LA MÁSCARA DE LA MUERTE ROJA.

LA MÁSCARA DE LA MUERTE ROJA.
La Muerte Roja había devastado el país durante mucho tiempo. Nunca había habido una plaga mortal o una horrible. La sangre era su seña de identidad - enrojecimiento y el horror de la sangre. En primer lugar, la víctima sintió fuertes dolores y mareos con experiencia. Luego, la sangre empezó a salir de su piel. Las manchas rojas en el cuerpo, y especialmente en la cara, de la víctima fueron los signos que tenía la Muerte Roja. Por supuesto, nadie quería saber entonces. Nadie se acercaba a él. Todo el proceso, desde la captura de la plaga a la muerte, sólo tomó media hora.
Pero el príncipe Próspero era feliz y sin miedo. Después de la mitad de su gente había muerto, que reunió a un millar de amigos sanos, sin preocupaciones de su corte y se los llevó lejos, a uno de sus castillos distantes.
El castillo fue un magnífico edificio. El príncipe, el ingenio de su sabor inusual pero excelente, lo había planeado sí mismo. Hubo un fuerte muro, alrededor de ella. En la pared fueron las puertas de hierro.
Una vez que todos estaban adentro, los cortesanos selladas las puertas cerradas enorme, de modo que nadie podía entrar y nadie pudo salir. No había mucha comida en el castillo, y el príncipe siempre todo tipo de entretenimiento-payasos, músicos, bailarines de ballet y un montón de vino. El príncipe y sus amigos planeaban escapar de la terrible plaga fuera de los muros del castillo. El mundo podría cuidar de sí mismo, no me preocuparía ni pensar en ello. Todo el mundo interior del castillo estaba a salvo. En el exterior, como la Muerte Roja.
Cinco o seis meses más tarde, mientras que la peste siguieron matando a miles de personas en el mundo exterior, el príncipe Próspero invitó a sus amigos a un baile de máscaras, o mascarilla. El balón se llevó a cabo en una suite de siete habitaciones.
En muchos palacios, las suites están construidos en una línea recta. Pero aquí es muy diferente, para el príncipe, se recordará, tenía un gusto muy extraño. Hay como un giro brusco cada siete o diez metros, por lo que sólo podía ver una habitación a la vez. En el centro de cada pared, a la derecha e izquierda, había una ventana alta y estrecha. Estas ventanas daban a un pasillo que corría junto a las habitaciones. Las ventanas estaban hechas de vidrio de color, y variado el color del cristal de acuerdo a la decoración de la habitación. En la habitación, en el extremo oriental, por ejemplo, todo era azul, y las ventanas eran de color azul brillante. En el segundo cuarto, todo era color morado, al igual que las ventanas. El tercer cuarto era de color verde, la naranja cuarto, el quinto blanco y el violeta sexto. En la sala de sesiones, todo estaba cubierto de terciopelo negro. Sólo en esta sala fueron las ventanas de un color diferente a la decoración-que eran escarlata, el color de la sangre.
En la noche de la máscara, ni velas fueron colocadas en cualquiera de las siete habitaciones. Sin embargo, en el pasillo frente a frente vidriera, había una mesa de tres patas sosteniendo un plato de fuego. La luz del fuego brillaba a través de los cristales de colores y produce un efecto extraño y maravilloso. En la sala de negro, sin embargo, el efecto de la luz del fuego de streaming a través del cristal de color sangre en el terciopelo era verdaderamente horrible. La luz le dio una mirada salvaje en los rostros de los que entraron en esta sala que muy pocos de los invitados tuvieron la valentía de poner los pies aquí en absoluto. En esta sala había un reloj negro enorme, negro. Su péndulo con un sonido pesado y monótono. Estruendo .... Estruendo .... Estruendo .... Cada hora, cuando el reloj dio, le dio un fuerte, un sonido claro y musical. Era un sonido extraño que los músicos de la orquesta tuvo que dejar de jugar para escuchar. Los bailarines dejó de bailar, y todo el partido se convirtió en miedo. La gente se olvidó de su felicidad. Con cada campanada, los huéspedes del príncipe sintió el tiempo moviendo más y más hacia ellos. Pero tan pronto como las campanadas se detuvo, la risa se inicia de nuevo. Los músicos sonrió y prometió que no iban a dejar de jugar la próxima vez que el reloj dio. Pero, sesenta minutos más tarde, cuando el reloj hace el mismo sonido, todas las personas reaccionan de la misma manera.

