La gran Certificación de la muerte en la antigüedad
Enviado por aleiram91 • 23 de Junio de 2017 • Trabajo • 3.080 Palabras (13 Páginas) • 164 Visitas
MUERTE CEREBRAL IRREVERSIBLE
I.- ANTECEDENTES
- Certificación de la muerte en la antigüedad
El concepto de muerte ha cambiado a través del tiempo; se sabe que, en la cultura griega, que data del siglo IV antes de cristo, nace el concepto de muerte natural que se mantuvo en la historia llegando hasta nuestros días.
La muerte natural se consideraba aquella en la que poco a poco van muriendo las diferentes funciones del organismo y por último lo hace el corazón, de ahí que se lo haya llamado ultimun moriens. La muerte cardiopulmonar se consideraba muerte natural y es el concepto más arraigado en nuestra cultura y persistió hasta nuestros días con algunos matices como, por ejemplo, en el siglo XVIII, dada la imprecisión en el diagnóstico, surgió el temor de ser enterrado vivo, por lo cual se estableció un tiempo precautorio de 24 horas antes del entierro que sigue vigente en algunas legislaciones Durante la segunda mitad del siglo XX, con el auge de las terapias intensivas y el uso de medidas de soporte vital, vuelve a entrar en crisis el concepto tradicional de muerte. Comienzan las primeras descripciones de lo que luego se llamaría muerte cerebral. En 1959 se examina por primera vez la necesidad de establecer criterios que minuciosa e inequívocamente determinen que el cerebro de una paciente está muerto o a punto de morir sin que importen las medidas terapéuticas que se tomen. En 1968 el comité ad hoc de la Escuela de Medicina de Harvard formado por médicos, bioéticos y teólogos, publican los primeros criterios diagnósticos de muerte encefálica bajo criterios neurológicos y la equiparan inequívocamente con la muerte. En el mismo año, la Asamblea Médica Mundial (World Medical Assembly) reunida en Australia aprueban la Declaración de Sídney sobre la Muerte Humana, en la que no se nombra explícitamente a la muerte encefálica, pero se reconoce una nueva formulación de la muerte siguiendo criterios neurológicos, aceptando desde el punto de vista ético que una vez realizado el diagnóstico, se pueden retirar todas las medidas de soporte o realizar la extracción de órganos y tejidos para trasplante.
- Los signos clínicos de la muerte son universales:
La muerte cerebral se define como el final irreversible de las funciones de toda la estructura neurológica intracraneal, tanto en el tronco cerebral como el cerebro. Esta situación clínica aparece cuando la presión intracraneal supera la presión arterial sistólica del paciente, dando lugar a la parada circulatoria cerebral. Las causas más frecuentes son la hemorragia cerebral y el trauma craneoencefálico. El diagnóstico clínico debe realizarse por médicos y médicas con experiencia en el tratamiento neurocrítico del o la paciente. El diagnóstico se basa en un examen clínico sistemático, completo y extremadamente riguroso que constata que es un coma no reactivo, que hay ausencia de reflejos del tronco cerebral y de respiración espontánea. Luego de haber sido reconocida por la comunidad científica como la muerte de la persona, varios países incorporaron este concepto en sus legislaciones para de esta manera, disponer de un instrumento de reconocimiento jurídico de su diagnóstico. Debido a su complejidad, la certificación de éste diagnóstico merece la constante formación de profesionales de la salud, capaces de comprender el dolor intenso de las personas que pierden un ser querido, construyendo lazos de confianza y apoyando a la familia en su duelo. Dado el alto nivel de responsabilidad médico legal implícito en el diagnóstico de la muerte encefálica, éste deberá realizarse siempre por un grupo de profesionales altamente capacitados y con amplia trayectoria de actividad asistencial hospitalaria y académica en este campo. De esta manera, disponer de instrumentos normativos que contribuyan al desempeño adecuado y la formación permanente de los y las médicos/as, es una necesidad ineludible, una herramienta fundamental y una obligación ética para los y las profesionales que deben ejercer con rigor los cometidos relacionados con el cuidado de pacientes en estas situaciones críticas.
- El Rol del Corazón en la Muerte
El corazón es un músculo que funciona como una bomba haciendo que la sangre circule continuamente por nuestro sistema circulatorio que forman arterias y venas. La sangre lleva a todas nuestras células el oxígeno y los nutrientes que necesitan para vivir. Sin su funcionamiento los músculos y órganos del cuerpo empezarían a morir hasta ser imposible la subsistencia del individuo.
II.- LA FUNCION CEREBRAL
Podríamos decir que la función del cerebro, como parte del Sistema Nervioso Central (SNC), es la de regular la mayoría de funciones del cuerpo y la mente. Esto incluye desde funciones vitales como respirar o el ritmo cardíaco, pasando por funciones más básicas como el dormir, tener hambre o el instinto sexual, hasta las funciones superiores como pensar, recordar o hablar.
En las partes del cerebro se analiza cómo las funciones vitales más básicas están medidas por las estructuras cerebrales más antiguas, es decir, aquellas situadas en el rombencéfalo (bulbo raquídeo, protuberancia, cerebelo) y el mesencéfalo. En cambio las funciones cerebrales superiores como el razonamiento la memoria, la atención están controladas por los hemisferios y lóbulos cerebrales que forman parte del córtex.
- LA DESTRUCCIÓN DEL CEREBRO ES IRREVERSIBLE.
El tronco del encéfalo es la parte más baja del cerebro que está conectada a la médula espinal (una columna de tejido nervioso ubicada en la columna vertebral). Esta parte del cerebro es responsable de la mayoría de las funciones automáticas del cuerpo que son esenciales para la vida:
- Respiración
- Palpitación
- presión sanguínea
- deglución.
El tronco del encéfalo también realiza el intercambio de información entre el cerebro y el resto del cuerpo, así que es fundamental para las funciones de conciencia, conocimiento y movimiento. No hay posibilidad de conciencia una vez que el tronco encefálico se daña permanentemente y esto se suma a la incapacidad de respirar o mantener las funciones corporales, lo que constituye la muerte del individuo.
Anteriormente, confirmar la muerte era algo directo: el corazón dejaba de latir y una persona ya no respiraba. Pero ahora la confirmación de muerte puede ser más compleja, ya que con un ventilador médico se puede mantener al corazón oxigenado y latiendo artificialmente después de que el tronco del encéfalo deja de funcionar permanentemente.
...