtener un tenor de monómero residual menor a 1%.

CICLO DE POLIMERIZACIÓN:

El proceso de calentamiento utilizado para controlar la polimerización se denomina ciclo de polimerización o de fraguado. De forma ideal, este proceso deberá de estar bien controlado para evitar los efectos del aumento descontrolado de la temperatura, como son la evaporación del monómero o la porosidad de la base protésica.

Una de las técnicas implica el proceso de la resina en un baño de agua a una temperatura constante de 74°C durante ocho o más horas sin ningún paso final de hervido. Una segunda técnica consiste en el proceso de un baño térmico a 74°C durante 8 horas, y luego aumentar la temperatura hasta los 100°C durante una hora. Una tercera técnica conlleva el tratamiento de la resina a 74°C durante 2 horas aproximadamente y luego aumentar la temperatura del baño de agua hasta los 100°C y mantenerlo durante una hora.

POLIMERIZACIÓN   CONVENCIONAL:

Colocar la mufla en una olla con tres litros de agua fría, (debe cubrir la mufla en su totalidad) encender la hornalla con llama baja, dejando alcanzar los 60°C – 70°C de temperatura.  Mantener esta temperatura por 30 min.

Aumentar la llama hasta alcanzar los 100°C, mantener hirviendo por una hora y media (mantener el agua en los 100°C agregando más agua si es necesario) y, en seguida, apagar la llama. Dejar enfriar la mufla dentro del agua (hasta que llegue a los 30°C) antes de retirar la pieza.

POLIMERIZACIÓN  TERMO-NEUMÁTICA:

Colocar la mufla en la polimerizadora, con un dedo de agua. Cerrar e inyectar aire comprimido (30 psi/ 1 bar). Conectar a la red eléctrica, hasta alcanzar los 120°C. Cuando alcanza la temperatura antes mencionada, desconectar y dejar enfriar hasta los 90°C.

Alcanzada esta nueva temperatura, conectar nuevamente hasta llegar a los 120°C. Desconectar y dejar enfriar hasta los 60°C.

Asegurarse de que no existe presión en el interior de la polimerizadora y retirar la mufla, dejar enfriar a temperatura ambiente para iniciar el desenmuflado.

En los sistemas de polimerización termo-neumática, el acrílico para prótesis se vuelve más traslucido. Implica un problema estético en la línea de los cuellos dentales, debido a que el acrílico en esa zona al ser traslucido muestra el cuello del diente cubierto por el polímero. Aumentando la longitud del diente, al sonreír el paciente.

DESENMUFLADO:

El desenmuflado es ejecutado de la manera normal, asegurándose de que la mufla este fría y, con cuidado para no dañar la base de los dientes de la prótesis. Se utiliza el desenmuflador, que consiste en una pieza metálica interpuesta entre la tapa circular y la prensa, ajustada la mufla en la prensa en esas copndiciones se puede despegar la base con un instrumento resistente que hace palanca entre ellas. Aflojada la base se quita la tapa de la mufla y se coloca nuevamente en la prensa con el desenmuflador encima para aflojar la contramufla.

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