Mi Nombre Es Khan

Rizvan Khan Rizu es sobreprotegido por su madre desde niño, la única capaz de establecer vínculos emocionales con él. Preocupada constantemente por él, lo sobreprotege y mima, inquieta ante su futuro, involucrándose en su formación afectiva, educándolo para la tolerancia, el amor y la igualdad. Aquí juega un rol fundamental la mirada de la madre, ya que es determinante en el desarrollo de Rizvan.

Esto hace que su madre se involucre en su formación académica, al observar que en la la escuela a la que asistía lo hostigaban y maltrataban, verbal y físicamente.

La escuela, si bien se le atribuye un papel transformador, no fomenta la igualdad de oportunidades, la autonomía (tratamiento educativo para la incorporación a la vida social y ser útil a sí mismo).No se observan los principios de normalización, integración y personalización, sino que todo lo contrario, provoca desigualdad, fracaso y exclusión.

La relación de acoso que se genera diariamente en la escuela entre Rizvan y sus compañeros, al ser tratado como un retrasado, giran en torno a ciertos prejuicios que marcan un estereotipo entre éstos y Rizvan, por moverse con torpeza y actuar de acuerdo a códigos que nadie comprende, ser incapaz de interactuar social y emocionalmente con otras personas, no tener amigos; que lo estigmatizan, así como también su condición de pobreza.

Aquí la alteridad, se hace presente en su madre, que se pone en el lugar de Rizvan y comprende que tiene ciertas necesidades y capacidades que lo hacen diferente de otros niños, por lo que decide buscar un profesor particular, que se ocupe de Rizvan.

En definitiva, la educabilidad de Rizvan tuvo éxito gracias a su madre, ya que fue ella la que llevo a cabo el proceso de socialización, al cual la escuela refiere para que un alumno tenga éxito. En dicho proceso la escuela no fue partícipe, al no contar con los recursos educativos necesarios; y en cuanto a las perspectivas en relación al sujeto, carece de maneras adecuadas de enseñar y de condiciones de enseñanza. Si bien Rizvan asiste a la escuela no tiene acceso, desde su discapacidad, el síndrome de Asperger (que hasta el momento no había sido detectado por nadie)a los distintos niveles de enseñanza. No se establece la inclusión educativa, delimitando una frontera marcando la diferencia entre la normalidad y su contrario, deficiencia y no deficiencia que termina generando la exclusión de Rizvan. Si nos paramos en este aspecto de deficiencia y no deficiencia, que se basa en el nivel intelectual del niño, Rizvan es un niño con alto nivel intelectual, por lo que no debería considerárselo deficiente.

La formación de Rizvan, proporcionada por su madre y sus cualidades innatas producto de esta relación, durante los años que vivieron juntos, es determinante en su desarrollo como adulto, siendo capaz de desenvolverse en la vida con cierta autonomía. Aquí podríamos hacer alusión a la etapa de integración comunitaria de Soder, ya que la buena integración comunitaria fue llevada a cabo por ella.

La relación tan diferente que la madre establece con sus dos hijos, al no inculcar los mismos valores en ambos niños, descuidando inconscientemente al hijo menor, hace que éste manifieste rechazo y envidia hacia Rizvan. Ese distanciamiento materno-filial se traduce en la “intolerancia religiosa”, que el hijo manifiesta de adulto hacia los hindúes.

Al llegar a los Estados Unidos y reencontrarse con su hermano, éste lo recibe sin resentimientos. Asume la responsabilidad de ayudar a Rizvan, su deuda de vida, continuando la de su madre que ya lo había habilitado como sujeto.

Su cuñada, también asume las postas, en su deuda de vida, desde su profesión de psicóloga. Al observar a Rizvan, ella logra diagnosticarle el Síndrome de Asperger, que lo ayuda a desenvolverse mejor.

Con la integración laboral, como

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