Programa civico El miedo del león
Enviado por Laura Edith Ruiz Martínez • 23 de Diciembre de 2017 • Trabajo • 585 Palabras (3 Páginas) • 115 Visitas
PROGRAMA CÍVICO
Muy buen día tengan todos los presentes, Maestra Cruz María Baños Rojas y Maestro Elfego Puerto Solís, directora y subdirector de esta escuela, profesores y compañeros alumnos que hoy nos acompañan.
Hoy lunes 18 de Diciembre de 2017, daremos inicio a los Honores correspondientes a la bandera, por parte del Primer año grupo “B”, por lo que pedimos mantengan la compostura correcta a este evento.
· Como primer número rendiremos honores a nuestra bandera nacional bajo los acordes de la banda de guerra.
· Juramento a la bandera, por mi compañero ______________________
· Se entonará el Himno Nacional Mexicano dirigido por la banda de guerra de esta institución.
· En estos momentos la escolta hará el recorrido para que nuestro lábaro patrio sea depositado en su nicho de honor. Acompañado de las notas musicales de la banda de guerra.
· Lectura de Reflexión, leída por mi compañera ______________________
El Primer año grupo “B” les damos las más sinceras gracias por participar en este acto cívico. Enseguida, el subdirector de esta escuela, el Maestro Elfego Puerto Solís, nos dará las indicaciones de esta semana.
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- La palabra escrita es la forma de expresar nuestros sentimientos.
- El sentimiento de todo mexicano hace recordar y celebrar los hechos y acontecimientos pasados.
- Como máximo símbolo de nuestra patria debemos respetarla, además jurar en su presencia.
- Las notas gloriosas despiertan en todos los mexicanos una gran emoción y amor a nuestra patria.
- Su belleza de los tres colores enaltecen a nuestro país porque es nuestro máximo símbolo de Identidad Nacional.
- La palabra es fundamental en el dialogo, y el dialogo es indispensable en la solución de problemas.
El miedo del león.
En una ocasión, un león se aproximó hasta un lago de aguas cristalinas para calmar su sed y, al acercarse a las mismas, vio su rostro reflejado en ellas y pensó: ¡vaya! Este lago debe pertenecer a este león. Tengo que tener mucho cuidado con él. Atemorizado, se alejó de las aguas, pero tenía tanta sed que regresó al cabo de un rato. Allí estaba otra vez el león. ¿qué hacer? La sed lo asfixiaba y no había otro lago cercano. Retrocedió. Unos minutos después volvió a intentarlo y, al ver al león, abrió las fauces de forma amenazadora, pero al comprobar que el otro león hacia lo mismo, sintió terror. Salió corriendo, pero ¡era tanta la sed! Lo intentó varias veces de nuevo, pero siempre huía espantado. Pero como la sed era cada vez más intensa, tomó finalmente la decisión de beber agua del lago sucediera lo que sucediera. Así lo hizo. Y al meter la cabeza en las aguas, el león desapareció!
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