MALA SUERTE EN EL AMOR.

MALA SUERTE EN EL AMOR.                                                                     Citlalli Santiago Zúñiga.

Creo yo, que todos hemos escuchado acerca del escritor más dulce y descriptivo en Latinoamérica,  el destacado poeta y novelista Mario Bendetti, quien además, fue la figura más relevante de la literatura uruguaya en la segunda mitad del siglo XX.

 A pesar de que todas sus obras son magníficas, me centraré en una en específico, “La Tregua”; desde un inicio podemos darnos cuenta que no es una novela convencional, donde interviene un narrador que habla sobre la historia de los personajes principales, sino que es el diario personal de Martín Santomé, un hombre maduro de 49 años que espera ansioso su jubilación pues ha trabajado durante toda su vida y necesita un merecido descanso. Los relatos en su diario nos dejan ver que Santomé es un tanto difícil de tratar , o lo sería si dijera todo lo que piensa,  su rostro inspira confianza y su semblante te invita a contarle todo aquello que te aqueja, pero, no obtendrás de él un abrazo, un consejo o palabras de aliento, responde con ironía y hasta un poco de rudeza, aunque supongo es normal esa actitud cuando tu vida familiar no está del todo bien, pues es tu base y el refugio al que puedes acudir cuando todo va mal, y si dicho refugio se desmorona poco a poco, claramente tu actitud hacia el mundo no será la más amable.

Comenzando con Isabel, cuyo recuerdo jamás abandona a Santomé, fue su esposa durante un largo tiempo hasta que murió dando a luz a su último hijo, Jaime, el cual deja la casa con una nota agresiva hacía su padre en la cual revela su homosexualidad, si bien Santomé no tiene una relación tan cercana con sus hijos, Jaime era el que “mejor le caía” y lo reiteraba varias veces en sus escritos.

Una luz llegó a su vida cuando en su trabajo le otorgan 3 subordinados de los cuales destaca Laura Avellaneda, una mujer joven, nada torpe (comparada con sus colegas) y de buenas piernas, después de un tiempo y de varios acercamientos incómodos, Santomé y Avellaneda conforman una pareja tan tierna y romántica que empalaga el corazón.

Y nuevamente, la suerte no está del lado de Martín pues Avellaneda deja de asistir a su empleo algunos días por una gripe común, pero mientras más pasa el tiempo más preocupante es, hasta que  un día, llega la noticia más esperada y menos querida, Avellaneda había muerto y el corazón de Santomé se había destrozado por completo por segunda vez.

Aún sin superar la muerte de Isabel, se suma la de su nuevo amor Laura, y al llegar su tan esperada jubilación ya no encuentra que hacer,  pues el hueco que hay dentro de él le impide pensar en cualquier otra cosa que no sea su desdicha y su mala suerte en el amor, tal parece que la muerte quiere un romance con él y es por eso que le arrebata a sus amadas.

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