Gato.

El docente que posee proyectos de vida asume su labor pedaggica como educador e incluye esta en la complejidad de su propia vida. El xito de un docente y en general de toda persona depende de la manera como se proyecte en la vida. No todo docente educa. No todo docente es pedagogo. No todo docente es maestro. Es deseable que el profesor y quien ejerza la docencia sea un verdadero pedagogo, maestro y educador. As mismo, es deseable que el verdadero pedagogo y educador asuma este oficio como uno de sus proyectos de vida, sin permitir que el mismo cope su existencia.

Empiezo por la ltima parte. Muchos docentes entregan toda su vida al oficio de educar, dejando de vivir otras dimensiones de la vida, o dedicando lo mejor de s a este y poco o nada a la calidad de vida personal, familiar, social, cultural, espiritual, esttica o poltica. El proyecto de vida pedaggico no reside solamente en prepararse de manera permanente para generar oportunidades y capacidades de intervenir en la formacin integral de los estudiantes, sino tambin y sobre todo en asumir su vida con pensamiento pedaggico, es decir con capacidad para intervenir pedaggicamente en el manejo de su propia vida. Las personas que no poseen proyectos de vida avanzan consciente o inconscientemente proyectos de muerte, ven las cosas en y desde una misma direccin.

Es cierto que el verdadero educador roba buena parte del tiempo de su vida para entregarla a este oficio. Pues hay que invertir en la preparacin de verdad y con rigor de las clases, para generar posibilidades y capacidades de motivacin y aprendizaje significativo, desarrollo de competencias cognoscitivas y socioafectivas, comprensiones y vivenciacin de conocimientos; en conocer los progresos en los campos y disciplinas afines a las reas de formacin, as como diferentes enfoques y modelos pedaggicos clsicos y contemporneos, para no quedarse con visiones y perspectivas tericas y metodolgicas lineales, nicas, uniformes y rgidas, negndose la posibilidad de recoger lo mejor de la diversidad pedaggica -- flexibilizar la mirada es una manera de crecer como persona; toda flexibilidad edifica --; ; en regalarle tiempo al estudiante en lugar de cerrarle las puertas del afecto, la amistad, la tolerancia y la comprensin (porque son muchos, porque no hay nada que hacer- dirn); en conocer a los estudiantes y seleccionar metodologas heterogneas en lugar de homogeneizantes que advierten a estos como una masa nica que debe aprender, comprender y actuar del mismo modo y a un mismo comps rtmico; en fin, requiere tiempo que la relacin laboral no otorga para ver y hacer lo que la rutina le impide, pero que l est dispuesto a dar o inventar porque libremente ha asumido un compromiso moral y tico (consigo mismo y con la sociedad): el de educar, es decir favorecer el desarrollo humano y de la vida, funcin que no se les exige a quienes libremente asumen oficios o compromisos diferentes.

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