“Tanto la innovación como las habilidades y competencias son los mayores retos para hacer que América Latina pueda alcanzar su potencial de crecimiento y competitividad pleno”

LA COMPETITIVIDAD

“Tanto la innovación como las habilidades y competencias son los mayores retos para hacer que América Latina pueda alcanzar su potencial de crecimiento y competitividad pleno”, esta es una de las expresiones dichas en el foro económico mundial donde unos de los temas a tratar fue las deficiencias en el crecimiento y desarrollo de los países en Latinoamérica.

Hablando con sinceridad el crecimiento de américa latina se está desacelerando, y sigue siendo muy vulnerable a las condiciones externas a menos que la región latina fortalezca los fundamentos de su economía y del mismo modo aumente la productividad.

Claramente existe una brecha entre las necesidades de talento para mantener el nivel de crecimiento y elevar la productividad y competitividad de los negocios a nivel global, y la formación del capital humano disponible en el mercado; es decir que hay inversión insuficiente en materia de innovación y talento especializado y esto se ve reflejado en la educación superior, que podríamos decir que en cientos países la calidad de la educación no alcanza un nivel promedio, así como también se ve reflejado en la falta de capacitación, investigación y desarrollo.

Para abordar todas estas falencias debemos desarrollar la habilidad de adaptación de cambios que vive el mundo constantemente, planificar un plan de acción enfocado en la innovación, el emprendimiento y adquisición de competencias, aplicándolo fundamentalmente a través de la educación; es decir, hay que impulsar a los estudiantes a hacia una cultura empresarial innovadora.

Por otro lado, América Latina requiere aún de importantes avances en temas de productividad y competitividad, ya que su crecimiento potencial podría ser mayor con avances en materias como la innovación, la mejora de la eficiencia en el mercado laboral, el desarrollo de los mercados financieros, las infraestructuras, las instituciones o el comercio intrarregional, entre otros indicadores.

Los gobiernos de la región deben focalizar sus esfuerzos en la promoción y visibilidad de sus instrumentos y programas de innovación empresarial, particularmente entre las pymes ya que estos tipos de empresas son precisamente la que tienen poca participación a la hora de innovar, caracterizándose por la baja introducción de tecnologías y el escaso dinamismo, lo que ha hecho que este grupo de empresas no hayan  logrado un aumento de productividad respecto de las grandes empresas para que puedan insertarse dinámicamente en el mercado. Y Para lograr esto, es necesario focalizar políticas referidas a la disminución de la brecha entre las empresas de distinto tamaño. Estas políticas deben considerar las restricciones y barreras de entrada que enfrentan las pymes al innovar.

De igual modo, las políticas deben considerar la carencia de recursos humanos calificados, el escaso acceso al crédito y a los mercados internacionales, así como su vinculación con programas gubernamentales que permitan un rápido crecimiento estructural a estas empresas.

Finalizando, se puede decir que son muchos los aspectos a mejorar para acelerar el crecimiento y desarrollo de los países latino, pero hay que enfocarse en aquellas que servirían de puente para lograr dichos objetivos. La base del desarrollo de un país es la educación, reformemos nuestro sistema educativo y fortalezcamos nuestras capacidades para así obtener cambios estructurales en materia de desarrollo económico en los países.

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