La salud física

La salud física consiste en el óptimo funcionamiento fisiológico del organismo preservando el bienestar del individuo; nos conserva aptos y dispuestos para la actividad física, mental y espiritual. Ayuda a desarrollar la naturalidad, espontaneidad y creatividad, ejercita la voluntad y la capacidad de rendimiento, además, favorece la autodisciplina, la superación y el equilibrio, los cuales contribuyen a fomentar la alegría, la satisfacción y el sentimiento de auto-relación. La salud mental estado de equilibrio entre una persona y su entorno socio-cultural, lo que garantiza su participación laboral, intelectual y de relaciones para alcanzar un bienestar y calidad de vida. y La salud social es una de los tres aspectos que forman parte del concepto salud. Una persona que tiene buena salud social es aquella capaz de disfrutar de una buena relación con el entorno que lo rodea, pero para ello también la sociedad debe proveer para esto. Una persona vive rodeada de amigos, familiares, compañeros de trabajo y vecinos, generar una buena relación con ellos es lo que hará que la persona pueda desarrollar una buena salud social.

Así también es importante que una persona mantenga un buen equilibrio con el entorno en el que vive, es por eso que este tiene que estar preparado para poder satisfacerle todas sus necesidades en cuanto a educación, cultura y trabajo.

Disfrutar una buena salud social nos permite desarrollarnos mejor como personas, liberando nuestro potencial interior y optimizando nuestro rendimiento en el trabajo y en los estudios.

Pero además, los beneficios también son para la comunidad donde esta persona vive ya que si todos disfrutan de una buena salud social, la comunidad se va fortaleciendo y va creciendo en cantidad.

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