Sin embargo, el balón fue magnífica. El príncipe tenía un buen ojo para el color y el efecto. No sólo había previsto la decoración de las siete habitaciones de la pelota, pero él había decidido lo que todos deben usar. Y el extranjero, más trajes extraños nunca se vieron! ¡Eran grotescos Fue una colección de sueños que se movía en torno a las habitaciones. Estos sueños bailaba, cambiando de color según el color de la habitación haciendo la música salvaje de la orquesta parece el eco de sus pasos. Y entonces el reloj negro en la sala de terciopelo dio la hora, y por un momento todo quedó en silencio. Todo era silencio, excepto el sonido del reloj. Sonido metálico sonido metálico sonido metálico ... .. ... .. ... .. Pero las campanadas sólo duró un instante, y la risa calma se podía escuchar una vez más. La música comenzó de nuevo, y los sueños baila más violentamente que antes, teniendo el color de las habitaciones. Ninguno de los bailarines se atrevió a ir a la sala de negro, como la luz entra por las ventanas era más rojo y sangriento, más que nunca, y la habitación parecía aún más terrorífico. Las otras habitaciones estaban llenas. Las personas se divertían en la fiesta del príncipe. Ninguno de los visitantes considera que el sufrimiento y la muerte fuera del castillo.
Cuando el reloj dio la medianoche, la música se detuvo y los bailarines seguían. El reloj sonó la campana XII, y la gente notó una figura enmascarada entrar en la habitación azul. La noticia de la llegada del extranjero se extendió rápidamente en toda la suite. Al principio la gente sintió sorpresa y desaprobación. Luego mostró su horror.
Había muchos trajes extraños en la fiesta de esa noche, pero todos estuvieron de acuerdo que el traje del desconocido fue demasiado lejos. Era una figura alta y delgada, y estaba vestido de pies a cabeza con la ropa de la muerte. Su máscara parecía el rostro de una persona muerta, y era difícil saber si era real o no. El extraño enmascarado se había vestido como la Muerte Roja, su ropa estaba chorreando sangre, y había sangre en la cara y la frente.
El extraño avanzó lentamente entre los bailarines. Cuando el príncipe Próspero primera vez que lo vio, se sacudió de terror, pero luego su rostro se puso rojo de ira.
La música se detuvo cuando empezó a hablar. "¿Quién se atreve a insultarnos como este? -Exclamó-. "¿Quién se atreve a venir aquí y se burlan de nosotros? Sostenga él y quitarse la máscara, para que podamos saber quién es. Lo vamos a colgar en la salida del sol! "Las palabras del príncipe se hizo eco a través de las siete habitaciones, pues era un hombre fuerte y valiente. Mientras hablaba algunos de los bailarines se trasladó hacia el extranjero. Un terrible temor se apoderó de ellos, y nadie podría poner la mano y agarrar la figura enmascarada. Mientras que todos los bailarines volvió contra las paredes de las habitaciones, el desconocido caminaba lentamente de la sala azul a la sala púrpura, de la sala púrpura a la sala verde, y luego a la naranja, el blanco y el violeta. Nadie trató de detenerlo. El príncipe Próspero, enojado consigo mismo por su miedo, corrió rápidamente a través de las seis habitaciones después de que el extraño. El príncipe sacó su espada y corrió a atacar a la figura enmascarada. Cuando el desconocido llegó a la sala de negro, se volvió de repente. Hubo un fuerte grito, la espada cayó sobre la alfombra negro, y el príncipe Próspero cayeron al suelo ... muerto.
Una multitud de bailarines que se encuentran el coraje para atacar al extraño. Se agarró la figura enmascarada y se quitó la máscara y el traje. Se miraron con horror. La máscara y el traje se vacía! No había nadie dentro!
Todo el mundo se dio cuenta de que el desconocido era la Muerte Roja. Había venido como un ladrón en la noche para robar su esperanza, su felicidad y su vida. Uno a uno, los bailarines murió. Nadie escapó de la terrible muerte. El castillo tenía ninguna defensa contra el mal plaga. Pronto los siete habitaciones estaban llenas de sangre.
