La práctica de crianza. La cultura el contexto familiar y los roles de género

La práctica de crianza se refiere a la forma o en los métodos que utilizan los familiares o cuidadores de los niños para ir orientándolos en su diario vivir de modo en el que puedan ir desarrollando las habilidades que necesitan para su diario vivir y se adapten a las diferentes costumbres o creencias en el que se encuentran los padres o cuidadores adultos, además también, esto les permitirá ir creando lazos de afecto hacia quienes lo rodean desde muy temprana edad.

 Autor ( Sandra Varela, Tania Chinchilla, Vanessa Murad)

http://www.redalyc.org/pdf/853/85339658014.pdf

La manera en como practicamos la crianza de los niños ha ido cambiando al pasar el tiempo pero así como en tiempos pasados y en la actualidad lo que buscamos es el bienestar de los niños y aunque muchas veces nos cuestionamos la forma de cuidado en que si lo estamos haciendo bien o no, tenemos que estar seguros de que nadie tiene una respuesta certera pero con el avance tecnológico que tenemos podemos ver que los investigadores están trabajando mucho más en el desarrollo del cerebro de los niños y así podremos conocer un poco más a fondo de lo que nuestros niños necesitan o podemos conocerlos más desde las primeras semanas de vida.

AutorFederico Argento)

https://buenavibra.es/movida-sana/psicologia/las-practicas-de-crianza-que-influyen-en-el-desarrollo-del-cerebro-de-los-chicos/

La cultura el contexto familiar y los roles de género

Para todos los niños en especial para aquellos que se encuentran en un rango de edad de hasta los seis años, los familiares que están junto con ellos son las primeras personas que están en su mundo social ya que con ellos inicia su primera socialización dentro de este grupo simbólicamente primaria que es compartida y que ellos  comparten e influyen en el estilo de vida que llevan ya sea en lo social, político económico entre otros, de ahí viene la cultura.

Por otra parte, el dar un cuidado directo con la mejor actitud, los mejores cuidados y con su respectiva atención por parte de los padres en los primeros años de vida de los niños es muy importante, ya que está muy relacionado con el tipo de educación que reciban y los valores que ellos perciban, ya que con la presencia de los padres pueden transmitir los valores éticos a través de su propio ejemplo y pueden conocer y ayudarles a resolver diferentes dudas, necesidades sean estas emocionales o físicas de los niños, en el que estos serán un elemento clave para las madres al momento de una charla con el hijo.

Es así, que cada cultura se encarga de tener una relación con las respectivas reglas y normas entre padres e hijos pero también  es más como ellos reaccionan frente a la conducta y su forma natural de ser.

Y así como hay familias que demuestran un amor, protección y están durante el proceso de aprendizaje del niño, en otro entorno familiar se puede encontrar todo lo opuesto a esto en el que únicamente hay más distancia de los padres y lo que provoca tener sustitutos de padres quien pueda ayudar a los niños en reemplazo de ellos.

Autor ( Sandra Varela, Tania Chinchilla, Vanessa Murad)

http://www.redalyc.org/pdf/853/85339658014.pdf

Depresión parental y conductas parentales

Según las diferentes investigaciones que se ha ido realizando se puede ver que existe un vínculo entre las actuales depresiones maternales y aquellas conductas negativos que han tenido los padres con ellos, dejando así experiencias que son realmente depresivas que va afectando en el nuevo hogar que ellos van formando y que estos actos pueden provocar mucho más conflictos e inconvenientes con los hijos; entre ellos está control, restricción en todas aquellas actividades que quiera realizar y hasta puede existir rechazo.

El hecho de que el padre o la madre del niño haya tenido problemas depresivos durante su niñez hace que influya también en la conducta del otro padre, por lo que también tiene mucho que ver la situación que experimentan las madres después del parto, ya que si ellas sufren de depresión existe la probabilidad de que el padre no pueda transmitir con esa misma fuerza sus emociones y también dificultaría al momento de demostrarlo al hijo ya que no podría transmitir con facilidad aquellos sentimientos y/o emociones; y, si los padres estuvieren deprimidos las madres no podrían dar la atención debida y podrían dejar de lado el arte de contar historias. Además, hay que tomar en cuenta que existe mayor probabilidad de que las personas que han sufrido con problemas de depresión se casen con alguien que han tenido los mismos problemas haciendo comparaciones con quienes no han tenido este tipo de inconvenientes.

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