Monologos

Monologo: La resentida

(Sentada leyendo, luego cierro el libro)

No soy linda. Pero estudié sociología. No es lo mismo. Es peor (sentada leyendo). ¿Qué color de rouge le va bien a una socióloga? Rojo sangre de mártir popular. Me respetan. Es un plomo que me respeten. Con otras chicas los tipos se ríen, se hacen los tarados. Quedan lindos, un poco más tarados. Claro, conmigo la charla seria, la discusión del marco teórico. Después con las otras, sonrisas y artimañas. A mí no me importaría que mi novio saliese a veces con otra. Por lo menos tendría un novio. No es grave, a veces me dan estos ataques pero después vuelvo a ser yo. Son los valores burgueses que todavía me corroen por dentro, esa cosa machista de que una mujer no puede nada sin un tipo al lado. A mí me educaron para ser una mujercita bien controlada e inteligente. Más allá de este resabio de romanticismo que me agarra a veces, cuando me da un poco el bajón, soy una mujer de mi tiempo. No soy prolija, por ejemplo, me visto como viene. Las taradas de la cátedra a veces me miran con horror. ¿Qué, porque no uso minis, ni escotes?? Se creen que todo es cortar y zurcir. Batir y mezclar. Hornear y parir. Tontas. Estudiaron por no dejar. No conozco a ninguna de ellas que haya hecho un trabajo como el que hice yo. Parece que el trabajito me lo están por publicar en "Cuadernos de Sociología Argentina". Ahí se va Mario. Ni me miró el muy cretino (exclamar). Pero ándate a tu casita burguesa con tu mujercita flaquita. Que estas tetas proletarias no son para ti. Cuando viene a ver me daba bola y yo caía en el pozo femenino. Me salvé. Voy a seguir leyendo, qué manera de perder el tiempo, hoy. (Abro el libro para seguir leyendo).

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