La Educacion Prohibida

La Educación Prohibida

La película “La Educación Prohibida” es el resultado de una investigación periodística que incluyó más de 90 entrevistas a profesionales del ámbito de la educación y representantes de diferentes proyectos educativos y especialistas en el desarrollo humano de varios países de Iberoamérica. El documental intenta dar respuestas a las preguntas: ¿Las estructuras de la escuela han quedado obsoletas? ¿A qué anacronismos se enfrenta la educación? ¿El sistema escolar tradicional permite desarrollar plenamente las potencialidades humanas? ¿Se adapta la escuela a las necesidades de la sociedad del siglo XXI? ¿Educamos para enfrentar la sociedad o para transformarla? ¿Se pueden cambiar las estructuras del modelo educativo de la escuela tradicional? ¿Estamos preparados/as para ese cambio de paradigma?

Según explican los profesionales entrevistados que aparecen en el documental, los sistemas educativos no han cambiado tan rápidamente como el resto de la sociedad y en éstos continúan primando la medición de los objetivos por encima de la singularidad de los sujetos, fomentando así contravalores como la competitividad, el individualismo, la discriminación, la violencia emocional o el materialismo. Las escuelas continúan funcionando igual como lo hacían en la era de la Revolución Industrial, cuando fueron literalmente diseñadas para proveer trabajadores calificados para satisfacer la demanda de la economía industrial. El paradigma educativo predominante en las escuelas es que el sistema aún continúa centrándose en lo que aprenden los alumnos, es decir en el contenido y no en la forma. Las escuelas del siglo XXI continúan siendo centros de instrucción y no de aprendizaje.

Una de las grandes carencias del sistema escolar tradicional mostradas en la película es la desatención de la educación emocional por parte de los docentes. Si bien el documental no es una crítica expresa al profesorado (ya que las condiciones y los medios con los que cuentan probablemente no sean los más idóneos), sí resulta interesante ver como la formación recibida por los(as) docentes, muchas veces obvia la importancia de la educación emocional o solamente aborda este aspecto de manera superficial. Las personas entrevistadas comentan cómo los currículos académicos se han desvinculado de la realidad y que la escuela se ha convertido en un lugar de estructura vertical y de medición de estándares.

En la película se aboga por una educación y formación integral. Se rechaza la educación tradicional caracterizada por ser obsoleta y anacrónica, que no considera la naturaleza del aprendizaje, la libertad de elegir y no da importancia al amor y a los vínculos humanos en el desarrollo individual y colectivo. El amor y el reconocimiento son básicos para que los alumnos crezcan como personas autónomas, responsables y equilibradas, que reflexionen y se hagan cargo de sus acciones

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