Intimas, Ensayo de lectura

Se fue un día cualquiera, como si todo hubiese sido un juego, por más que le imploraba que se quedara conmigo o que por lo menos me diera una explicación coherente, me respondió con un rotundo no. Me dejo ahí, con las ilusiones hechas pedazos, y una vaga promesa de su regreso, pero la dejo a ella como un repuesto.

En ese tiempo era una cosa casi inexistente, pero en pocos meses creció de una manera inexplicable, me vi en la necesidad de adquirir una casa en medio de la nada con la esperanza de que allí no me atormentaría a todo instante, poco después me di cuenta del inmenso error que había cometido.

A las pocas semanas, era casi del tamaño de mi hogar, seré honesto no fue fácil, al principio estaba decidido a dejarla tumbada en una esquina cualquiera, no era una compañera grata, no era como aquella que me abandono sin razón alguna. Ella era fiel, se quedaba quieta en la oscuridad por tanto tiempo que algunas veces olvidaba que estaba ahí, y me percataba de ella porque posaba sus manos heladas sobre mi espalda y me lo recordaba involuntariamente.

Poco a poco me fui acoplando a este estilo de vida, ella se iba algunas veces y regresaba por las madrugadas, esto me daba tiempo para recordar los pocos pero cálidos momentos que alguna vez viví, esto continúo por un tiempo, yo sacudía el polvo, las telarañas y algunas veces fregaba el piso para mantener viva la ilusión de que algún día volvería, aquella que se fue prometiendo volver, que regresaría a besarme cálidamente la frente y sentiría su calidez en mi corazón, que me alejaría de aquel frio y me enseñaría a cuidarla como a mi vida.

Afortunadamente no fue así, la compañera que al principio me fue tan desagradable se fue haciendo más cálida y reconfortante, la gente me tomaba como un loco por vivir tan armoniosamente con ella. Pero para mí es la prueba fehaciente de que no es necesaria aquella que se nos escapa de las manos sin remedio cuando se puede vivir toda una vida con aquella con la que todos rechazan por el papel que le ha tocado interpretar aun así mi visión continuaba colocando a estas dos como rivales, cuando en realidad eran intimas amigas.

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