La planeación y la evaluación como parte de mi práctica docente

La planeación y la evaluación como parte de mi práctica docente, en contraste con los teóricos revisados en clase

La docencia es una tarea llena de dificultades, así como de satisfacciones y elaborar una planificación y una forma de evaluar los aprendizajes del alumno es, creo yo, la principal dificultad para el profesor.

Este documento pretende comparar lo ocurrido durante mi práctica, los resultados de mi secuencia didáctica y las estrategias utilizadas, además de como resultaron las rúbricas que elaboré para la evaluación del cumplimiento de los aprendizajes esperados. La jornada que comprende la semana del 09 de marzo al 13 del mismo mes del año 2015, será contrastada con los teóricos revisados durante las clases de la asignatura Planeación de la enseñanza y evaluación del aprendizaje con la intención de llegar a una conclusión de que estrategias de las que proponen los autores puedo seguir utilizando, cuales otra puedo implementar y cuales otras no fueron pertinentes.

La planificación

La planificación es, a mi parecer, la herramienta más importante y útil que tiene el docente. Para esta práctica fue algo complicado elaborar mi planificación, tuve que modificarla varias veces antes de quedar satisfecho con las actividades y los tiempos y una vez más modificarla durante la marcha, pues en varias ocasiones los alumnos no respondieron a las actividades que yo tenía previstas, pues como mencionan Gvirtz y Palamidessi “Lo que importa es la acción, no la planificación misma” (1998), sin embargo, no se debe quitar mérito al bosquejo que creamos, pues este lleva plasmados los objetivos, propósitos y aprendizajes esperados que, independientemente de las actividades, son los que debemos hacer cumplir para el beneficio de los alumnos.  En el caso de mi práctica, como brevemente mencioné antes, tuve que modificar mi planificación tres veces para que las actividades se ajustaran a los aprendizajes esperados que marca el programa. En cuanto a las modificaciones que hice durante la práctica quise guiarme por una de las propuestas del autor César Coll,

“cuando el nivel de conocimiento previo pertinente para el nuevo contenido es escaso, los tratamientos educativos que dan lugar a mejores resultados son los que ofrecen una mayor ayuda a los alumnos (…) a menor nivel de conocimiento previo pertinente, mayor es la ayuda que necesita el alumno; e inversamente, a mayor nivel de conocimiento previo, menor es la necesidad de ayuda” (1992, p.117)

Sin embargo, cuando me encontré con diferentes niveles de comprensión, es decir, unos pocos muy altos y otros muchos poco pertinentes, no supe cómo proceder, lo que después hizo que algunas de mis actividades no pudieran cumplirse y las que se cumplieron carecieron de sentido para el logro de mis objetivos, por lo que uno de los aprendizajes que me llevo es que debo elaborar “planes de contingencia” no solamente para casos de alumnos muy avanzados o muy rezagados sino alguno que considere situaciones mixtas.

Los aprendizajes esperados

Los aprendizajes esperados son parte del programa de estudios que nos dice que es lo que el alumno debe aprender de cada tema para poder

Actividades y estrategias: El conocimiento previo

El conocimiento previo es fundamental para saber qué rumbo debe llevar nuestra práctica de acuerdo a las necesidades y actuales capacidades del alumno. Para mi práctica elaboré una actividad con la cual buscaba que los alumnos elaboraran un párrafo en el cual recomendaran su canción favorita y, de ese modo al revisarlos saber si ya eran capaces de pasar a un nivel más alto, es decir, enfocarme en guiarlos para usar de mejor manera los recursos literarios o bien, comenzar la enseñanza desde lo más básico; la instrucción para dicho trabajo fue la siguiente: “Van a recomendarme su canción favorita, me dirás ¿Qué les gusta de ella?, ¿Por qué les gusta? Y ¿De qué trata la canción? Eso lo van a escribir en su cuaderno, en una hoja que puedan arrancar para llevármela y revisarla”. Los resultados que obtuve no fueron los que yo esperaba, si bien un par de alumnos me entregaron ejercicios espléndidos, la gran mayoría sólo escribió las preguntas y las contestó, no desarrolló un texto en prosa como yo esperaba. Andy Hargreaves dice “Cuando son precisas, las convicciones preexistentes de los estudiantes sobre un tema facilitan el aprendizaje y proporcionan un punto de partida neutral para la enseñanza” (2000, p. 231) Concuerdo con la idea del autor dado que los alumnos que entregaron un trabajo apegado a lo que yo había planeado para tomar como punto de partida en la enseñanza me dieron una guía bastante buena de las fortalezas y debilidades que tenían para elaborar este tipo de ejercicios y fue más sencillo trabajar con ellos. Una de las situaciones que provocó que el ejercicio aplicado no fuera pertinente para el rescate de saberes previos fue la manera en que di las indicaciones, pues al analizar la forma en que fueron dichas pude percatarme de que no fui muy claro, situación que será tomada en cuenta para próximas prácticas y que sin duda me ayudarán a tener resultados más exitosos.

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