Planificación De Edificios De Bibliotecas: Instalaciones Y Equipamientos Preservación Y Conservación De Materiales
Enviado por juancmn • 12 de Diciembre de 2014 • 4.002 Palabras (17 Páginas) • 386 Visitas
como si se amplia, se restaura o se adapta uno existente. Las Normas para bibliotecas de instituciones de educación superior de la American Library Asociation (ACRL-ALA, 2004) afirman con respecto a las Instalaciones: "El edificio de la biblioteca debe estar bien planificado y debe ofrecer espacio seguro y adecuado para facilitar el estudio y la investigación, con las condiciones medioambientales requeridas para los servicios, personal, recursos y colecciones. Para concluir esta introducción, resaltar que en la bibliografía profesional se hace hincapié en que el personal bibliotecario debe participar activamente junto con el arquitecto y resto de profesionales implicados en la gestión del edificio, tanto a la hora de planificar uno nuevo como de forma continua, para garantizar el adecuado mantenimiento y la adaptación de las instalaciones yequipamientos a lo largo del tiempo. Planificación de edificios de bibliotecas Ni que decir tiene que la colaboración estrecha entre el arquitecto y el bibliotecario es fundamental, la realización o transformación de edificios bibliotecarios es una tarea muy compleja en la que deben colaborar arquitectos y bibliotecarios, entre otros, escuchándose y respetando las propias parcelas de profesionalidad. La planificación del edificio es importante porque es una inversión para mucho tiempo y muy costosa. El bibliotecario debe conocer su biblioteca, sus necesidades, servicios, sus usuarios, los modos de acceso a la lectura y la información que se pretende, etc. El arquitecto ha de señalar qué soluciones técnicas son posibles, respetando el valor histórico del edificio (en el caso que no sea nuevo), qué efectos van a producir sobre preservación, conservación, seguridad y accesibilidad de los fondos; qué circulación de usuarios y personal va a resultar, crear las redes informativas necesarias, etc. Si, como ocurre a veces, arquitectos y bibliotecarios no se comunican lo suficiente, se producen disfunciones que perjudican los resultados para el trabajo futuro de profesionales y usuarios. Es fundamental una cooperación estrecha y desde el principio, reconociendo la independencia mutua en sus respectivos campos, pero con acuerdo en los objetivos fijados por los bibliotecarios, que en este proceso, no debemos olvidar que son "clientes" y deben actuar como tales. La complejidad del diseño de un edificio bibliotecario hace recomendable la creación de un equipo multidisciplinar que quizás podría estar apoyado por un comité asesor de expertos.
La metodología para planificar un edificio de biblioteca muchas veces parte del análisis de la situación existente y de precisar las necesidades futuras y las relaciones del proyecto con el entorno, con los usuarios y con los usos que va a tener. El resultado determina la viabilidad desde un punto de vista arquitectónico, urbanístico, funcional, económico y técnico. En esta fase inicial es necesario tener en cuenta aspectos como:
• Tipo de biblioteca y características del servicio.
• Usuarios potenciales y perspectivas de crecimiento
• Programa de necesidades
• Emplazamiento: localización y datos urbanísticos
• Áreas de influencia espacial y territorial
• Marco normativo de las bibliotecas universitarias.
Posteriormente se pasa a redactar de forma clara y concisa los objetivos y el programa de necesidades, que contendrá al menos:
• Funciones y servicios que debe cumplir la biblioteca
• Características del emplazamiento: localización, superficie, edificabilidad, normativa urbanística, planeamiento urbano, topografía y características geotécnicas.
• Objetivos: por ejemplo, que responda al nuevo modelo de biblioteca en el contexto del EEES, que cumpla los diez mandamientos de Faulkner-Brown, que esté integrado con el tejido urbano, etc.
• Programa funcional de la biblioteca o Definición del tipo y número máximo de usuarios o Descripción del fondo documental
Colección inicial y previsión de crecimiento
Número y tipo de documentos de cada área Sistemas de organización y de consulta del fondo o Personal: número, horario y puntos de servicio o Descripción de los distintos espacios: ubicación, relación entre ellos, superficie mínima o Mobiliario o Resumen de las superficies del programa por áreas y valor aproximado de la superficie construida total
• Requerimientos técnicos: exigencias constructivas.
• Requerimientos ambientales: ruidos, plantas, etc.
• Previsión de costes de inversión y de mantenimiento del edificio y servicio
En estas informaciones se detalla sobre todo la funcionalidad requerida a las diversas áreas del edificio así como las superficies necesarias para las diversas funciones. El programa de necesidades se debe hacer pensando en un edificio de biblioteca que pueda dar múltiples servicios, que sea flexible y con capacidad de adaptación y abierto a las nuevas tecnologías.
Este programa, junto con bibliografía actualizada y el resultado de las visitas a edificios emblemáticos y recientes de bibliotecas, sirve de base para la redacción del pliego de condiciones técnicas al que deberá ajustarse la redacción del anteproyecto o del proyecto básico, que puede ser sacado a concurso o ser directamente encargado a un arquitecto.
Los espacios y sus relaciones
En la distribución de los espacios de una Biblioteca se contemplan varias zonas funcionales que en la literatura y en la práctica profesional reciben diversas denominaciones más o menos similares:
• Área de acceso / Zona de acogida y promoción / Espacios de entrada
• Área de servicio público / Zona General / Espacios de consulta-trabajo y búsqueda de información
• Áreas de trabajo interno / Zonas de trabajo interno / Espacios de servicios internos
• Depósitos / Zonas logísticas / Almacenes / Espacios para depósitos de Libros Estas zonas se subdividen en distintos espacios, como veremos con mayor detalle a continuación. La separación entre áreas de uso público y de trabajo interno cada vez es menos clara al hacerse hincapié en la necesidad de romper las barreras espaciales que separan al personal bibliotecario de los usuarios; a la necesaria privacidad para la realización de algunos trabajos internos, hemos de anteponer la relación visual y la comunicación con los lectores. La circulación interior de usuarios, personal y documentos es un elemento clave en la distribución de los espacios y el funcionamiento general de una biblioteca y hay que tenerla muy en cuenta en el proyecto de construcción y/o remodelación de la misma.
Algunas recomendaciones básicas sobre la circulación por el interior de la biblioteca serían:
• La circulación de los usuarios no debe ser interrumpida
...