MI PLAN DE VIDA Y CARRERA.

PLAN DE VIDA Y CARRERA

Actualmente, trabajo en donde siempre quise trabajar desde que era un adolescente: viajando por el mundo. Estoy con un puesto gerencial en una de las compañías de crucero más importantes a nivel mundial ganando un sueldo respetable que, por supuesto, pienso incrementar con el paso del tiempo.

Aún no tengo familia, pero estoy en una relación bastante seria que estamos llevando al siguiente nivel, pero planeando cada aspecto para poder llegar a ese momento en que estemos listos para dar el siguiente paso.

Económicamente, aún no tengo un ahorro respetable o que me permitiera comprar una casa.

Mi salud es excelente y sólo llego a tener un poco de deficiencia en mi vista, la cual me operaron hace 10 años y que ahora, es momento de hacer un ajuste.

Por lo tanto…

En 5 años, estoy trabajando en la misma compañía pero con un puesto más arriba, el cual se trata de la planeación de las actividades de cada uno de los barcos (26) de la compañía. Mi oficina está en Miami y mi pareja y yo tenemos una casa como siempre habíamos deseado tener: grande, con piscina y blanca, con ventanales grandes por donde entra mucha luz.

Miami es nuestra ciudad de residencia, pero pasamos los veranos en Puerto Rico, en donde tenemos un pequeño departamento en el Viejo San Juan, justo frente al “Morro”.

Actualmente, estoy casado y tenemos 1 niño varón que está creciendo rápidamente y está en la espera de su primer hermanito que llegará en unos meses más. Nuestro hijo (Axel) está aprendiendo dos idiomas a sus 4 años de edad.

Los dos contamos con un trabajo que nos brinda una estabilidad económica bastante respetable que nos permite vivir como queremos, con dos automóviles y con diferentes propiedades por el mundo.

Sigo disfrutando de una salud muy buena y con kilos de menos, gracias a los 5 km que corro por las mañanas. Mis ojos están operados de nuevo y mi visión es de 20/20.

Soy muy feliz con mi trabajo, mi vida, mis hijos, mi pareja y la felicidad que me embarga al irme a acostar cada noche sin tener preocupación mayor que mis pies no se salgan de la sábana.

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