Cuando el bailarín pasado murió, el reloj negro gran parada, y los fuegos en el pasillo se apagó. No había nada más que oscuridad, decaimiento y la muerte roja.


LA pozo y el péndulo 

Yo estaba enfermo, enfermo de muerte, con esa larga agonía. Cuando me desataron por fin, y se me permitió sentarme, pensé que se iba a desmayar. Los miembros de la Inquisición fueron a mi alrededor en la sala cuando me condenaron a muerte. Después de eso, no entendí nada. La muerte. La palabra se repetía una y otra vez en mi cabeza. Las voces de mis verdugos perdido todo sentido para mí. Entonces oí nada. Todavía podía ver, si todo era extraño y exagerado. Los labios de los jueces vestidos de negro parecía blanco más blanco que el papel en que estoy escribiendo ahora sobre. Sus labios eran delgados y lo grotesco, ya que pronunció mi destino. A pesar de que no podía oír lo que decían los jueces, se hizo eco de las palabras. La muerte. Vi los labios forman las sílabas de mi nombre, y yo temblaba de miedo.
Por unos momentos de horror delirante, pensé que las velas en la mesa parecían ángeles delgada, blanca que estaban allí para salvarme. De repente, algo frío helado se apoderó de mi espíritu, y me sentía cada fibra de mi cuerpo vibrar. La idea me vino a la mente que sería dulce descanso en la tumba. La oscuridad que me rodeaba, seguido por el silencio y la quietud.
Muy pronto, el movimiento y el sonido volvió a mí. Yo podía oír mis propios latidos. Sonido, movimiento y el tacto .... Entonces la conciencia de la existencia. Mi mente sabía que estaba vivo. Entonces sentí el terror como he tratado de entender lo que era y dónde estaba.
Yo podía moverse, todo volvió a mí, pero yo quería ser capaz de olvidar otra vez. Me acordé del juicio, los jueces, la pena y la oscuridad que me desmayé.
Hasta ahora no había abierto los ojos. Yo sabía que estaba mintiendo, no condicionado, en mi espalda. Puse nuestra mano, y cayó pesadamente sobre algo húmedo y duro. Traté de imaginar dónde podría estar. Quería mirar a mi alrededor, pero la idea me asustó tanto que me mantuvo los ojos cerrados. Yo no tenía miedo de ver algo terrible como yo que tal vez no había nada que ver. Finalmente abrí los ojos, y mis peores pensamientos se confirmaron. La negrura de la noche eterna fue todo a mi alrededor. Traté desesperadamente de respirar y no pánico. Me quedé en silencio e hizo un esfuerzo para pensar. Me acordé de la tortura y la Inquisición. Yo sólo tenía que descubrir lo que había sucedido desde entonces. ¿Dónde estaba yo?
Cuando alguien es condenado a muerte, la ejecución es por lo general en los autos de fe, y una de ellas había tenido lugar en la noche de mi juicio. Por alguna razón, habían optado por no matarme. Tal vez querían esperar a que el sacrificio que viene, que sería dentro de tres meses. Pero eso era imposible, sino que pidieron que las víctimas ahora. De todos modos, si ese fuera el caso, estaría en una celda de condenados-todas las celdas de los condenados en Toledo había algo de luz. No como aquí.
De pronto tuve una idea terrible. Mi sangre corrió. Me desmayé de nuevo. Cuando me desperté, me puse de pie. Me temblaba todo el cuerpo. Me saludó mis brazos en todas direcciones. Yo no sentía nada, y al principio no tenía el valor de moverse en caso de que se encuentran los muros de mi tumba. Finalmente, el suspenso fue demasiado para mí, y dije para seguir adelante. Me acerqué muy lentamente, con los brazos delante de mí. Mis ojos se trató desesperadamente de encontrar el más mínimo rayo de luz. Caminé tres, cuatro, cinco pasos ... .. diez. Todo estaba oscuro y vacío. Me dejó de temblar. Por lo menos no me habían enterrado vivo.
Hubo mil vagos rumores acerca de los horrores de Toledo. Yo sabía que mi destino era una muerte terrible, de que no tenía ninguna duda. Pero cuándo y cómo iba a morir?
