ClubEnsayos.com - Ensayos de Calidad, Tareas y Monografias
Buscar

Importacion De Parquets

alfarin22228 de Octubre de 2013

10.203 Palabras (41 Páginas)241 Visitas

Página 1 de 41

1. INTRODUCCION

Los bosques naturales en Bolivia constituyen una tradicional fuente de múltiples recursos complementarios a la subsistencia diaria de los pueblos rurales, originarios e indígenas. También son la base de una creciente industria de bienes maderables y no maderables que generan fuentes de trabajo e importantes ingresos al Estado y Gobiernos locales. Gran parte de los bosques bolivianos conforman ecosistemas forestales tropicales que son internacionalmente reconocidos por las funciones y servicios ambientales que cumplen como mitigadores de cambios climáticos, ecoturismo, fuentes de biodiversidad y reguladores de regímenes hídricos.

La diversidad geográfica, étnica, cultural y socio económica de Bolivia produce en torno a los bosques un cuadro extraordinariamente complejo y dinámico de formas de acceso, normas de uso e interrelaciones entre usuarios, cuyas percepciones, actitudes, acciones y conflictos responden a su vez, a trayectorias históricas, realidades contemporáneas y visiones futuristas. El principio básico de la sostenibilidad de los recursos forestales debe tomar en cuenta, los límites naturales de protección y producción para compatibilizarlos con el desarrollo social y económico deseado (Superintendencia Forestal, 2004).

Sin embargo, el principio básico de la sostenibilidad de los recursos forestales debe tomar en cuenta los límites naturales de protección y producción para compatibilizarlos con el desarrollo social y económico deseado. En este sentido, vemos con preocupación como las tierras boscosas que son únicamente valorados por la madera comercial, alientan una peligrosa y persistente conversión a otros usos, incluso en tierras no aptas para fines agrícolas o ganaderos.

Los bosques en Bolivia son bienes de dominio originario del Estado, de ahí que para mantener y mejorar sus beneficios económicos y ambientales se requiere consolidar políticas integrales de uso sostenible. La Ley Forestal 1700, constituye parte de esta estrategia, la cual necesita apoyo de otros instrumentos jurídicos como la definición de tierras forestales, incentivos al manejo forestal diversificado, y promoción de inversiones, que entre otros constituyen temas esenciales que deben desarrollarse basándose en estudios sobre disponibilidad y potencialidad de los recursos forestales.

1.1 Antecedentes Históricos del Sector Forestal en Bolivia

Hasta antes del año 1952, la explotación de recursos forestales en Bolivia se limitaba únicamente a la extracción de biomasa para leña o carbón. A partir de la Revolución Nacional y de las reformas aplicadas en el país, se inició un proceso de fomento a la ocupación de tierras forestales por pequeños y grandes agricultores y, empresas forestales, con la finalidad de estimular un proceso de acumulación de capital con base en la producción agrícola destinada a la sustitución de importaciones, así como también, de promover la expansión de operaciones forestales para atender la demanda interna y externa de maderas tropicales. Uno de los principales estímulos para la ocupación de tierras forestales y su explotación fue la articulación caminera de las tierras bajas con los centros comerciales del país.

A partir de los años 60’s, se incrementó la presión sobre las zonas forestales, sin embargo, aunque se ampliaron las operaciones de extracción forestal, las propuestas de desarrollo de la época no consideraban al sector forestal como componente importante de la diversificación económica. Recién a partir del año 1985, el ajuste estructural y los cambios hacia la nueva política económica que eliminaron las políticas sectoriales, afectaron de manera más notoria el desarrollo de la agricultura de exportación y la explotación forestal en tierras bajas.

Desde el año de ajuste estructurar 1985 hasta el año 1996, la política forestal incentivaba la extracción maderera en el corto plazo, a través de contratos de aprovechamiento por periodos de tiempo reducidos (alrededor de 5 años). La industria desarrollada por las empresas extractivas, era primaria e incipiente, no agregaba mucho valor a sus productos y, tenía limitados incentivos hacia el aumento de la productividad. En aquella época, las instituciones encargadas de formular políticas, clasificar los bosques, otorgar autorizaciones y contratos de aprovechamiento, reglamentar la industria forestal, promover la reforestación y la investigación, proteger la flora y la fauna silvestre y, fiscalizar y controlar las actividades de aprovechamiento forestal eran los Centros de Desarrollo Forestal (CDF’s), dependientes de las Prefecturas.

El sistema de recaudación forestal aplicado por el CDF, se basaba en los derechos de desmonte o tasas por volumen de madera aprovechada, las cuales, estaban diferenciadas por especie. Los volúmenes extraídos eran declarados por las empresas forestales mediante notas de remisión, que las empresas transportadoras debían presentar en los puestos de control, donde se calculaban y cobraban los derechos de desmonte.

