La parábola del trigo y la cizaña
Enviado por moran123 • 19 de Noviembre de 2014 • Resumen • 3.992 Palabras (16 Páginas) • 360 Visitas
LA PARÁBOLA DEL
TRIGO Y LA CIZAÑA
Introducción:
1. Se podría decir que Mateo c. 13 es el capítulo de
las parábolas.
2. Es más, se podría decir que es el capítulo de las
parábolas del reino.
3. Les invito a que en esta ocasión nos dediquemos
a meditar en la parábola del trigo y la cizaña.
4. Esta parábola se lee en los vv 24-30 que les invito a
buscar y leer ahora mismo.
5. Es una de las pocas parábolas que el Señor
explicó: Lean los vv 36-43.
6. Esta parábola es muy interesante y puesto que ya
vimos que el Maestro la explicó no tiene grandes
complicaciones.
7. Aun así, es necesario verla con detenimiento porque
ya ha sucedido que más de uno ha sacado
conclusiones equivocadas en cuanto a su enseñanza.
I. Comencemos fijándonos en los elementos principales
de la parábola
1. Allí está un hombre dueño de un campo, v 24
1) Su campo es propio para la siembra, v. 24
2) El dueño del campo lo siembra con buena
semilla, v 24
3) Se trata de semilla de trigo, v 29
2. La historia tiene un villano, v 25
1) Se trata de un personaje malvado:
— Evidentemente observa de lejos la siembra y se
disgusta.
— Tan sólo de pensar que la siembra de su enemigo
resulte exitosa lo llena de enojo.
— Y se pone a maquinar un plan para echar a perder
la siembra de su enemigo.
2) el enemigo no sólo es malvado: Es inteligente.
— El plan que elaboró para arruinar la siembra
nos muestra su sagacidad
3) Pero además el villano es trabajador
1.- Consigue semilla de yerba mala,
específicamente cizaña
2.- El sabe que nadie debe verlo hacer lo que
tiene en mente.
— Por eso espera la noche
3.- Y cuando llega la oscuridad se dirige al campo
sigilosamente con su carga de semilla
4.- Mientras los habitantes de la comarca
duermen el malvado se dedica a sembrar su
mala semilla.
5.- Bien podemos imaginarnos que comenzaban a
disiparse las tinieblas de la noche en el oriente
cuando el hombre se alejó satisfecho de
su mala obra.
3. A su debido tiempo brotan el trigo y la cizaña, v 26
1) Los siervos del dueño del campo están
perplejos, v 27
2) El dueño del campo pronto deduce lo que pasó, v 28
1.- El sabe que su semilla era buena, no podía
estar mezclada con semilla mala
2.- Entonces es claro que alguien más sembró la
semilla de cizaña
3.- Tiene que tratarse de un enemigo.
3) Los siervos proponen una solución:
— Arrancar la cizaña que apenas está
comenzando a crecer, v 28
4) Pero el dueño desecha la solución propuesta, v 29
— Como la cizaña está entremezclada con el trigo
es imposible arrancarla sin dañar el
trigo tierno y en crecimiento
5) El dueño tiene una solución distinta y mejor , v 30
1.- Esperemos hasta el tiempo de la siega para
separar la cizaña del trigo.
2.- Ya entonces sólo se tendrá que apartar la
cizaña y quemarla.
3.- Habiendo así quedado solamente el trigo
maduro, se le llevará al granero del dueño.
II. Ayudados por la explicación del Maestro veamos la
enseñanza de la parábola.
1. El que siembra la buena semilla es el Hijo del
Hombre, es decir Jesucristo.
— La obra salvadora de Cristo, produce la
existencia de cristianos en el mundo
2. El enemigo es el diablo, v 39
1) Que el diablo es el enemigo de Dios es una
enseñanza clara de la Biblia.
2) Uno de los nombres más conocidos del
diablo —Satanás— significa precisamente
eso: enemigo, adversario
3. El campo es el mundo, v 38.
1) El campo es el mundo, no la iglesia.
— Volveremos a esto después
2) Cuando uno conecta el v. 38 con el 41, comprende
que en esta parábola el reino es el mundo.
— Esto merece que nos detengamos:
1.- Muchos pasajes de la Escritura nos enseñan
que quien tiene en sus manos la marcha de
todo en el mundo es Dios.
2.- El es Señor del cielo y de la tierra.
3.- “¿No se venden dos pajarillos por un
cuarto? Y sin embargo, ni uno de ellos
caerá a tierra sin permitirlo vuestro
Padre”, Mt 10.29, Américas.
4.- Aun Satanás necesita el permiso de Dios
para actuar.
— Los casos de Job y de Pedro zarandeado
muestran esta verdad.
5.- Si las cosas en el mundo no son ideales es,
entre otras cosas, porque Dios no destruye
el libre albedrío de los hombres, muchos
de los cuales se dedican al mal.
6.- Nada deshace la realidad de que Dios reina,
incluyendo aquello pasa en el mundo
que no comprendemos.
3) “El campo es el mundo”, dice la parábola.
— La parábola no trata de lo que pasa en
la iglesia, sino de lo que pasa en el mundo.
...