Mis manos extendidas finalmente encontró algo sólido, muy suave y fría pared de piedra. Con el fin de establecer las dimensiones de mi calabozo, me arrancó el fondo de mi túnica y

lo colocó en el suelo en ángulo recto con la pared. Muy lentamente, me puse las manos planas sobre la pared y siguió con la incertidumbre de un ciego. Tenía la esperanza de que de esta manera que iba a encontrar mi punto de partida cuando completó el circuito. Sin embargo, no había contado con el tamaño de la mazmorra o de mi propia debilidad. El suelo estaba húmedo y resbaladizo. Me tambaleé y buscó a tientas mi camino por algún tiempo, y después me tropecé y caí. Yo no tenía fuerzas para levantarse de nuevo, y me quedé dormido.
Cuando me desperté, me encontré con una hogaza de pan y una jarra de agua junto a mí. Me comí el pan en segundos, pero bebió el agua más lentamente. Volví a mi viaje alrededor de la prisión. Después de lo que pareció una eternidad, he encontrado el fragmento de tela en el suelo. Hasta el momento me caí, me había contado cincuenta y dos pasos, ahora conté cuarenta y ocho más antes de encontrar la tela. Esto significaba que mi celda era uno alrededor de cien pasos. Sin embargo, con los ángulos en la pared, no podía adivinar la forma de la habitación.
Curuisity me hizo continuar mi exploración, aunque no había ninguna razón real para hacerlo. Salí de la pared y me decidí a tratar de caminar a través de la célula. Al principio me movía con mucha cautela, porque el suelo estaba fangoso y parecía peligroso. Me fui a vivir como una línea directa posible y había avanzado diez o doce pasos, cuando el fondo de mi bata quedó atrapado entre mis piernas. Me caí. Rápidamente me di cuenta de que algo andaba muy mal. Mi barbilla descansaba en el suelo de la prisión, pero mis labios y nada tocó la frente. Mi frente estaba fría y húmeda, y yo podía oler podrido hongo. Puse mi mano. Para mi horror, me di cuenta de que había caído en el borde de un abismo. No tenía idea de lo grande que era, así que rompió un pequeño fragmento de la piedra y la dejó caer en el abismo con el fin de averiguarlo. He escuchado a muchos segundos de duración, y finalmente llegó el sonido del agua golpeando la piedra, seguido por los ecos. Al mismo tiempo, hubo un ruido como un cierre de la puerta y un rayo repentino desmayo de la luz sobre mi cabeza. Vi claramente la muerte que habían planeado para mí que me había escapado por el momento. Un paso más antes de mi caída habría sido mi fin. Extrañamente, la muerte me había evitado era el tipo que siempre cree que sucedió sólo en los cuentos, algo inventado para hacer que la gente el miedo a la Inquisición. Para la Inquisición `s de las víctimas, se produjo la elección de la muerte por las peores agonías físicas o la muerte con terribles horrores mentales. Me habían dado el segundo "elección". Mis nervios estaban destrozados a causa de mi sufrimiento, y yo temblaba al oír mi propia voz. Me había convertido en el tema perfecto para las torturas que querían infligir a mí.
Yo estaba temblando. Busqué a tientas mi camino de regreso a la pared. Preferí morir allí en lugar de arriesgarse el terror de la fosa. Me imaginé que había más pozos en el calabozo. Si yo hubiera estado en un estado de ánimo. Puede ser que tuvo el valor para poner fin a mi miseria inmediatamente y tirarme al abismo. Pero yo era ahora el peor de los cobardes.
Un torbellino de pensamientos me mantuvo despierto durante lo que pareció un largo tiempo. Me las arreglé para caer en un sueño agitado, y una vez más, había una barra de pan y una jarra de agua junto a mí cuando me desperté, estaba tan sediento que bebió de la jarra entera de inmediato, el agua debe haber tenido algo en , porque desde el momento en que terminó de beber, no podía mantener los ojos abiertos. Dormí un poco más .... Un sueño como la muerte. No sé cuánto tiempo dormí, pero cuando abrí los ojos, podía ver los objetos a mi alrededor por primera vez. La luz era extraño y misterioso, pero al menos ahora podía ver el tamaño y la forma de mi prisión.
