Propiedad horizontal Examen Cuarto Bimestre Secundaria Tercer Grado

La propiedad horizontal, se encuentra denominada por la Ley 675 de 2001 como una “forma especial de dominio”, pues es una novedosa figura que, con su creación, estableció algunas excepciones o deformaciones a ciertos estándares o "moldes clásicos" del derecho privado, siendo pues un dominio en el cual convergen la titularidad de unidades privadas y la titularidad de los bienes comunes; alejándose del modelo de comunidad ordinaria planteada por el Código Civil y dando paso a la creación de una persona jurídica. Asimismo, este régimen nos propone la cuestión de si la propiedad horizontal es muestra del desarrollo y dinamismo no sólo del ordenamiento jurídico sino de la sociedad en general.

En el contexto jurídico, la propiedad es el derecho real que una persona tiene sobre un bien y que le faculta usar, gozar y disponer de dicho objeto con libertad; es el Código Civil, apoyado por la Constitución Nacional, el encargado de regular en materia de dominio, sin embargo, el modelo planteado por el mismo se ha visto afectado en el tiempo por regulaciones especiales que se alejan de lo que tradicionalmente el Código Civil establece para el dominio y un claro ejemplo de ello es la propiedad horizontal; pues el Código, no pudo prever un modelo de propiedad en el que concurriera la titularidad del propietario sobre el bien de dominio particular, que le otorga las facultades de usar, gozar y disponer de él y la copropiedad sobre unos bienes comunes esenciales y no esenciales.

Al tener una regulación especial, la propiedad horizontal, genera dudas con respecto a varios puntos, dentro de los cuales se destaca el proceso de origen y enajenación. El propietario

de un terreno o construcción inicial cuentan con la facultad de someter los bienes a este tipo de propiedad, de tal manera que, manifestando su voluntad por escritura pública adjunta al reglamento de propiedad horizontal, se registra en la respectiva oficina de registro de instrumentos públicos y da surgimiento a la persona jurídica; al momento de la enajenación y transferencia del dominio de los bienes privados, en ella se encuentra incorporado el derecho a la cuota indivisa sobre los bienes de uso común y a su vez se asignan los coeficientes de copropiedad según el caso; con todo ello, permitiendo el origen de beneficios como: la titularidad ejercida sobre bienes comunes y bien privado, la posibilidad de formar parte de la persona jurídica para con ello participar en la administración de los bienes y deliberación mediante la Asamblea General de Propietarios, y la potencialización de la convivencia correctamente regulada y acordada por los copropietarios.

Adicionalmente, existe la posibilidad de flexibilizar el proyecto de propiedad horizontal para que un proyecto pueda acondicionarse a un mercado inmobiliario y obtener

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