Testimonio De Amada Rosa Perez

Testimonio de Amada Rosa Pérez.

Estudiante: Liliana Carolina Rujano Contreras

Cada ser humano tiene una historia de vida diferente, pero es muy cierto que gran parte de las personas que habitamos este mundo constantemente nos dejamos llevar por la ambición, la codicia, la envidia y cualquier cantidad de pecados los vamos albergando dentro de nuestro corazón dejándonos llevar por cualquier cantidad de banalidades dando importancia muchas veces a lo material más que ni a la propia vida, cometiendo cualquier cantidad de pecados, pensando que vamos a ser más felices cuando en realidad estamos en el error más grande de todos. Dios ha puesto en este mundo todo lo que necesitamos sin embargo somos tan ambiciosos que siempre estamos en busca de mas y mas, como mencionaba anteriormente muchas veces dejándonos arrastrar por demonios que nos llevan a cometer pecados para lograrlo, somos tan egoístas que no nos importa estar mal ante los ojos de Dios solo para estar “FELICES”, pero en las ocasiones difíciles es cuando recordamos que Dios existe y ahí sí que pedimos de su ayuda y redención, es admirable el gran paso que dio Amada Rosa Pérez, entregando su vida a nuestro señor reconociéndolo como su Amo y ella su fiel servidora, al darse cuenta que tenía todo y no tenía nada, que vivía en un mundo vacio, solo lleno de tristezas y depresiones constantes que solo logro saciar al recibir a Dios Todopoderoso en su interior, es cierto que fue un camino muy largo y duro pero finalmente lo logro, pero más duro era el mundo en que se había sumergido tal vez por la inexperiencia de la juventud y una cabeza llena de deseos e ilusiones, esto nos lleva a una reflexión sobre la crianza de nuestros hijos y para experiencia personal propia, mas ahora que si nos sentamos a observar como están las cosas hoy en día y como eran hace 20 años atrás, es impresionante como esta tan degradada nuestra sociedad, y cada día es mucho peor, es alarmante ver como cada vez más nos alejamos del camino de Dios, no tomamos un minuto de nuestro tiempo para elevar una plegaria o agradecerle por todo lo que nos da siempre con la excusa de las múltiples ocupaciones y el cansancio y no vemos que Dios nunca se cansa de ver y perdonar nuestros pecados, de auxiliarnos en los momentos más difíciles, de darnos cada día un nuevo y resplandeciente amanecer para enmendar y culminar todo lo que no logramos hacer el día anterior, de permitirnos tener la maravillosa familia que nos dio así nos quejemos constantemente de ellos por una u otra razón, el nos da dos opciones de vida seguir su camino o desviarnos al equivocado, es decisión de cada uno de nosotros cual vamos a tomar, y si es el equivocado Dios siempre estará allí esperándonos para encaminarnos por el del bien.

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