Filosofia

Ortega Ruiz La educación Moral como pedagogía de la alteridad

Introducción

Algunas cuestiones aquí expuestas responden al actual debate entre los pedagogos españoles sobre los modelos (paradigmas) en la educación y, especialmente, en la educación moral.

El autor pretende desarrollar: ¿Qué tipo de relación se establece entre el maestro y el alumno? ¿Qué es el alumno para el profesor? ¿Un mero objeto de conocimiento o alguien con quien es necesario establecer una relación moral?

Ver la educación moral desde otro paradigma que tenga como protagonista no al sujeto autónomo, sino la primacía del otro.-

*Nuevo modelo de educación moral: pedagogía de a alteridad.-

1. La insuficiencia del paradigma tecnológico en la educación

La preocupación por la eficiencia y el control de los aprendizajes sin duda necesaria, no ha dado lugar a una enseñanza mejor en todas las dimensiones de una persona.

“Una pedagogía más racional y científica no ha dado paso a una pedagogía con rostro más humano” (ortega,)

“Si digo que el uso predominante de la razón tecnológica en la enseñanza (Sarramona, 2003), convierte a nuestros alumnos en máquinas especializadas de gran influencia, pero se quiere llegar a un individuo más humano, no se puede relegar a segundo plano la apropiación de los valores morales que hacen al homo-sapiens a un ser humano.

A pesar que den buenos resultados; la docencia regida por los criterios de la racionalidad no es de buena calidad.

Las consecuencias inmediatas en la educación “intelectualista” centrado No en el alumno, sino en el interés de la escuela y las demandas de la sociedad, ha cortado los lazos de la comunicación de la escuela con la realidad de su entorno, ha generado un autismo en la enseñanza, que incapacita la formación de adultos capaces de insertarse en la sociedad, orientarla y transformarla.

2. Una Nueva propuesta

El Adiestramiento técnico- profesional indispensable como objetivo educativo en proceso de enseñanza debe ir acompañada de aprendizajes morales y situar el discurso pedagógico no solo en los medios; sino en el qué y para qué

Hoy se admite, al menos en el discurso de la pedagogía, que educar sin antropología no deja de ser un sin sentido, que es caminar sin dirección, ni meta y convertir la educación en un vulgar adiestramiento.

Solo se ha visto una relación didáctica entre el profesor-Alumno ignorando la relación que educativa deber ser radicalmente ética. Allí es donde acontece la educación, se produce un encuentra del que se sabe responsable delotro, obligado a darle una respuesta en su situación de radical alteridad.

Hasta ahora los máximos esfuerzos se han dedicado a cómo enseñar mejor unos determinados saberes que son considerados la tarea principal del profesorado, Teniendo una programación de unos contenidos que preparan mejor a los alumnos para una profesión.- Que ellos [alumnos] adquieran conocimientos y en segundo lugar actitudes y valores. "El profesor se percibe, se ve como enseñante, transmisor de saberes o conocimientos, pero no como mediador moral que facilita la construcción personal del educado"

El profesor no solo por las estrategias que utiliza se hace presente y actúa en los procesos de aprendizaje de los alumnos , sino, además por la autoridad moral que ejerce ante ellos.- No es posible separar la competencia pedagógica y la competencia moral en la educación .

La relación educativa el primer movimiento que se da es de la acogida, de la aceptación de la persona del otro en su realidad concreta, en su tradición y cultura no del individuo abstracto; es el reconocimiento del otro como alguien. Educar exige en primer lugar, salir de sí mismo, es ver el mundo desde la experiencia del otro. A negar cualquier forma de poder, porque el otro nunca puede ser objeto de dominio. En segundo lugar, exige la respuesta responsable, hacerse cargo del otro, ayudar al nacimiento de una "nueva realidad"

La acogida en la educación impulsa el realismo y nos mete de llenos en las condiciones socio-históricas en las que vive el educando. Sus condiciones de vida forman parte de "lo que es"

3.- La pedagogía de la alteridad

La primera Inquietud de la enseñanza de la ciencia ha seguido una preocupación y urgencia por la enseñanza de valores, pero se nos ha escapado algo que debería haber sido primero en esta nueva andadura; el abandono de una concepción de la enseñanza con pretensiones impositivas, marcadas por la idea de que el alumno es alguien que está de paso, un usuario y de un tiempo que el profesor pretende administrar, reflejo de una escuela obsesionada por la regulación y la disciplina.

La pedagogía de la alteridad comienza con la aceptación y reconocimiento del otro, sin esto no habría educación.-

3.1 ¿qué significa acoger al otro?

La acogida del otro significa sentirse reconocido, valorado, aceptado y querido por lo que uno es, y en todo lo que es. Significa confianza, acompañamiento guía y dirección… aceptar ser enseñando por otro. El educado empieza a tener la experiencia de la comprensión, del afecto y del respeto.

Nunca es un "estado" sino más bien "una pasión”, un "pasar" por la vida escuchando, interpretando y respondiendo las demandas del otro.

Cuando educamos y le respondemos al otro, para que en una nueva realidad, sea el mismo y vaya siendo

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