Logística Inversa

Los recursos con los que se elaboran los envases y embalajes de cientos de productos que utilizamos a diario son limitados. Las empresas, sea cual sea su tamaño, tienen en la actualidad una responsabilidad con el medio ambiente, deben cumplir con la normativa en materia ambiental, quieren mejorar su imagen, reducir costes y aumentar sus beneficios. Por ello es necesario implantar sistemas de logística inversa. Tal y como hemos estudiado a lo largo de la asignatura existen diferentes modos y cada empresa elige el que más se adapte a sus características y necesidades.

Cuando las empresas implantan estos mecanismos de logística inversa mejoran su imagen a ojos de los consumidores. Esta mejora de la imagen produce beneficios inmediatos, a diferencia de llevar a cabo grandes campañas de marketing que suponen grandes costes y no aseguran esta mejora de la imagen en el corto plazo. Cualquier decisión que se tome en relación a la logística inversa produce beneficios a lo largo de la cadena de suministros a muy corto plazo. Estos beneficios a corto plazo permiten a las empresas explorar nuevos mercados. Además, con la implantación de la logística inversa las compañías se adaptan y cumplen las legislaciones existentes en los países con normativas ambientales más exigentes. A su vez, las diferentes asociaciones ecologistas y algunos segmentos de consumidores reducen su presión sobre las empresas que implantan mecanismos de logística inversa, ya que bien reaprovechan los materiales o modifican la gestión de la cadena de suministros para optimizar recursos existentes. En general, podemos decir que aumenta la confianza de los clientes en el momento de la decisión de compra; por lo que la implementación de logística inversa en las empresas tiene más ventajas que desventajas.

Entre las desventajas podemos destacar la incertidumbre en el momento de implantar la logística inversa y la necesidad de realizar estudios para calcular la capacidad de la futura cadena de logística inversa. La dificultad de implantar la logística en un principio conlleva una buena planificación, el rediseño de envases o embalajes, la contratación de personal especializado, realización de estudios o investigaciones, etc. La planificación, en un primer momento, puede suponer un coste elevado pero repercutirá en las ventajas citadas anteriormente. Dentro de la planificación la empresa debe decidir si realizará esta cadena por sí misma o externalizará algunas partes del proceso a empresas especializadas.

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