Este sistema y la debilidad institucional del CDF favorecieron la búsqueda de beneficios económicos en base a recursos forestales de una manera insostenible ya que los puestos de control apenas registraban el 40% del volumen real aprovechado, convirtiéndose éstos en focos de corrupción en desmedro de las recaudaciones del Estado (MACA, 1991). Por otro lado, la extracción selectiva (Mara, Cedro y Roble) y no planificada de especies de mayor valor y, la concentración del poder oligopólico en tan sólo 50 empresas extractivas, a cargo de 185 concesiones que abarcaban cerca del 40% del territorio boliviano, demandó el aprovechamiento de extensas áreas boscosas y favoreció intereses de empresas madereras particulares por sobre los intereses de grupos indígenas y campesinos asentados en las tierras forestales.

Ante esta situación, durante la primera mitad de los años 90 quedó clara la necesidad de establecer una nueva política que se reoriente hacia un manejo sostenible de los recursos forestales. Es así que en 1992 se promulgo la Ley del Medio Ambiente, con el fin de normar el manejo integral y el uso sostenible de los recursos del bosque, a través de una clasificación de bosques de acuerdo a su finalidad y, posteriormente, en julio de 1996 se promulga la Nueva Ley Forestal (Ley No. 1700) y su Reglamento, implantándose a través de la misma, normas que regulan los derechos de acceso al recurso forestal y, un modelo de desarrollo forestal con un enfoque sostenible, reconociéndose a través de la misma, Convenios Internacionales sobre Diversidad Biológica, Desertificación y Sequía, SITES y Cambio Climático.

La Nueva Ley Forestal ha reafirmado el dominio originario del Estado sobre los recursos forestales, buscando la inclusión activa de comunidades indígenas y originarias al manejo sostenible de los bosques, con la participación de Tierras Comunitarias de Origen (TCO’s) Agrupaciones Sociales de Lugar (ASL’s) y, Organizaciones Territoriales de Base (OTB’s).

Además, el nuevo régimen estableció incentivos hacia una mayor diversificación en el uso de maderas, la búsqueda de mayor eficiencia en la explotación y uso de los recursos, la instauración de nuevos sistemas de tenencia de tierra forestal (concesiones) y de patentes forestales (por superficie aprovechada) y, la clasificación de tierras para el aprovechamiento forestal, entre otros. Actualmente, todo bosque que sea aprovechado de manera legal en Bolivia, debe efectuar un Plan de Manejo Forestal Integral que incluye un inventario Forestal, un censo comercial del total de ejemplares que se extraerá en cada campaña y, un estudio de impacto ambiental.

Por otro lado, la Nueva Ley instituyó una serie de arreglos institucionales y jurisdiccionales, siendo la creación de la Superintendencia Forestal (1996) el arreglo institucional más importante, al ser creada como una institución autárquica, encargada de vigilar el cumplimiento del nuevo régimen forestal.

2.-ANTECEDENTES

La palabra parquet es de origen francés, parc era un estrado reservado a jueces y abogados en las cortes, constituidas por tablas de roble machihembradas y afianzadas sobre rastreles. En el Palacio de Fontainebleau es donde por primera vez se usa la tarima en espina de pez (concretamente en la Galería Francisco I) denominándose ‘parquet’ para diferenciarlo de los grandes entablados rústicos. Los parquets más famosos son los de Versalles (1665- 1685) que en realidad son paneles cuadrados y resuelven el problema de la estabilidad de la madera de los suelos gracias a la trama interna del panel.

Este panel dio origen a otros (Chantilly, Arambert, Melezin, Saint-Frageau) y se extendió rápidamente por Europa (Palacio Real de Madrid, Hermitage de San Petersburgo, Palacio de Schonbrunn, Castillo de Pommersfelden). Los parquets siguen evolucionando. Se desarrolla el corte en punta de Hungría o espina de pez (Museo del Louvre). Los suelos de taracea son los herederos naturales del panel y emplean maderas exóticas (Sala de Maderas Finas del Monasterio del Escorial, el BayerischNationalMuseum de Alemania o el Palacio Real de Turin). Si en los siglos XVII y XVIII el parquet alcanzo el máximo de refinamiento y complejidad se empezó a popularizar en viviendas burguesas y dependencias públicas.

La madera se ha usado como revestimiento de suelo desde tiempos inmemoriales. Los orígenes de la utilización de pavimentos de madera en la historia se remontan aproximadamente al año 1250 en Europa Central.

Hasta el siglo 15 eran habituales los suelos sencillos de tabla de madera blanda en la construcción de

...

Descargar como (para miembros actualizados) txt (68 Kb)
Leer 40 páginas más »
Disponible sólo en Clubensayos.com