Me había equivocado por completo el tamaño de la habitación. Toda la circunferencia de las paredes había más de setenta y cinco pies. Este error me inquietó, y traté de descubrir la razón para ello. ¡Por supuesto! En mi primer intento de explorar la mazmorra, me contaba cincuenta y dos pasos, luego me caí. Debo haber aterrizado en la parte superior del fragmento de tela. Cuando me desperté, seguí caminando. Esto significaba que había completado dos circuitos de las paredes, pero pensé que había caminado alrededor de una sola vez.


Yo también había equivocado en la forma de la prisión, me encontré con muchos ángulos cuando sentí que mi camino alrededor de las paredes, pero el efecto de oscuridad total juega con la mente, para que yo exagerados estos ángulos. Ellos no eran más que pequeñas irregularidades en las paredes. De hecho, la sala de la prisión era cuadrada. También lo que yo había pensado era de piedra era de hierro, hierro en planchas enormes que daba la impresión de ladrillos en la pared. Toda la superficie de esta celda metálica estaba cubierto de figuras de demonios salvajes y enojado, las formas del esqueleto y otras imágenes todavía más aterradora. El piso era de piedra. En el centro estaba el pozo circular el único pozo en el calabozo.
Vi todo esto con gran dificultad, porque mi situación había cambiado mientras estaba durmiendo. Ahora yacía de espaldas en una cama de madera de baja. Yo estaba firmemente amarrada con una correa de cuero de largo. Yo sólo podía mover la cabeza y el brazo izquierdo desde el codo hacia abajo. Por lo menos que podía comer solo de una placa en el suelo, pero el jarro de agua se había ido, y yo era una sed terrible de nuevo. Este era el objetivo de mis torturadores ", ya que la comida en el plato era muy picante.
Miré hacia el techo treinta o cuarenta pies por encima de mí. Al igual que las paredes, que era de metal. Una figura pintada en uno de los paneles me llamó la atención. Fue la figura del Tiempo, sosteniendo lo que parecía un enorme péndulo, como los que vemos en los relojes antiguos. Algo extraño en la figura me llamó la atención. Mientras miraba, me pareció ver el péndulo moverse un poco. Segundos más tarde, se trasladó de nuevo muy lentamente. Observé durante unos minutos, la mitad en el miedo y la mitad de asombro. Luego, cansado por el esfuerzo, miré alrededor de mi celda.
Un ligero ruido de pronto me llamó la atención, y vi varias enormes ratas correr por el suelo. Las ratas vino del cielo! Mientras observaba, se arrastraron fuera de uno, dos, pronto hubo demasiados para contarlos. Todos vinieron hacia mí, tentado por el olor de la carne en el plato a mi lado. Tomó todas mis fuerzas para mantenerlos alejados.
Tal vez media hora pasó antes de que me miró de nuevo. Lo que vi confusa y me sorprendió. El movimiento del péndulo había aumentado casi un metro. Se movía mucho más rápido ahora. Se había bajado un poco, y pude ver que el borde del péndulo era un semicírculo de acero sobre un pie de largo. Incluso desde esta distancia podía ver que era con aristas afiladas como una navaja de afeitar. Colgando de un poste de hierro unido a un grupo por encima de mí. Se veía muy, muy pesado. Más alarmante aún, pude oír silbidos, ya que giró por el aire.
Ya no tenía ninguna duda acerca de la muerte de mi torturadores planeado para mí. Los agentes de la Inquisición sabía que había escapado a los horrores de la fosa. Ahora una muerte diferente me esperaba que el péndulo cada vez más cerca.
No necesito describir la agonía de esas largas horas, terrible después me di cuenta de lo que el péndulo se podía hacer. Conté las oscilaciones del péndulo de la derecha .... a la izquierda .... a derecha, ya que se acercó poco a poco. Se sentía como si días habían pasado. Empecé a sentir el aire en movimiento, el péndulo osciló cerca de mí. El olor de acero llegó a mí. Recé una y otra vez que la muerte vendría rápidamente para detener mi agonía. Me convertí en frenética. Traté de forzar mi cuerpo hacia el filo de la navaja. Yo haría cualquier cosa para poner fin a esta miseria. Entonces, de repente me convertí en calma y tranquilo. Me sonrió a la muerte brillante, como un niño que estaba mirando un juguete brillante.
