Futurismo

El Futurismo es el más antiguo de los movimientos de vanguardia, de los llamados ismos. Los ismos son importantes porque supusieron una ruptura con el pasado y un intento de encontrar nuevas formas sin miedo. Fueron movimientos inmersos en unos periodos históricos difíciles (guerras, revoluciones) que abrieron caminos al arte y a la literatura en Europa.

El primer manifiesto futurista aparece en París, en 1909, y lo firma el poeta italiano Felipe Marinetti: Zang Tumb Tumb.

Ruptura con el clasicismo

El Futurismo propone una ruptura con el clasicismo académico y quiere crear una estética proyectada al futuro y ligada temáticamente a la tecnología moderna en sus aspectos más dinámicos. Es un movimiento que capta la velocidad. Para Marinetti: “La velocidad es la fuente de toda belleza” y añade, provocativo, que “Un automóvil de carreras es más hermoso que la Victoria de Samotracia”.

L enguaje lacónico

Los futuristas proponen un teatro sintético que, esencialmente, se define por la rapidez (piezas cortas, acción vertiginosa y mínima). Ese teatro, y el Futurismo en general, utiliza un idioma muy lacónico y propone la eliminación

de los adjetivos, a la vez que admite los signos matemáticos y los símbolos gráficos.

Impacto sensorial

En el arte se busca el impacto sensorial que se logra, incluso, a través de la disposición tipográfica del texto: uso de varios tipos de letra, ordenación no sintáctica del lenguaje. Todo dentro de una óptica lingüística que habla de las

palabras en libertad. Estas palabras en libertad son el producto de lo que Marinetti llama “imaginación sin hilos”.

Esta imaginación otorga libertad absoluta a la palabra, rompe con los nexos sintácticos, se despreocupa de los valores rítmicos y tiende al impacto sensorial más que al contenido ideológico o sentimental del texto literario: el hombre y los sentimientos son desplazados de la literatura.

La materia dominada por la técnica

Para los futuristas la materia dominada por la técnica es el gran tema literario de este movimiento. Esta estética futurista llega a la escultura y arquitectura (funcionalismo, dinamismo). Es una estética que viene facilitada por el uso de nuevos materiales (hierro, vidrio). Frente a una escultura sólida y estática, el Futurismo propone una escultura en movimiento.

Actitud provocativa

Los futuristas adoptan una posición provocadora y celebran exposiciones muy atrevidas. Publican manifiestos escandalosos, desafiantes. Gracias a esta tendencia al escándalo, a la manifestación, el Futurismo alcanza una difusión por Europa y llega a relacionarse con movimientos políticos como el fascismo y la Revolución Soviética.

Relación con el Formalismo ruso

En torno a la Universidad de Moscú se congregó un grupo de poetas, escritores y profesores (el OPOJAZ) que iniciaron el

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