Los Liderazgos y tipos de liderazgo

El liderazgo.

Del vocablo ingles “leader” (guía, constructor), el líder es una persona que influye en las interacciones entre los miembros de un grupo; debe tener en cuenta sus características, su conducta, puesto que ocupa, como emerge como líder, como lo perciben y como afecta el grupo. Un líder debe tener ciertos rasgos: altos, atractivos, inteligentes, confían en sí mismos, psicológicamente sanos, dominantes, extrovertidos y sensitivos; establecen estrategias, motivan, crean una misión, construyen una cultura para obtener un determinado resultado.

La firma consultora Hay/McBer encuentra seis estilos de liderazgos, los cuales son: coercitivos, directivos, afiliativos, democráticos, marcapauta y “coaching”; los cuales son factores claves que influyen en el clima laboral de cualquier organización tomando en cuenta la flexibilidad, responsabilidad, nivel de standards, feedback, misión, valores y compromiso. Los líderes que afectan positivamente el clima de la organización tienen garantizado un tercio de los resultados totales.

Estilos de liderazgo.

Liderazgo coercitivo: Es el menos efectivo, toma decisiones tajantes y extremas desmotivando el aporte ideológico grupal en la realización de las tareas, orillándolos a hacer lo que se les dice, sin importar las recompensas. Funciona con empleados problemáticos.

Estilo directivo: Es el más efectivo de todos, motivador, visionario; establece parámetros de éxito y recompensas. Da libertad a las personas para innovar, experimentar y asumir riesgos calculados. Pero falla cuando hay una persona más hábil que el líder.

Estilo afiliativo: Hace prevalecer los valores y las emociones de las personas (contentos y en armonía), existe libertad y agradecimiento en la realización del trabajo (feed back), celebran los triunfos. Puede resultar contra producente, cuando se agradezca un trabajo mal realizado, puede incentivar la mediocridad.

Estilo democrático: Consenso donde los integrantes del grupo aportan posibles soluciones e ideas, incentiva la responsabilidad, flexibilidad, la moral y la sinceridad para con los objetivos. Puede generar debates interminables, con noción de liderazgo fallido despertando conflictos; no funciona con empleados incompetentes mal informados del tema en cuestión.

Estilo marcapauta: Debe emplearse con moderación dado que se establecen los tiempos y como se realizará el trabajo, existe una obsesión con hacer las cosas mejor y más rápido reemplazando el personal que no está rindiendo, destruyendo el clima laboral. Funciona excelentemente bien, cuando se trabaja con un equipo habilidoso y automotivados talentosos.

Estilo coaching: Es el estilo de liderazgo por excelencia, ayuda a identificar las debilidades y fortalezas del empleado para utilizarlas a favor en la construcción de un plan a largo plazo dejando en claro el rol y las responsabilidades, apostando el fracaso rápido, por los logros a largo plazo; el clima laboral y el desempeño son altamente positivos. Pero solo funciona con empleados que quieren ser entrenados.

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