Resumen Jarrón Azul

. A las tres de la tarde Peck fue en busca del jarrón fue a la calle informada por “Cappy y no encontró ningún jarrón azul. El afirmó de que se había ocupado y que era mejor de hablarle por teléfono. Peck hablo a la casa de su jefe ella le contesto con la noticia de que cappy no se encontraba. Peck siguió buscando por la calle hasta que empezó a buscar en otras. En la última en la que buscaba vio aquel jarrón azul. Inmediatamente entró a la tienda pero la puerta estaba cerrada. Levantó la mirada y se percató de que el lugar se llamaba “Brownse’s Art. Shop”. Se dirigió fugazmente hacia algún hotel para pedir prestada una guía telefónica. Empezó a buscar el nombre de aquel negocio sin encontrarlo. Entonces pidió en el hotel un directorio de los habitantes de la cuidad y encontró a B. Browne dueño de la tienda, pero no decía la dirección de su residencia. Agarró nuevamente la guía telefónica y llamó a todos los brownes que habían en la cuidad y sin éxito llamo a todos los apellidos Browne en todo San Francisco pero el resultado fue el mismo. Siguió insistiendo llamando a pueblos aledaños a San Francisco. ó insistiendo llamando a pueblos aledaños a San Francisco. Ya era las seis de la tarde y Peck volvió a la tienda y asombrado obsevó que el negocio realmente decía Brown. Llamo a todos los Brown que aparecía en la lista telefónica hasta dar con el dueño del domicilio, solamente de que respondió una sirvienta diciendo de que su amo estaba en comiendo en la casa de un tal Mr. Simon que estaba en Mill Valey. Había tres Mr. Simon en Mill Valey así que Peck llamó a todos hasta encontrar la casa dónde comía él señor Brown. Alguien más le contestó y el que por favor pasaría la comunicación con Mr. Brown diciendo que su tienda se estaba incendiando. Inmediatamente paso el teléfono a Mr. Brown, el respondió preocupado. El le aseguró de que su tienda no estaba en llamas pero que regresará su tienda para que le vendiera ese jarrón azul. Brown no quiso volver pero le dijo que le hablará a Mr. Herman Joost le dio su teléfono para que le digiera de que fuera abrir el bazar y venderle el jarrón. El llamó y pero no pudo comunicarse con el encargado. Desesperado planeó de que la única solución es romper el vidrio y robar el jarrón. Al llegar vio a un policía y dio otra vuelta al llegar nuevamente se dio al ver el cartel iluminado decía browne y no Brown. Volvió a llamar a Mr. Herman Joost y tuvo suerte a que le contestarán dijo que el llegaría a las nueve. Al llegar le dijo que el precio del jarrón era de dos mil dólares. Peck pidió prestado el teléfono y llamó a Skinner para pedir prestado dinero el no pudo ayudarle y hablo a la casa de “Cappy” con el conocimiento de que podía estar Mr. Peasly. El le contó lo que quería Peasly le aconsejó de que se olvidará del jarrón que de todos modos el tren ya había salido. Peck se reusó a abandonar y dijo que tenía un amigo en

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