Tratado De Libre Comercio

El Tratado de Libre Comercio que se estableció entre los tres países que conforman América del Norte, se fundó con un fin el de permitir el crecimiento de la economía de estos tres países, México, Estados Unidos de América y Canadá, permitiendo a cada uno desarrollarse como una economía fuerte, esto siempre y cuando no se contrapusieran a los acuerdos establecidos dentro del tratado, a continuación se narra una breve reseña sobre su origen, principios y objetivos del Tratado de Libre Comercio de América del Norte.

El tratado de libre comercio de América del Norte, en el cual establecen relación de sus comercios Estados Unido de América, Canadá y México, fue firmado por México el 17 de diciembre de 1992 y entro en vigor por primera vez el 1 de enero de 1994, una vez que concluyeron todos lo procedimiento internos de cada legislación de los países participantes en el, para que se llevara a cabo su aprobación.

En él se expone los principios y aspiraciones que constituyen el fundamento del Tratado. Los tres países confirman su compromiso de promover el empleo y el crecimiento económico de cada uno, así como la cordial relación que surgiría entre ellos, mediante la expansión del comercio y de las oportunidades de inversión en la zona de libre comercio. También confirman su convencimiento de que el Tratado de Libre Comercio permitirá aumentar la competitividad internacional de las empresas mexicanas, canadienses y estadounidenses, con la protección del medio ambiente. Se reitera el compromiso de los tres países para promover el desarrollo sostenible, proteger, ampliar y hacer efectivos los derechos laborales, así como mejorar las condiciones de trabajo en los tres países.

Una de las disposiciones iníciales del Tratado, establecen formalmente una zona de libre comercio entre México, Canadá y EEUU, de conformidad con el Acuerdo General sobre Aranceles Aduaneros y Comercio (GATT), el antecesor de la Organización Mundial de Comercio (OMC). Estas disposiciones proveen las reglas y los principios básicos que regirán el funcionamiento del Tratado y los objetivos en que se fundará la interpretación de sus disposiciones.

Tienen objetivos muy claros, eliminar las barreras del comercio, promover condiciones para una competencia justa, incrementar las oportunidades de inversión y así no quedarse con una economía estancada, proporcionar una protección adecuada a los derechos de propiedad intelectual, establecer procedimiento efectivos para la aplicación del tratado y la solución de controversias, además de siempre fomentar la cooperación trilateral, regional y multiregional, no haciendo ningún tipo de discriminación. Todos estos objetivos se pueden lograr mediante el cumplimiento de los principios y reglas del tratado, como los de trato nacional, trato de nación más favorecida y transparencia en los procedimientos.

Cada país reafirma sus respectivos derechos y obligaciones derivados del GATT y de otros convenios internacionales. Para la interpretación de ellos en caso de conflicto, se establece que prevalecerán

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