Informe de lectoescritura CAU - UNGS.
Enviado por Solange Pitronaci • 7 de Septiembre de 2016 • Informe • 2.310 Palabras (10 Páginas) • 609 Visitas
[pic 1]
Introducción[pic 2]
Cuando hablamos de vacunas podemos notar que la sociedad adopta posiciones claramente opuestas. Están quienes confían completamente en ellas, y quienes, por alguna experiencia negativa relacionada con las vacunas, consideran otros puntos de vista que explican la causa científica de esa experiencia.
La primera vacuna fue descubierta en 1796 por Edward Jenner, para combatir la viruela. Esta debe su nombre al hecho de que las ordeñadoras de la época, que estaban en contacto con la viruela de vaca (''viruela vacuna''), se tornaban inmunes y no contagiaban la viruela humana.
De la mano de los avances en medicina y tecnología, la vacunación fue generalizada. Este hecho es, en gran parte, responsable de la erradicación mundial de enfermedades infecciosas, como, por ejemplo, la viruela y el sarampión.
En nuestro país, la Sociedad Argentina de Pediatría adhiere al Calendario Nacional de Vacunación de la Republica Argentina, indicado por el Ministerio de Salud de la Nación. El calendario actual, obligatorio y gratuito, persigue el objetivo de erradicar enfermedades a partir de una inmunización superior al 95% de la población.
Sin embargo, existe un movimiento anti-vacunas, que elige la medicina alternativa a raíz de los estudios presentados que indican que las vacunas son causales de muerte súbita, autismo y otras reacciones adversas.
Por todo lo mencionado anteriormente, conocer este tema es importante debido a que es necesario resolver este debate, que pone en riesgo la buena salud de la población. Por consiguiente, la realización de este informe intentará responder si las vacunas son efectivas parta controlar enfermedades que afectan a la humanidad.
Para abordar este tema, tomaremos en consideración cuatro aspectos importantes que nos permitirán profundizar el debate; por un lado, la efectividad de las vacunas; por otro lado, las consecuencias que estas pueden provocar, tanto las vacunas en si, como también otros agentes que producen riesgos; en tercer lugar, el marco regulatorio que las contiene, y los derechos y obligaciones individuales y colectivos; y, por ultimo, las estrategias utilizadas por las autoridades para controlar enfermedades.
Para la elaboración del presente, se han consultado los textos de diversos autores, competentes en el tema y con posturas diferentes: ''El brujito de Gulubú'', del licenciado en Ciencias Biológicas Ricardo Cabrera; ''Sobre la inserción de la viruela'', del escritor, historiador, filosofo y abogado francés, Voltaire; ''Las vacunas y sus mitos'', del medico Eduardo Ángel Yahbes; y ''La maravillosa salud de los niños no vacunados'', de la pediatra suiza Françoise Berthoud.
¿Causalidad o casualidad?
Sin dudas, cuando hablamos de vacunas, uno de los puntos más cuestionados se basa en la efectividad de las mismas para prevenir o erradicar enfermedades. En este ámbito, podemos identificar dos posturas completamente opuestas: una que está a favor y otra que está en contra. Los primeros sostienen y aseguran la efectividad de las vacunas, tomando como referencia las estadísticas que dicen que la cantidad de muertes y/o padecimientos han disminuido considerablemente luego de la implementación de estas. Por otro lado, los que están en contra, critican esa postura, sosteniendo que, las enfermedades infecciosas declinaron mucho antes de su implementación, y que nada tienen que ver con los frenos en las enfermedades. Como veremos a continuación, existen distintas opiniones sobre el tema.
