LOS INFORMATIVOS EN TELEVISIÓN: ¿DEBILIDAD O MANIPULACION?

LOS INFORMATIVOS EN TELEVISIÓN:

 ¿DEBILIDAD O MANIPULACION?

Comentario

Ningún medio de comunicación ha sido capaz de mostrar la realidad en la que vivimos en su totalidad. En su mayoría estos nos muestran la realidad que un grupo específico de personas quiere que conozcamos o sepamos, siendo las imágenes uno de los papeles fundamentales a la hora de mostrarnos esta información, ya que, dentro de la sociedad, una imagen vale más que mil palabras, ya que se puede escuchar, leer, sentir, u olfatear algo y no tiene el mismo efecto o veracidad que lo que se ve o se cree ver.

La televisión se ha convertido en un objeto indispensable en la sociedad a la hora de obtener información, ya que, se cree ser el medio más confiable debido a las imágenes en movimiento que ahí podemos ver asumiéndola como verdadera. Sin embargo, esta realidad mostrada no es solo una parte de la total, es también solo una construcción de ella. La imagen tiene esa capacidad de causar una emoción en el espectador que cree que ver es comprender. Permitiendo que grandes cadenas se centren en lo sensacional, impactante, novedoso, y así llamar su atención.

Otro de los aspectos importantes de la televisión es la limitación de tiempo y el dinero, que hace que estos tengan que escoger las noticias que más impacto tenga en el televidente y sean económicamente hablando fáciles de cubrir, sin importar la exageración o des virtualización de los datos reales que se tenga que realizar, con tal de mantenerlos enganchados durante toda la programación, no interesa si las noticias son las más importantes o si la explicación es suficiente para que el telespectador pueda entenderlo. Lo que se hace es una reducción de alternativas que sirve para manipular o simplificar la realidad y de esta forma se produce además un descenso en la calidad de la información.

También existe la manipulación intencionada para la construcción de la realidad, cuando la misión de los medios es defender los intereses privados, de un pequeño grupo anteponiéndolos sobre los intereses de la verdad. Estos grandes grupos controlan lo que se ve, oye o lee. Por ejemplo, la información que se presenta en América Latina no será la misma que se presente en España, a pesar de ser una misma noticia, estos tendrán diferentes puntos de vista o intereses, por lo que esta información deberá estar inclinada así la misma, aunque se aleje de la verdad. [pic 1]

Muchas personas consumidoras de la televisión creen que esta les ayuda a relajarse y olvidar su pensamiento mientras la ven, sin embargo, la mente está inactiva únicamente en el sentido de no generar sus propios pensamientos, absorbiendo continuamente los pensamientos y las imágenes provenientes de la televisión. Esto induce una especie de estado de trance y mayor susceptibilidad, parecido al de la hipnosis. Convirtiéndose en una estrategia ideal para manipular “la opinión pública”, como lo saben bien los políticos, los grupos de interés y los anunciantes y pagan millones de dólares para sorprendernos indefensos en ese estado de receptividad. Buscan reemplazar nuestros pensamientos por los de ellos, y por lo general lo logran, comprendiendo menos su propia existencia y su propio deseo.

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