Reporte Cartas a quien pretende enseñar, octava carta
Enviado por Paracho4 • 28 de Febrero de 2019 • Ensayo • 488 Palabras (2 Páginas) • 445 Visitas
Grupo Escolar
Reporte de lectura
“CARTAS PARA QUIEN PRETENDE ESNSEÑAR, OCTAVA CARTA”
Bueno en este texto podemos ver que tan importante es la identidad de cada uno de nosotros, en la práctica docente porque la identidad de los estudiantes está muy influenciada por su entorno, diversidad además con las cuestiones del plan de estudios donde permean los intereses implícitos (terminar con las lenguas maternas) y explícitos (manejar un solo modelo educativo para todos para podernos relacionar) debemos ser humildes para aceptar y vivir con la gran diversidad que existe.
Para empezar sabemos que vivimos en un país donde existe una gran diversidad de: razas, culturas, lenguas, personas, idiomas, especies animales, plantas, etc. Para, lo cual, debemos adjudicarnos un sentido de identidad cultural para saber qué clase de sujeto somos, aquí, es cuando hablamos de “la enseñanza aprendizaje” porqué ya sea; como docente o como alumno debemos saber o tener en cuenta quien eres adonde perteneces y a dónde quieres llegar. Y dependiendo del papel que desempeñemos podemos dar o recibir una enseñanza de calidad. Porque el hombre está diseñado para aprender y practicar ya sea de forma empírica o científica. Como se dijo anteriormente, vamos adentrarnos a la identidad cultural sabemos que los alumnos están sujetos a un entorno social y cultural en el cual ellos ya están identificados en un sistema de vida, donde la práctica es servicial hacia los demás se van adoptando valores que ponen de manifiesto en todo momento su sencillez y humildad. Para lo cual es fundamental o tal vez hasta un deber conocer a nuestros alumnos como es su vida, sus sueños, su leguaje, el entorno donde se desenvuelven para mostrarles que su cultura es muy valiosa, que no tienen por qué avergonzarse de ella logrando así disminuir sus ventajas en la lucha diaria. Entender que hay diversas formas de ver y de percibir el mundo y a la renovación de nuestras prácticas pedagógicas que nos lleven a la búsqueda de nuevos saberes y conocimientos culturales. Al educar nosotros no debemos ponernos en un plan agresivo con los niños queriendo cumplir los planes implícitos del programa de estudios el cual tiene como propósito la unificación de culturas a partir de sus propósitos explícitos con el manejo de un sólo idioma universal para comunicarnos entre sí, para minimizar nuestra expresión sociocultural. Tampoco debemos caer en el error de compadecerlos por ser parte de la cultura a la cual quiere agotarse.
Para concluir aterrizaremos en que nuestra labor, debe ser la de saber y conocer todo el medio que rodea a nuestros alumnos y a nosotros, para lograr que ellos forjen sus valores, no podemos tener dudas sobre el poder de la herencia cultural, sobre cómo nos lleva como educadores, sino adentrarnos a ella comprendiéndola y así aplicarla para identificarnos con algo, reconociendo a los demás con humildad y respeto, terminando en llevar por buen camino a los educandos.
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