Los principales géneros de drama: la tragedia y la comedia

Drama o teatro es una palabra que proviene del griego y significa “actuar” o “hacer”.

El teatro se originó en el año 534 a. C. en la antigua Grecia. Los griegos hacían estas representaciones teatrales en honor a Dionisio, dios del vino y la vegetación.

El género dramático se divide en dos modalidades de presentación; a través de la lectura, y la representación teatral.

Las representaciones consistían en cánticos, mostrando todas las hazañas de la deidad. Posteriormente en estos actos se representaban a las deidades y a los seres humanos, de esta manera, se tenía una mayor participación en diálogo y actuación, haciéndose cada vez menor la parte de los coros. El primer actor fue Testis. Para las representaciones teatrales se utilizaban veintiocho máscaras: seis para representar a las personas viejas, ocho para los jóvenes, tres para los servidores y once para los personajes femeninos. Las máscaras blancas significaban que eran para las mujeres, las oscuras para los hombres, y las de color amarillo eran para representar enfermedad.

Los principales géneros del teatro son la tragedia y la comedia. La tragedia siendo una representación dialogada que, por lo regular, termina en acontecimientos tristes o lamentables, como la enfermedad o muerte de algún personaje importante. Estructurada por actos, escenas y parlamentos, y compuesta por un director y un coro.

El mayor representante de la tragedia griega fue Sófocles, ya que en sus obras se escenificaban los sentimientos de una manera más real hasta alcanzar lo trágico. De su extensa producción literaria sólo se conservan siete obras completa, de las cuales, la más importante es Edipo Rey.

La comedia eran escenificaciones dialogadas, que se caracterizan por llevar a cabo situaciones de la vida cotidiana, creando un ambiente gracioso haciendo reír a las personas o al público, teniendo desenlaces felices que agradan a la gente. Su protagonista suele ser alguien común y corriente, causando gracia las situaciones por las que pasa, muy a diferencia de la tragedia, donde sus finales terminan en algo lastimoso.

Su mayor representante fue Aristófanes, el humor en sus obras se hizo muy popular en la antigüedad. Sus obras se caracterizaban por defender la paz a manera de burla, además de que algunas de sus obras están situadas en la sátira literaria. Se conservan once obras completas de Aristófanes.

Los elementos que articulan la comunicación dramática son el emisor, que es el autor, transmitiendo el mensaje mediante la obra hacia el público que la lee. También está el receptor que es el lector o espectador, que lee a través de los diálogos de los personajes de la obra. El contexto de producción es el ámbito social que tiene el autor al escribir, este nunca coincide con el del lector. Por último, el contexto de recepción es la manera en la que se interpreta la

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