MASCARILLAS

MASCARILLAS

Son productos de aplicación facial, compuestos de diversos elementos según las necesidades de su tipo de piel y el objetivo que quiere lograr.

Para que sirven

En forma general las mascarillas tienen la importante función de penetrar diferentes capas de la piel para nutrirla, limpiarla y alisarla de un modo profundo y eficaz.

Aunque para la salud y belleza del cutis deben utilizarse tanto mascarillas como cremas.

Las mascarillas de acuerdo a su tipo, se aplican entre dos y cuatro veces al mes y algunas, de 2 a 3 veces al año.

Esto se debe a que poseen una mayor concentración activa de sus componentes que permiten una mejor y más profunda penetración y unión de los tejidos.

Al ser un producto de alta concentración, no puede usarse diariamente ya que perjudicaríamos la piel.

Tenemos varios tipos de mascarillas:

-De extrema profundidad y duración.

Son las que se utilizan entre 2 ó 3 veces al año, ya que tienen una poderosa concentración de elementos biológicos que estimulan los tejidos de la piel.

-De limpieza.

Se recomienda su uso en pieles grasas y normales.

Estas mascarillas absorben la grasitud e impurezas de la piel, secando los poros y cerrándolos. Además, estiran la piel y activan la circulación sanguínea.

-Nutritivas.

Se utilizan sobretodo en pieles normales a secas.

Su objetivo específico es nutrir, suavizar, engrasar y descongestionar la piel.

-Purificadoras.

Se utiliza sobre todo en aquellos cutis que son propensos a irritarse y a enrojecer.

La mascarilla actúa purificando y aclarando la piel.

-Plásticas.

Forman al secarse una capa uniforme sobre el rostro, de aspecto plástico, que se retira de una sola pieza.

Se aconseja su uso en rostros que denotan cansancio o abatimiento.

-Calmantes.

Su objetivo es la relajación delos músculos del rostro, distendiendo su rigidez, asi como también las arrugas que se forman por los movimientos de expresión de la cara.

-Desoxidantes.

Realizan la desoxidación o renovación de las células de la piel que se encuentran oxidadas, y de esta forma estiran y afinan la epidermis otorgándole mayor nitidez.

-Transparentes.

Su función primordial se encuentra orientada a realizar un estiramiento dela piel y condensación de los tejidos.

Algunas mujeres prefieren utilizar estas mascarillas transparente, ya que estéticamente proveen una mayor elegancia, evitando que se sientan incómodas si alguien pudiera verlas en el momento de su aplicación.

COMO SE EMPLEA

Verdaderos concentrados de cuidados de belleza, las mascarillas han acabado siendo los productos más queridos por la mujer moderna. En el mercado encontramos una oferta muy amplia de mascarillas, con propiedades muy específicas. Relajantes, purificadoras, reafirmantes o hidratantes, ¡descubre cómo escoger la que te embellecerá de los pies a la cabeza!

El principio

Eliminar las impurezas y conservar el brillo y el frescor de la piel.

El método

Todas las mascarillas se aplican sobre la piel cuidadosamente lavada en una capa espesa y se deja actuar unos diez minutos. A continuación, la mascarilla se retira con agua tibia.

¿Un truco? Para optimizar las ventajas de la mascarilla, aplícala tras haberte realizado una exfoliación (como en el centro de estética).

¡Cada tipo de piel con su mascarilla!

Según tu tipo de piel, varía la elección de la mascarilla, de su textura y de su modo de empleo.

¿Tienes una piel normal? Todas las mascarillas te van bien si tu piel te lo reclama.

¿Tienes una piel mixta o grasa? Debes eliminar el exceso de sebo de tu piel, por lo que lo mejor es utilizar mascarillas limpiadoras y purificadoras.

¿Tienes una piel seca o sensible? Por la fragilidad de tu piel, utiliza mascarillas hidratantes.

Repaso de las mascarillas de belleza

Las mascarillas hidratantes: contienen activos hidratantes muy potentes (karité, aceite de germen de trigo, vitaminas) que revitalizan la piel con suavidad. Aunque son aptas para todo tipo de pieles, se recomiendan especialmente para las secas y apagadas.

¿La frecuencia? Una de vez en cuando, en invierno, cuando la piel sufre el frío y la calefacción; o después del verano, para compensar el daño provocado por el sol.

Las mascarillas purificadoras: compuestas esencialmente por arcilla y óxido de cinc, las mascarillas purificadoras corrigen los excesos de sebo, eliminan las impurezas y cierran los poros de la piel dejándola más sedosa. Con un uso regular, la tez se vuelve más brillante.

Aplica una capa de esta mascarilla durante unos diez minutos, evitando el contorno de los ojos y los labios.

Las mascarillas reafirmantes: compuesta por principios activos con efectos tensores que alisan y dinamizan, las mascarillas reafirmantes tienen un efecto lifting.

Algunos productos tienen un efecto rejuvenecedor inmediato y alisan totalmente la piel durante algunas horas (es perfecta para cuando sales de noche). Este tipo de mascarilla se aplica en una capa muy fina y se deja 3 minutos.

Las mascarillas calmantes: reservadas para las pieles sensibles y frágiles, generalmente están compuestas por aceites esenciales y plantas (manzanilla, rosa). Son muy hidratantes, disminuyen la sensación de tirantez e incomodidad, descongestionan y dejan la piel suave y relajada. Aplícala tantas

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