Creo que fue entonces eso me dejó completamente. Yo necesitaba comida. Yo anhelaba cualquier alimento, y me comí una pequeña porción de la carne que queda por las ratas. He sufrido agonías aún mayor de la terrible sed que siguieron, pero uno me comí la carne, una idea a medio formar entró en mi mente .... una idea que me dio esperanza. ¿Qué derecho tenía yo a la esperanza? La idea era casi concreta cuando desapareció.



Sabía que la oscilación del péndulo se produjo en ángulo recto con mi cuerpo y que la media luna fue diseñada para cortar a través de mi corazón. En primer lugar, tendría que cortar a través de mi túnica. Empecé
pensar que yo podía dejar que el péndulo no. Me imaginaba el sonido del péndulo sería como cortar la tela. Pensé y pensé hasta que casi creía que iba a suceder. Me reí y lloré por turnos mientras me movía de la esperanza ciega a la desesperación. El péndulo fue muy cercano a mí, y yo luchaba con furia para liberar el brazo izquierdo. Si pudiera romper la correa de la celebración de mi brazo, que podría detener el péndulo. Pero en el fondo a mí mismo, yo sabía que sería más fácil para detener una avalancha de este intercambio de parejas, de acero mortal.
Me abrió la boca y luchado en cada oscilación. Mis ojos siguieron la hoja, ya que se iba, luego los cierra mientras descendía. La muerte sería un alivio, pero la esperanza me hizo encogerse de la hoja, lo que todos mis nervios a vibrar. triunfos de la Esperanza durante la tortura y le susurra a los condenados a muerte, incluso en los calabozos de la Inquisición.
Yo sabía que se balancea diez o doce traería el acero en contacto con mi túnica. Con esta observación, de repente sentí la calma total de completa desesperación. Por primera vez en muchas horas, o tal vez días, pensé. Yo había estado absessed con la idea de que la hoja debe cortar mi túnica, pero ahora me di cuenta de que la correa de atar me down fue dimply que-una correa larga. El primer golpe de la hoja a través de cualquier parte de la banda me libre! Me gustaría ser capaz de relajarse con la mano izquierda y escapar de la cuchilla del péndulo. Pero yo sabía que el acero es demasiado estrecha y la más pequeña lucha significaría la muerte. Es triste encontrar a mi débil esperanza última frustrado, levanté la cabeza y miró a mi cuerpo. Yo debería haber sabido. La cinta fue herida a mi alrededor en todas direcciones excepto en el trayecto de la hoja.
Tan pronto como se me cayó mi cabeza sobre su almohada de madera, mi mente brilló a mi idea incompleta ... la idea de que me había dado esperanza. La idea se concreta ahora, pensaba que era débil y sólo un medio sano. Con la energía nerviosa de la desesperación, traté de su ejecución.
Usted debe entender que por muchas horas el área alrededor de mí había sido cubierto de ratas. Eran salvajes, audaces y con hambre. Cientos de ojos rojos miraba y esperó a que yo deje de moverse.
"¿Qué alimentos", pensé, "han estado acostumbrados en el hoyo?" Tal vez era mejor que no me trate de imaginar la respuesta a esa pregunta.
Se había comido casi toda la carne en el plato junto a mí, a pesar de mis esfuerzos para detenerlos. Había caído en un movimiento automático saludando con la mano izquierda sobre la placa. En su afán, los bichos con frecuencia poco en mis dedos. Ahora me empezó a frotar la correa siempre que podía llegar a ella con el jugo de grasa que queda en el plato. Cuando terminé, levanté la mano desde el suelo y quedó inmóvil. De repente, todo el movimiento cesó. Al principio, los animales hambrientos estaban confundidos y aterrados. Un momento después, uno o dos levantó de un salto sobre la cama de madera. Esto pareció ser una señal de cientos de ratas saltaron sobre mí. Me quedé quieto. Evitar el péndulo, que pasó por encima de mi garganta, sus labios fríos en busca de mi propia. Se pasó por encima de mí y comenzó a morder en la correa. Yo casi no podía respirar por el peso de tantas ratas. La repugnancia que me ahogaba, y pensé que me iba a desmayar otra vez o comenzar a luchar y gritar. Sin embargo, un minuto más, y sentí que esta tortura iba a terminar. De repente, pude ver la cinta comenzará a moverse. Yo sabía que se había comido a través de él. Paciencia, que era lo que necesitaba. Tuve que vivir con esto por sólo unos segundos más. Con mayor determinación, que se quedó inmóvil.
