Todo Sobre la información genética en el ámbito jurídico.

ADN y la evolución del hombre

Juan Sebastián Mendoza

Grandes proyectos de investigación a nivel global han revolucionado la manera en que el hombre puede modificar y entender su existencia en el mundo. Investigaciones como el Proyecto Manhattan, que pudo encontrar una manera, (actualmente) de generar una cantidad de energía colosal con un método amigable con el medio ambiente, a partir de energía liberada por la fisión nuclear o El Proyecto Apolo que permitió la llegada del hombre a la luna, todo esto acompañado de una puesta masiva de satélites en el espacio que hoy facilita la vida del ser humano.

Es de creer que todos estos proyectos han facilitado de alguna manera la existencia humana por ejemplo, hoy en día la comunicación es una herramienta de fácil acceso ya que, los satélites logran una cobertura casi total del globo, facilitando la comunicación entre personas y su vez toda la energía demandada por estos procesos, viene por lo general suministrada por la energía atómica, sin embargo estas grandes y poderosas herramientas conllevan una gran responsabilidad, pues cuando no se emplea con responsabilidad originan estragos, es pertinente comenzar citando particularmente el gran impacto que genero la detonación de bombas atómicas por parte de los Estados Unidos, para la destrucción de Hiroshima y Nagasaki, dejando más 250 000 muertes, o asimismo la vulneración de los derechos fundamentales con la llamadas “chuzadas” por partes de entidades estatales, que con el uso indebido de los satélites pudieron interceptar y espiar diferente información de uso privado.

De ahí que el hombre sigue y seguirá innovando en términos de proyectos de investigación, se seguirán obteniendo herramientas cada vez más poderosas que conllevara una responsabilidad cada vez más grande por parte de quienes hacen uso de esta misma, un ejemplo de estos es el reciente Proyecto - Proyecto Del Genoma Humano (PGH).

Este proyecto básicamente pretende ubicar y conocer el papel de los genes que constituyen al ser humano. Este es un proyecto relativamente fresco, empezó su discusión en la década de 1980 y desde entonces hasta el año 2000 se produjeron diferentes dificultades y contratiempos debido a que tenía grandes objetivos que prometían a nivel; económico, político, clínico-científico y ético-moral  desde:

• Identificar y mapear los 30 00 o 40 000 genes que se calculan que existen en el ADN de las células del cuerpo humano y construir un diagrama descriptivo de cada cromosoma humano.
• Determinar las secuencias de los 3 billones de bases químicas que componen el ADN humano.
• Almacenar la información resultante en una base de datos y desarrollar herramientas eficientes para iniciar nuevas investigaciones biológicas.
• Desarrollar paralelamente estudios en otros organismos seleccionados, principalmente microorganismos, permitiendo desarrollar tecnologías que posibiliten una mejor interpretación de la compleja función de la genética humana (información comparativa).
• Prevenir, tratar y curar dolencias Medicina Preventiva y Predictiva

(Martín Ross, 2002)

Al poder obtener y entender semejante herramienta era de esperarse que para ese entonces, principios de 2001, se empezarán a realizar investigaciones y descubrir diferentes usos de esta herramienta, de las que más llamaba la atención aparte de todo el impacto que tenía a nivel económico como patentes y diferentes usos dentro de la lógica de mercado, era la identificación de la terapia génica o GENO-TERAPIA

Estas investigaciones acerca de la terapia génica o GENO-TERAPIA, se basaba encontrar una relación lo suficientemente fuerte entre genes-enfermedad, para poder alterar el genoma y así poder contrarrestar o hasta curar la enfermedad. Una definición más concreta y científica; “La terapia génica consiste en introducir en las células del individuo enfermo una copia sana del gen defectuoso, la idea parece sencilla pero su aplicación resulta bien compleja” (Martín Ross, 2002). 

Estas enfermedades son en gran parte enfermedades que perjudican y arremeten contra un buena parte de la población mundial, por lo que su descubrimiento potencialmente cambiaría la calidad de vida de la personas.

En general;

• Le permite conocer al sujeto pero también a terceros el estado de salud actual y prever la mayor o menor propensión a padecer enfermedades futuras.
• Permite detectar predisposiciones genéticas de los individuos y capacidades de diversa naturaleza.
•  Aporta datos relevantes que pueden trascender el ámbito exclusivamente individual para afectar a la descendencia, a un grupo familiar o étnico determinado y, en última instancia, a un “patrimonio genético” común -pero diverso- de toda la Humanidad.
•  Puede aportar información para el futuro aunque la relevancia de dicha información no se conozca en el momento de extraer las muestras biológicas
• Aporta datos que podrían ser utilizados en campos muy diversos de la organización de las sociedades (cultura, medio ambiente, educación, biodiversidad.

(Sánchez)

Estos descubrimientos son muy polémicos dentro de muchos sectores, es por esto que resulta importante analizar los diferentes usos y responsabilidades que conlleva la utilización de estos métodos, para la cura y mejora de calidad de vida de la personas.

Dentro de los que más preocupa es la intimidad y uso de la información genética de la población que potencialmente podría verse vulnerada. Dentro de estas transgresiones vemos casos como el de las denuncias a los bancos genéticos, que violan la confidencialidad  de estos datos para diferentes usos de tipo económico o político por lo que estos entes o bancos realmente mente pierden autonomía, y terminan siendo dependientes de alineamientos políticos y económicos, lo cual en teoría no está permitido.

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