De acuerdo con Cabrera, el descubrimiento de la vacuna fue uno de los avances portantes en la medicina, ya que, las estadísticas muestran que, desde su implementación, ''han salvado vidas y evitado padecimientos mas que cualquier otra panacea en la historia d la humanidad''. Para sostener su afirmación, el biólogo argumenta que la efectividad de la vacuna esta ampliamente demostrada por diversos estudios sanitarios y epidemiológicos, y asegura: ''la negación de esta realidad es un síntoma de mentes paranoicas y visiones conspirativas''. Una postura similar es adoptada por Voltaire, quien plantea: ''si un niño tuviese la viruela benigna, no se moriría, no quedaría marcado y se vería libre de esta enfermedad para el resto de sus días''. Al respecto, señala que, al menos diez mil hijos de familias inglesas deben su vida a la reina y a la señora Wortley-Montaigu, por haber llevado la inoculación de la viruela a Inglaterra.
Por el contrario, Yahbes alega que, quienes avalan las vacunas lo hacen porque reciben información parcial y desconocen las investigaciones que refutan esta efectividad. Subraya que las muertes por enfermedades infantiles decrecieron 80% en Estados Unidos, antes de la vacunación; y añade una situación similar, acontecida en Gran Bretaña, donde explica que el pico endémico de polio fue en 1950, y seis años mas tarde había declinado 82%, momento en el cual se introdujo la vacuna. Por otro lado, manifiesta que es imposible hacer un análisis acerca de la efectividad de las vacunas, debido a que no es obligatorio denunciar sus efectos adversos. Sin ir más lejos, en Nueva York, solamente el 3,2% de los pediatras reportan los casos de sarampión al departamento de salud, cuando esta enfermedad, supuestamente, estaba erradicada.
Peor el remedio…
''… Mordaz alocución de contenido condenatorio, pues se usa en los casos en que se optó por una solución que, lejos de aliviar el problema, lo agravó…'''
Es la explicación del tan conocido refrán que, en ocasiones, usamos para decir que los problemas de gran trascendencia requieren soluciones acordes. Pero, a veces, esas soluciones o remedios al problema son peores que el problema en sí.
Este es, precisamente, el reclamo del movimiento anti-vacunas, la principal razón por la cual surgió esta postura. Hay quienes dicen que no existen efectos adversos y que la idea de que los haya es una sospecha absurda, proveniente de una epidemia de sinsentido, en referencia a los que deciden no vacunar a sus hijos. Pero hay una realidad que no puede negarse. Se han presentado diversos estudios donde se denuncian graves reacciones y, en algunos casos, hasta muertes, como consecuencias de la vacunación. Por esta razón, presentaremos las diferentes posturas de los autores consultados.
Para Yahbes, es importante informar que se comprobó que, en la gran mayoría de los países donde se comenzó a inmunizar con antipolio - vacuna Sabin o Salk - o antidiftérica, aumentaron significativamente los casos de estas enfermedades, que se pretendía prevenir. Por otro lado, considerando varios estudios internacionales, afirma que las vacunas son causa del Síndrome de Muerte Súbita Infantil, son cofactor contribuyente en el desarrollo de autismo, y describe una lista de reacciones adversas generadas por determinadas vacunas, donde: ''luego de la administración de la vacuna contra la Hepatitis B, aparecieron procesos artríticos, daño muscular y nervioso, perdida de visión y de memoria, síndrome de fatiga crónica, y también el fallecimiento de bebes a las horas de recibirla''; se ha reconocido que la vacuna Sabin ha tenido un contaminante viral del mono, adquirido durante el proceso de preparación, el cual tiene una gran capacidad para producir tumores malignos de distintas naturaleza. Además de los elementos biológicos, las vacunas contienen una serie de sustancias que, de acuerdo con Yahbes, pueden tener un efecto toxico, como el Timerosal, que se compone, entre otros elementos, de mercurio, y que, al aplicar este compuesto a un bebe, recibe una dosis de mercurio que excede los limites aceptables. Berthoud adhiere a esta postura y agrega que, en Inglaterra, ''los niños, después de haber recibido la vacuna contra la tos ferina, tenían 6.5 veces mas asma que aquellos que no habían sido vacunados''; y los niños no vacunados tienen menos alergias, menos otitis, menos amigdalitis y menos epilepsias que los que han recibido vacunas
...