No me equivoqué. Yo no había sufrido en vano. Yo era libre. La correa se rompió y ya no me sujetaba. Pero el péndulo pulsa sobre mi pecho. Ya había cortado mi manto. Dos veces se abrió, y un agudo sentido del dolor atravesó mis nervios. En el momento de escapar había llegado.
En una onda de mi mano, las ratas huyeron. Con una constante, movimiento lento, de lado, me bajó de la cama y fuera del alcance de la hoja de muerte. Por el momento, al menos, yo era gratis .... Pero en las manos de la Inquisición! Yo había hecho más que movido de la cama de madera, cuando el movimiento del péndulo se detuvo. Vi que ir rápidamente hacia arriba, tirado por una fuerza invisible, anuncio, desapareció en el techo. Esta fue una lección que tomé a pecho. Estaban viendo cada movimiento que hace. Gratis! ¿Qué tan ciega estaba! Me había escapado sólo la muerte de una forma de ser sometido a un nuevo y diferente tortura.
Con ese pensamiento, me miró nerviosamente alrededor de las paredes de mi celda. Algo había cambiado. No sabía exactamente qué era, pero algo era diferente. Desesperadamente Miré a mi alrededor y por encima de mí. Entonces vi. Las cifras en las paredes eran ahora más clara y sus colores eran más vivos. los ojos del demonio me miró de las paredes, brillando con el resplandor rojo del fuego. Eran tan real que no podía obligarme a ignorarlos. El olor, también, era muy, muy real. Era el olor de hierro al rojo, El rojo de las figuras en las paredes se hizo más y más profundo. Yo respiraba con dificultad .... no había duda acerca de mi objetivo torturadores nuevo. Temblando, me encogí de metal brillante de las paredes hacia el centro de la celda, hacia la frescura de la fosa. Miré hacia abajo en el agujero, y en la débil luz del techo, vi lo que estaba por debajo. Por un momento, mi espíritu se negó a entender. Pero el significado se abrió camino en mi cerebro, en mi alma .... y qué horror! Ahora sabía .... Pero el horror .... Ningún horror, pero esto! Con un grito de desesperación, me encontré desde el borde de mi cara entre las manos, llorando desesperadamente y amargura.
El calor aumentó rápidamente, y de nuevo me miró. Temblaba como si tuviera una fiebre violenta, hubo otro cambio en la célula. La forma había cambiado de nuevo, las paredes se había movido hacia el centro. La plaza se había convertido en un rectángulo. Me escapó dos veces y ahora mis verdugos estaban impacientes. Las paredes se trasladó con un sonido grave y retumbante. Quería celebrar a mí y encontrar la paz. Yo ya no podía más horror. "La muerte!" Exclamé. "Cualquier muerte, sino la de la fosa!" ¡Necio! Yo debería haber sabido que me quería vigor en el hoyo. ¿Podría resistir el calor de las paredes? ¿Puedo detener su empujándome hacia el borde y hacia abajo en el agujero? La sala se convirtió en más y más estrecha. Las paredes me presiona hacia el centro. No había nada, nada que pudiera hacer para detenerlos.
Por último, sólo una pulgada permaneció en el suelo de la prisión. Mi ardiente, el sufrimiento del cuerpo se retorcía contra las paredes al rojo vivo. Luché no más, pero la agonía de mi alma se escapó en un fuerte, largo grito, final de la desesperación. Me sentí perder el equilibrio en el borde de la fosa. Cierro los ojos.
Hubo voces!
Hubo una fuerte explosión de muchas trompetas!
Hubo un ruido violento como el de mil truenos!
Las paredes de fuego retrocedió y brazo extendido me llamó la mano como caí hacia el abismo. Era el brazo del general Lasalle.
El ejército francés había entrado en Toledo! La Inquisición estaba en manos de sus enemigos!

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