Refugio

Refugio

El concepto de refugio de proyección Europea más bien nueva, el cual nació para resolver la crisis que se presentaba tras la segunda guerra mundial. El concepto de refugiado está regulado por la convención sobre el estatuto del refugiado, la cual fue aprobada en Ginebra el 28 de julio de 1951 y que ha sido modificada por el protocolo sobre el estatuto de los refugiados, aprobada en Nueva York el 31 de enero de 1967.

La convención sobre el estatuto del refugiado de 1951 define al refugiado como:

“debido a fundados temores de ser perseguida por motivos de raza, religión, nacionalidad, pertenencia a determinado grupo social u políticas, se encuentre fuera del país de su nacionalidad y hallándose, a consecuencia de tales acontecimientos, fuera del país donde antes tuviera su residencia habitual, no pueda o, a causa de dichos temores, no quiera regresar a él” (art. 1.A.2).

Elementos de la figura de refugio:

• Que el sujeto se encuentre afuera de su país de nacionalidad.

• Que tenga un temor fundado de persecución.

• Que la persecución en cuestión sea motivada por su raza, religión, nacionalidad, pertenencia a determinado grupo social u opiniones políticas (art. 1.A.2).

Estos tres elementos nombrados anteriormente tienden a limitar el concepto de refugiado, el cual se modifico con el protocolo sobre el estatuto de los refugiados, aprobada en Nueva York el 31 de enero de 1967, con el fin de darle mayor importancia a la parte subjetiva del elemento número 2 de la convención de 1951.

Clausulas de exclusión estipulada en la convención de 1951:

• Que ha cometido un delito contra la paz, un delito de guerra o un delito contra la humanidad, de los definidos en los instrumentos internacionales elaborados para adoptar disposiciones respecto de tales delitos;

• Que ha cometido un grave delito común, fuera del país de refugio, antes de ser admitida en él como refugiada;

• Que se ha hecho culpable de actos contrarios a las finalidades y a los principios de las naciones unidas.

En 1984 varios países americanos suscribieron la declaración de Cartagena, que amplía la definición clásica de refugiado, la cual adopta los conceptos del la convención de 1951 y el protocolo de 1967, anexa lo siguiente: “considere también como refugiados a las personas que han sido amenazadas por la violencia generalizada, la agresión extranjera, los conflictos internos, la violencia masiva de los derechos humanos u otras circunstancias que hayan perturbado gravemente al orden público”.

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