Kids: Vidas Perdidas (ensayo)

KIDS: Vidas Perdidas

Por regla general, el cine siempre ha tratado de reflejar el contexto social y el momento de la historia por el que atraviesa la humanidad. Y la época actual no es la excepción, ya que desde hace algunos años a la fecha --de alguna forma u otra-- se han realizado películas con las que se pretende hacer hincapié en los graves problemas que acongojan a nuestra sociedad, tales como el sexo, las drogas, la violencia, el sida, etc. Y precisamente es dentro de este contexto en el que se desarrolla Kids: Vidas Perdidas, producción de 1995 dirigida por Larry Clark y que no tiene mayores pretensiones que el ser un reflejo fiel de la terrible problemática por la que atraviesan los adolescentes de Estados Unidos que se encuentran entre los 12 y los 17 años de edad.

La película nos narra la historia de Telly (Leo Fitzpatrick), quien es un adolescente de unos 15 años cuyo único placer y motivación en la vida es el de tener sexo con jóvenes vírgenes y para quien los condones son una “pérdida de tiempo”. De hecho, en una secuencia al principio de la película, Telly y varios de sus amigos mencionan que el Sida es un invento de los adultos para asustarlos, algo así como la versión moderna de la antigua leyenda del coco o el robachicos. Telly mantiene relaciones sexuales a diestra y siniestra, sin importarle en lo más mínimo los sentimientos de las casi niñas, a quienes convence de irse a la cama mediante su “don” de persuasión. En otras palabras, tiene las típicas actitudes hipócritas de una persona de mucha mayor edad. Por otro lado, se encuentra su amigo Casper (Justin Pierce), quien si bien no está tan obsesionado con el sexo como Telly, encuentra su escape a una vida sin sentido a través de las drogas y el alcohol. Y también tenemos a la manzana de la discordia de esta historia, Jenny (Chloe Sevigny), quien solamente ha tenido una relación sexual en su vida (obviamente con Telly) y que al irse a realizar unos exámenes médicos descubre que está infectada con el VIH, por lo que busca desesperadamente a Telly para contarle su trágica historia. Mientras tanto, Telly continua acostándose a diestra y siniestra con la consecuente propagación de la enfermedad, que hacia el final de la película llega a afectar hasta su propio amigo Casper y a decenas de otros adolescentes.

La premisa anterior permite al director el realizar un muy fuerte y crudo retrato de la juventud actual, en la que la falta de amor de los padres (o la falta misma de estos), aunado a una existencia completamente vacía, sin porvenir, sin motivaciones, empuja a los adolescentes a buscar equilibrar su vida mediante todo tipo de excesos. Es así como podemos ver escenas que van desde el mundo de los "antros" en donde se reúnen, pasando por peleas callejeras de gran violencia producidas por los efectos de las drogas, hasta verdaderas orgías de sexo, alcohol y estimulantes diversos… y todo esto a una edad máxima de 17 años. El lenguaje utilizado en la película, aunque podría asustar a más de uno, es el tipo de lenguaje con el que se comunican los chicos de la actualidad.

A continuación enumerare cada uno, en el mismo orden en el que se encuentran en la lectura, de las características de adolescencia. Posteriormente pondré el ejemplo que la película nos proporciona.

1. Búsqueda de sí mismo y de la identidad

Telly, según el ambiente social en el que se desenvuelve, ha adoptado una identidad, al igual que su grupo de amigos. Cuando a Casper le menciona lo ocurrido en la habitación, a principio de la película, como si intentara tener continuidad en lo que hace. Otro ejemplo de esta característica son las reuniones tan a menas entre los chicos y las chicas, haciendo mención a la identificación de sexo, donde ellas evidencian a ellos y viceversa.

2. La tendencia grupal

Por supuesto esto se ve a lo largo de la película, en todo momento Telly y Casper nunca estuvieron solos siempre, o ellos dos o con los demás chicos con los que encuentran afinidad a sus necesidades, gustos y la dependencias mismas que se tenía con los padres. Jennie, la chica que hasta antes de saber los resultados, también permanecía en grupo con las chicas que creía identificar, al final de cuentas ya era de ellas, pues ya había tenido su primera relación sexual. Después de enterarse de los resultados se aleja, busca estar sola y después avisarle a Telly de lo que estaba pasando.

3. necesidad de intelectualizar y fantasear

Vuelvo a retomar a Telly para este ejemplo, en el momento en que cree que el SIDA solo es un invención de los adultos para asustarlos y de esta manera prohibirles tener relaciones sexuales. Esta escena de la plática es cuando llegan Casper y Telly, después de haber estado con una casi niña, con su grupo de amigos y sale a tema también el uso del condón.

Cuando Jennie decide ir a buscar a Telly, con la intención de decirle lo que está ocurriendo y poder ayudarlo, pero la realidad es que no es así ella llega y lo encuentra con otra niña teniendo relaciones sexuales.

4. Las crisis religiosas

Aquí creo que en este caso todo son del polo de los ateos, pues con ese estilo de vida dudo que alguno fuera un ferviente religioso.

5. La desubicación temporal

Definitivamente todos los adolescentes de la película están completamente desubicados, y solo intentan manejar su vida según sus necesidades y sus gustos. Me parece muy bueno el ejemplo de Jennie cuando llega al antro, no solo con saber lo que paso todavía permite meterse éxtasis como creyendo que con eso se le va a pasar lo que está viviendo. El momento de soledad que busca tener y le pide a su amiga que la acompañó a recibir los resultados, son también un ejemplo de esta característica. Cuando habla a su casa y les dice a su hermano lo que debe hacer y lo que debe decirle a su mamá. Intentando manejar la situación, más bien la empeora.

Y bueno aquí también podríamos hacer una pregunta ¿por qué Telly no usaba condón?

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