Soliloquio de Segismundo- La vida es sueño

En este soliloquio de Segismundo, es claro que el tema principal es el examen interrogatorio de si mismo que se hace Segismundo para buscar a un sentido de la vida. Él describe una escena en que habla con todo el mundo como si todos quisieran castigarle para haber cometido un gran delito. Repetidamente él dice que el mayor delito de toda la humanidad es simplemente haber nacido, una cosa que en realidad es por natura inevitable... Y por eso para ser humano es necesario ser un criminal, un prisionero en la propia mente. En este soliloquio Segismundo lucha contra esta verdad .

Segismundo alude al ave, al bruto, al pez y al arroyo principalmente para demonstrar que no tienen la misma profundidad de pensar del hombre pero sólo la capacidad de sobrevivir – por ejemplo el pez moriría si dejara el mar. Él cree que este aumento de conciencia y capacidad debería dar al hombre más libertad, pero realmente hace su vida triste y él se siente perdido porque el hombre hace preguntas, pero no puede responderlas.

Con la palabra “cielos” Segismundo se refiere a Dios o a otra fuerza sobrenatural. Contra el cielo él grita, él busca a un sentido fuera de su mundo porque está cansado de la incapacidad de escapar la natura humana que nos dice que todos somos criminales para haber nacido y atrapados en nuestros pensamientos. Para Segismundo el haber nacido es un delito, el mayor delito, porque es una verdad y realidad universal del ser humano el preguntarse cosas como “¿Porque estoy aquí? ¿Qué finalidad tengo? ¿Estoy libre de verdad?” y estas preguntas, que no tienen respuestas claras, al final les hacen a los hombres la vida humana miserable. Él cree que es el destino universal porque nadie puede escapar su nacimiento, y por lo tanto, escapar del ser humano y pensar en la misma manera.

La metáfora del volcán es muy significativa porque da gran énfasis a la magnitud de la turbulencia en los pensamientos de Segismundo. Sus pensamientos son como explosiones poderosas que él no puede controlar o como lava que consuma todo lo que cruza. Esta locura que experiencia Segismundo que saca de su pecho pedazos del corazón, es una realidad de toda la humanidad...

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