La Privatización

La implantación de la política de privatización representa un deterioro en las condiciones de vida del pueblo y de los trabajadores. El Permitir que nos gobierne el afán de lucro de las empresas privadas, el costo de los servicios esenciales aumenta. La lucha contra la privatización, debemos verla como una lucha por defender la calidad de vida del pueblo trabajador.

La privatización representa para el movimiento sindical un retroceso en las conquistas logradas a través de largos años de lucha y sacrificio. Al privatizar una corporación pública, la empresa privada no tiene la obligación de respetar los convenios colectivos vigentes por lo que la seguridad de empleo, los beneficios marginales y todas los demás beneficios pueden estar en peligro. La lucha sindical se ve obligada a desarrollarse en un terreno que favorece a los patronos, ya que está regida por la Ley Taft-Hartley.

La lucha contra la privatización no significa que debamos pasar por alto la escasez o mala calidad de los servicios públicos existentes, todo lo contrario debemos exigir servicios de calidad para toda la población.

Ante la proliferación de la privatización podemos visualizar varios errores, como por ejemplo que la privatización solo es la venta de las propiedades del gobierno, existen varias formas de privatización, como por ejemplo el traspaso de las actividades y funciones del gobierno a las empresas privadas. Otro error es que el privatizar solo afecta a las corporaciones públicas, que cobran por sus servicios, la realidad es otra, ya que se ha recomendado privatizar agencias como lo son el Departamento de Educación, Departamento de Salud, el Departamento de la Familia entre otros.

El error más grande que cometemos los trabajadores es ver la lucha contra la privatización como un problema exclusivamente sindical, no podemos enfocar la lucha contra la privatización desde una perspectiva sindicalista. Esto no es un asunto que se pueda resolver en una mesa de negociaciones para acordar un convenio colectivo. Se debe tener mucho cuidado al momento de negociar la ya que como hemos visto se puede anteponer los intereses particulares del sindicato a los intereses generales de los trabajadores, como lo que sucedió en la huelga de la telefónica. La privatización trasciende al movimiento sindical ya que afecta los intereses del pueblo trabajador.

Cuando los principales partidos y la empresa privada promueven la privatización, la clase obrera del país se enfrenta a grandes retos y luchas para evitar que la calidad de vida del pueblo trabajador continúe deteriorándose.

La lucha sindical debe estar en manos del pueblo trabajador y de líderes sindicales comprometidos con los ideales de los trabajadores. Nunca debemos pensar que la lucha contra la privatización es imposible. Este modo de pensar sólo promueve la impotencia, nos conduce al inmovilismo y a la rendición.

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